(CNN) – A medida que la demanda de vacunas contra el covid-19 sigue superando el suministro, todavía no hay suministro suficiente para cubrir a todos, incluso dentro de los grupos de máxima prioridad. Pero al dirigir la distribución de vacunas a poblaciones vulnerables más específicas, los estados podrían tener la oportunidad de salvar miles de vidas y prevenir aún más hospitalizaciones, según un nuevo análisis.
En Estados Unidos existen varios planes para priorizar la distribución del suministro limitado de vacunas. En diciembre, el Comité Asesor sobre Prácticas de Inmunización de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés) emitió una guía federal sobre quién debería ser el primero en recibir las vacunas. Según esta, se debía comenzar con los trabajadores de atención médica de primera línea y los residentes y el personal de los asilos de ancianos. Luego, otros trabajadores esenciales de primera línea y los mayores de 75 años.
Pero el número total de dosis administradas en todo el país, más de 88 millones, es apenas suficiente para cubrir a las personas de esos grupos con una sola inyección, y mucho menos con la segunda dosis requerida.
Y, en última instancia, los estados deciden quién es el primero en recibir una vacuna.
La firma de ciencia de datos de atención médica Cogitativo analizó miles de reclamos de seguros médicos y la demografía local en California para evaluar los factores más predictivos y discriminativos que conducen a resultados deficientes después de la infección por covid-19.
Al evaluar los factores de riesgo clínicos conocidos, como la obesidad, junto con las medidas de los efectos en la salud por los factores del entorno de vida -como la calidad del aire y el acceso a alimentos frescos, dentro de las recomendaciones del grupo de prioridad de vacunación federal- la compañía pudo identificar con mayor precisión las personas más vulnerables del estado y los condados donde viven.
Según el análisis, docenas de condados en California carecerían de dosis suficientes para atender a las personas más vulnerables del estado solo bajo la guía federal. El condado de Los Ángeles, por ejemplo, tendría un déficit de casi 405.000 dosis.
La ampliación de esos hallazgos a los 10 estados más grandes muestra que alrededor de un tercio de los condados carecerían de dosis en relación con la cantidad de residentes más vulnerables. Y alrededor de 5 millones de dosis podrían tener un impacto más profundo en la lucha contra el covid-19 si se reasignaran a un condado diferente.
“Sin un enfoque quirúrgico para distribuir la vacuna, más estadounidenses, a menudo en comunidades de color y áreas rurales, corren el riesgo de quedarse atrás”, le dijo a CNN el director ejecutivo de Cogitativo, Gary Velásquez. “La clave es utilizar una combinación de datos clínicos reales y determinantes sociales de la salud para evaluar quirúrgicamente quién está en mayor riesgo. Este enfoque puede ayudar a los estados a evitar déficits agudos en ciertos condados”.
La equidad en la distribución de vacunas
Los expertos con los que habló CNN estuvieron de acuerdo en que las asignaciones deben tener más matices que la proporción de la población que cae dentro de un determinado grupo prioritario. Por ejemplo, no todas las personas mayores de 65 años enfrentan el mismo nivel de riesgo de covid-19, aunque un condado con más personas en ese grupo de edad podría recibir más vacunas.
“El enfoque más rápido y eficaz para salvar la mayor cantidad de vidas y, en última instancia, acabar con esta pandemia cada vez más rápido, tiene que coincidir con la comprensión de las condiciones en las que las personas viven, trabajan, reciben educación y más”, dijo el Dr. Kedar Mate, presidente del Instituto para la Mejora de la Salud a CNN. Mate no participó en el análisis de Cogitativo. “Los determinantes sociales de la salud tienen un efecto muy significativo en la trayectoria de esta pandemia”.
La equidad es fundamental para el plan de la administración Biden de distribuir vacunas a través de centros de salud calificados a nivel federal e instalaciones de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés), y docenas de estados han adaptado el marco federal para sus propios planes de distribución, muchos de los cuales han agregado específicamente elementos de equidad a la ecuación.
Pero ha sido una lucha a nivel nacional hacerlo bien.
En las próximas semanas, California planea específicamente renovar su plan de asignación de vacunas para abordar las preocupaciones sobre la equidad en el lanzamiento.
Actualmente, California asigna dosis a los Departamentos de Salud locales de manera proporcional, según su parte de la población elegible del estado. Junto con el personal de atención médica, el estado ha ampliado la priorización a todas las personas que tienen al menos 65 años de edad, por lo que un condado con el doble de personas en esa categoría de edad que otro recibiría el doble de dosis.
Una nueva fórmula asignaría dosis directamente a los proveedores en un intento de brindar cobertura a los vecindarios que más la necesitan. El objetivo es llegar a las comunidades afectadas de manera desproporcionada a las que el sistema actual no está llegando adecuadamente, dijo a CNN Darrel Ng, asesor principal de Comunicaciones del grupo de trabajo de vacunas del estado.
Una fórmula “difícil de recetar” a nivel nacional
Los expertos que hablaron con CNN dijeron que las pautas federales dieron una buena idea de cómo comenzar con el proceso de vacunación.
Pero, dijeron, que los ajustes se pueden hacer localmente a medida que se aprende más en el camino, enfocándose particularmente en los grupos que son más susceptibles al virus y los malos resultados del mismo.
“Es difícil prescribir eso a nivel nacional”, le dijo Mate a CNN. “Cada estado y cada región tiene que hacer alguna personalización basada en la experiencia local”.
Los Departamentos de Salud locales están bien informados sobre los focos de poblaciones en riesgo en las comunidades, así como las vulnerabilidades dentro de ellos mismos y sus alrededores que los ponen en riesgo.
Están “en una posición única para ser la columna vertebral de la distribución equitativa”, dijo Lori Tremmel Freeman, directora ejecutiva de la Asociación Nacional de Funcionarios de Salud del Condado y la Ciudad.
Pero algunos líderes locales dicen que es difícil centrarse en la equidad cuando el suministro es tan limitado.
“Sin más suministro e información estable y predecible sobre los niveles futuros de suministro, es un desafío garantizar que podamos vacunar de manera rápida y equitativa a los que están en mayor riesgo”, dijeron los funcionarios del condado de Santa Clara, California.
Según el análisis de Cogitativo, de los condados dentro de los 10 estados más grandes, Santa Clara tiene el tercer mayor déficit de dosis de vacunas. El análisis sugiere que el condado podría recibir hasta 175.000 dosis más de las que recibiría únicamente con la orientación federal, debido a su población vulnerable relativamente grande en riesgo debido a los determinantes sociales deficientes de la salud.
“En muchos casos, los condados están recibiendo una oferta demasiado limitada para tener una estrategia más profunda que aborde la equidad”, dijo Freeman. “Lo escuchamos todo el tiempo. Algunos condados solo reciben 100 dosis de vacunas por semana y hacen todo lo posible para canalizarlas entre los grupos prioritarios”.
Otros dicen que argumentar a favor de una priorización aún más específica puede ser difícil, especialmente cuando la demanda hasta ahora supera la oferta, pero ayuda a recordar a las personas un objetivo compartido.
En Texas, el Gobierno estatal rechazó un plan propuesto por Dallas para priorizar la vacunación de personas dentro de ciertos códigos postales. En última instancia, el estado y el condado trabajaron juntos y pudieron priorizar, según el estado socioeconómico y la distribución de casos en la comunidad, pero no para códigos postales específicos.
“Debido al suministro muy limitado, queríamos tener el mayor impacto con la preciosa cantidad que teníamos”, dijo a CNN el Dr. Philip Huang, director del Departamento de Salud del Condado de Dallas.
Y está sucediendo una priorización más específica. Las iniciativas federales de vacunación que se ejecutan en conjunto con los planes estatales pueden ayudar a que la vacuna llegue a más personas. Los sitios de vacunación administrados por la FEMA en Dallas se dirigen a personas que viven en los 17 códigos postales que los líderes locales ayudaron a priorizar.
Aún así, Dallas recibe solo alrededor de 9.000 dosis de la vacuna covid-19 cada semana. Hay más de 650.000 personas en lista de espera.
“Haz los cálculos. Te llevará algo de tiempo”, dijo Huang. “Todos queremos que todos lo obtengan lo antes posible. Cuanto mejor podamos demostrar que estamos llegando a las personas con mayor riesgo de sufrir, mejor alcanzaremos ese objetivo”.