(CNN Español) – De cara a la pandemia que parece estar acelerándose, en los últimos días, la colchicina, la ivermectina y la plitidepsina han llamado la atención del mundo y los expertos están investigando si ayudarían o no a los pacientes con covid-19. Esto es lo que sabemos sobre estos medicamentos.
Ivermectina
La ivermectina es un antiparasitario que está siendo ampliamente utilizado en América Latina como tratamiento preventivo para el covid-19. Sin embargo, la Administración de Medicamentos y Alimentos de Estados Unidos (FDA) no recomienda su uso para prevenir el coronavirus.
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Como explica el doctor Elmer Huerta, experto en salud pública y colaborador de CNN en Español, “la ivermectina es muy efectiva contra parásitos externos como los piojos y los ácaros que causan la sarna, contra los gusanos redondos, entre ellos los áscaris, asimismo, para las filarias y las onchocercas, que causan la elefantiasis y la oncocercosis o ‘ceguera de los ríos’ en África”.
Entonces, ¿cómo llegó un antiparasitario a ser considerado útil contra el coronavirus?
“Todo empezó el 3 de abril, cuando en una prepublicación, la científica australiana Kylie Wagstaff comunicó que usando una cantidad de ivermectina muy alta (aproximadamente 50 veces la dosis que se usa comúnmente), la medicina era capaz de impedir que el SARS CoV2 ingrese a un cultivo celular”, explica el Dr. Huerta.
“Dos semanas después, médicos de Bangladesh comunicaron que habían logrado “curar” al 98% de pacientes que recibieron la combinación de ivermectina y el antibiótico doxiciclina”.
Pero, como dice el Dr. Huerta, la administración de esos medicamentos no fue parte de un estudio y “más del 90% de pacientes con covid-19 se recuperan espontáneamente”. Es decir que también es posible que los pacientes se hubieran recuperado sin el uso de la ivermectina.
Actualmente, múltiples estudios científicos buscan demostrar la utilidad del medicamento contra el covid-19.
No obstante, “una reciente revisión de 11 estudios o meta-análisis sobre el medicamento, hecha por investigadores de la Universidad de Liverpool bajo el auspicio de UNITAID, que recibe asesoría de la OMS, concluye que, a pesar de tenerse alguna evidencia de que pueda ser efectiva en reducir las muertes por covid-19, los estudios son muy dispares, tienen muchas limitaciones, y no es posible establecer una conclusión definitiva”, dice el Dr. Huerta.
En conclusión, por lo pronto, no hay suficientes datos que evidencien que la ivermectina puede ayudar a los pacientes con covid-19, como dijeron el 14 de enero los Institutos Nacionales de Salud (INS).
Colchicina
La colchicina es un medicamento antiinflamatorio extraído de una planta europea que ha sido usado desde la antigüedad para aliviar dolores en articulaciones y coyunturas.
Desde hace años es utilizado para controlar los ataques de gota, enfermedad en la que la persona es incapaz de eliminar el ácido úrico y los cristales acumulados en las articulaciones.
Como explica el Dr. Huerta, se piensa que el medicamento tendría un efecto positivo contra el covid-19 al controlar la llamada “tormenta de citoquinas”, la respuesta inflamatoria que es la principal causa de complicaciones pulmonares y muerte por coronavirus.
En los últimos días, la colchicina ha ganado atención tras un comunicado de prensa del 22 de enero del Instituto del Corazón de Montreal, entidad asociada con la Universidad de Montreal en Canadá.
Según el comunicado, en un estudio con 4.159 pacientes diagnosticados con covid-19, se encontró que la colchicina redujo en un 25% las hospitalizaciones, en un 50% la necesidad de ventilación mecánica y en un 44% las muertes, en comparación con los pacientes que recibieron un placebo.
Sin embargo, el Dr. Huerta afirma que aún se deben esperar más detalles sobre la utilidad del medicamento para tratar el covid-19 pues “el anuncio se ha hecho a través de un comunicado de prensa, y no mediante la publicación de un estudio científico”.
Esto es un aspecto importante pues “durante la pandemia hemos tenido anuncios sobre la aparente utilidad de medicamentos que se hicieron sin sólida base científica, como la hidroxicloroquina, por ejemplo, y que terminaron siendo un fiasco”.
De acuerdo con el Dr. Huerta, “nos toca entonces esperar que los autores publiquen los resultados de su estudio en una revista científica revisada por pares. Mientras tanto, les recomendamos no intentar automedicarse con colchicina. El medicamento, que por ser de un estrecho margen terapéutico, es muy propenso a causar efectos secundarios, como vómitos severos, diarreas, sangrado y dolor muscular”.
Plitidepsina
La plitidepsina es un medicamento antiviral que, al igual que la ivermectina, fue probado en un estudio in vitro, “es decir, en el laboratorio, en tubos de ensayo, con células aisladas”, según explica el Dr. Huerta.
El estudio, llamado “La plitidepsina tiene una potente eficacia preclínica contra el SARS-CoV-2 al dirigirse a la proteína del huésped eEF1A”, fue publicado en la revista Science.
Sin embargo, al ser un estudio in vitro, según el Dr. Huerta, “es muy inicial, no se puede saltar del tubo de ensayo a la gente, al paciente. Es otro ejemplo de que tenemos que ir con pies de plomo al analizar al eficacia de las medicinas”.