(CNN Business) – Durante años, los creyentes de la teoría de la conspiración de QAnon habían estado esperando el momento en que se pusiera en marcha un gran plan y los miembros secretos de una supuesta red pederasta satánica en los más altos rangos del gobierno y Hollywood serían expuestos de repente, detenidos y posiblemente incluso ejecutados públicamente. Casi siempre estuvieron seguros de que ocurriría pronto, pero “La Tormenta” nunca llegó, y el momento de la toma de posesión de Joe Biden era la última oportunidad posible para que el presidente Donald Trump pusiera el plan en marcha.
Pero cuando Biden levantó la mano y juró defender la Constitución, convirtiéndose en el 46º presidente de la nación, no pasó nada.
El anticlímax envió a los seguidores de QAnon a un frenesí de confusión e incredulidad, rompiendo casi instantáneamente una ilusión colectiva que había sido alimentada y amplificada por muchos en la extrema derecha. Ahora, además de quedar dispersos en varios sitios web más pequeños después de que Facebook y Twitter tomaron medidas enérgicas contra el contenido relacionado con QAnon, los creyentes se arriesgan a que su propio mundo al revés quede de cabeza, o quizás de pie.
Entre la decepción y nuevas teorías
Miembros de un canal de Telegram centrado en QAnon y algunos usuarios del panel de imágenes 4chan se comprometieron a mantener la fe. Otros anunciaron que renunciaban a sus creencias. Otros más idearon nuevas teorías que pretendían llevar el enfrentamiento final más hacia el futuro. Uno de los íconos más visibles de la ideología, Ron Watkins, conocido con el apodo en línea de CodeMonkeyZ, llamó a sus seguidores a “volver a nuestras vidas”.
“Los seguidores más acérrimos de QAnon están confundidos”, dijo Daniel J. Jones, presidente de Advance Democracy, una organización no partidista sin fines de lucro que rastrea los grupos extremistas y la desinformación en línea. “Después de años de esperar el ‘Gran Despertar’, los seguidores de QAnon parecían genuinamente conmocionados al ver al presidente Biden tomar posesión con éxito. Un porcentaje significativo en línea escribe que ya se cansaron de QAnon, mientras que otros están redoblando la apuesta y promoviendo nuevas conspiraciones”.
La diversidad de reacciones subraya el futuro incierto que enfrenta ahora el movimiento QAnon, al que las empresas de tecnología habían permitido que hiciera metástasis en sus plataformas durante años, pero no comenzaron a tomar medidas en serio hasta 2020.
La teoría de la conspiración sin fundamento ha estado circulando desde 2017. Además de alegar una vasta conspiración de tráfico de niños, aquellos fueron atraídos por la teoría afirman que los burócratas del gobierno que conforman un “estado profundo” estaban trabajando silenciosamente para socavar la agenda del presidente Donald Trump. El propio Trump alimentó las afirmaciones al negarse a denunciarlas públicamente en la televisión nacional.
Y las personas que se identificaron como parte del movimiento QAnon eran parte de la multitud de partidarios de Trump que irrumpieron en el Capitolio a principios de este mes.
Había entusiasmo entre seguidores de QAnon antes de la ceremonia
Tras los disturbios, los partidarios de QAnon esperaban con entusiasmo el momento de la investidura de Biden.
“A medida que la soga se aprieta alrededor del estado profundo, algunas personas están cada vez más desesperadas por desacreditar a Q”, publicó un usuario de 4chan el miércoles por la mañana. “Supongo que lo que dicen es cierto. Las críticas son más fuertes cuanto más te acercas a tu objetivo”.
Pero después de que la juramentación de Biden comenzó y terminó, vino el pánico.
“Nos prometieron arrestos, denuncias, régimen militar, documentos clasificados. ¡¡¿¿Dónde están??!!”, escribió un miembro del canal de Telegram vinculado a QAnon, que tiene casi 128.000 suscriptores.
“Tengo miedo, me siento mal del estómago, pero me mantengo firme”, dijo otro.
“Bueno, los bebés todavía están siendo violados y se los comen, en cualquier maldito minuto DIOS”, dijo otro.
Algunos comenzaron a aceptar la verdad.
“Biden es nuestro presidente”, dijo un cuarto usuario en el canal de Telegram. “Es hora de dejar nuestros dispositivos y volver a la realidad. Si pasa algo, pasa algo, pero por ahora cerraré la sesión en todas las redes sociales. Ha sido divertido, chicos, pero lamentablemente se acabó”.
Otros creyentes insistían en que la falta de un clímax era en sí mismo parte del plan, teorizando que Trump simplemente “permitió” que Biden se convirtiera en presidente “por las apariencias”, mientras que el exconductor de telerrealidad sería el que manejaría los hilos. “Todo lo que suceda en los próximos 4 años en realidad lo hará el presidente Trump”, escribió un usuario de 4chan.
Temen más violencia
“Es un lío candente, francamente”, dijo Carla Hill, investigadora del Centro de Extremismo de la Liga Antidifamación, sobre las diversas reacciones de los creyentes de QAnon. “La frustración comenzó a filtrarse. Hay algo de vergüenza, algo de ira … Una serie de [nuevas] conspiraciones están surgiendo de esto y están discutiendo entre ellos”.
La aparente facilidad con la que algunos creyentes de QAnon han podido ajustar la teoría para adaptarse a los nuevos eventos subraya lo escurridiza que puede ser la teoría de la conspiración. Pero la proliferación de nuevas teorías y creencias también podría conducir a una escisión del movimiento y, advierten algunos expertos en extremismo, a una posible nueva crisis en la salud mental.
A medida que los creyentes de QAnon se sumergieron más en la teoría de la conspiración, construyeron un sistema de creencias reconfortante a su alrededor, dijo Marc Ambinder, un investigador principal que estudia la falta de información y la desinformación en la Escuela Annenberg de Comunicación y Periodismo de la Universidad del Sur de California.
“El ‘plan’ era mucho más poderoso en abstracto que cualquier cosa que se pudiera ofrecer en el mundo real para contrarrestarlo”, dijo.
Problemas mentales a la vista
Pero ahora, como muchos partidarios de QAnon se enfrentan cada vez más a la realidad, la disonancia cognitiva resultante podría quebrarlos, dijo Ambinder, con consecuencias potencialmente devastadoras.
“Este tipo de evento es el tipo de cosa que puede hacer que alguien que ya está increíblemente ansioso, en el momento de una pandemia mundial horrible, sienta que está completamente al límite”, dijo Ambinder, diciendo que teme que ocurra más violencia similar a la que el país presenció en el Capitolio de Estados Unidos hace dos semanas.
En las últimas semanas, CNN ha visto a partidarios de Trump abrazar la idea de la ley marcial en grandes cantidades en varias redes sociales. A principios de esta semana, una cuenta de Telegram que supuestamente estaba dirigida por el general John Hyten, subjefe del Estado Mayor Conjunto, dijo que el momento que algunos partidarios habían estado esperando –Trump finalmente actuando y usando al ejército para aplastar sus enemigos– estaba llegando. Un portavoz del general Hyten le dijo a CNN el martes por la mañana que la cuenta es “una absoluta falsificación” y agregó que el Pentágono estaba “trabajando activamente” para eliminarla.
Cerco en las redes sociales
Las principales redes sociales han intensificado sus medidas enérgicas contra QAnon últimamente. El martes por la noche, Facebook dijo que desde agosto había eliminado alrededor de 18.300 perfiles de Facebook y 27.300 cuentas en su subsidiaria Instagram por violar sus políticas contra QAnon. La compañía también ha eliminado 10.500 grupos y 510 eventos por el mismo motivo.
La semana pasada, Twitter dijo que prohibió más de 70.000 cuentas que promovían a QAnon.
Pero eso puede no ser suficiente. Las personas absorbidas por las teorías de la conspiración no escuchan voces autorizadas, dijo Ambinder, sino más bien las voces que consideran autorizadas para defender su cosmovisión.
Aunque es posible que Trump ya no sea presidente, él y sus aliados políticos, algunos de los cuales todavía sirven en el gobierno, podrían ser los únicos con la posibilidad de devolver a los creyentes de QAnon al mundo real, según Ambinder.
“Por el bien de cientos de miles de personas que todavía están atrapadas en el mundo alternativo de QAnon y no tienen idea de qué hacer”, dijo Ambinder, “aquí es cuando los republicanos que difundieron cínica y deliberadamente el falso rumor de que las elecciones fueron robadas deben dar un paso al frente”.