(CNN) – Los expertos dicen que hay una dura carrera entre las vacunas contra el covid-19 y una variante contagiosa que se extiende rápidamente por Estados Unidos, amenazando con otra oleada peligrosa. La suavización de las restricciones solo complica aún más las cosas.
“Va a tener un estrecho margen”, dijo el martes a CNN el Dr. Ashish Jha, decano de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Brown. “Estamos vacunando muy bien, esa es la buena noticia. Estas variantes se están extendiendo bastante rápido por todo el país, esa es la mala noticia”.
“Para mí, creo que la vacuna debería ganar”, agregó Jha. “Aquí está el gran pero: lo que Texas, Mississippi y otros estados están haciendo para relajar y deshacer los mandatos de mascarillas y actuar como si todo hubiera vuelto a la normalidad, eso definitivamente se está poniendo del lado de las variantes”.
Los gobernadores de Texas y Mississippi se encuentran entre al menos una docena de líderes estatales que han aliviado las restricciones este mes. Muchos atribuyen la mejora de los números de covid-19 y el aumento de las vacunas.
Pero en 15 estados, los nuevos casos de covid-19 reportados durante la semana que terminó el martes fueron al menos un 10% más altos que hace una semana, según datos de la Universidad Johns Hopkins. En dos de esos estados, Minnesota y Michigan, los casos superaron en más de un 40% a los de la semana anterior, según los datos.
En general, los nuevos casos todavía tienen una tendencia a la baja en Estados Unidos. Y los expertos dicen que se necesitan datos más sostenidos, de al menos un par de semanas, para identificar una tendencia. Pero con múltiples variantes preocupantes que circulan en el país, detectar señales de alerta temprana puede ser clave para limitar la propagación continua.
Estados Unidos crea un escenario de “tormenta perfecta” para la propagación de variantes
Hay varias variantes que preocupan a los expertos en este momento.
Incluyen dos cepas de coronavirus detectadas por primera vez en California que ahora son oficialmente “variantes de preocupación”, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés). Las variantes pueden ser aproximadamente un 20% más transmisibles, dijo la agencia citando investigaciones preliminares. Algunos tratamientos también pueden ser menos efectivos contra las cepas. Los CDC no indicaron que las vacunas dejarían de actuar contra esas variantes.
Pero hay una que está “al frente y al centro”, comentó el Dr. Michael Osterholm, director del Centro de Investigación y Política de Enfermedades Infecciosas de la Universidad de Minnesota.
Se prevé que la variante B.1.1.7 sea dominante en EE.UU.
Es la variante B.1.1.7, que se detectó por primera vez en el Reino Unido y ahora se prevé que se convierta en la variante dominante en EE.UU. en solo unas semanas, según los CDC.
“Nuestros modelos actuales […] proyectan que, para fines de marzo, principios de abril, la B.1.1.7 será la variante dominante”, aseguró el lunes la directora de los CDC, la Dra. Rochelle Walensky.
Se han reportado al menos 4.690 casos de la variante en EE.UU. Y eso probablemente no representa el número total de casos en todo el país, sino solo aquellos que fueron encontrados por científicos que analizaron muestras positivas. La variante se ha detectado en al menos 48 estados, Puerto Rico y Washington.
Investigaciones recientes sugieren que la variante podría estar relacionada con un mayor riesgo de morir por covid-19. Pero existe una creciente evidencia de que la variante representa muy poca amenaza para la eficacia de las vacunas actuales.
“Creo que las próximas semanas se centrarán en la B.1.1.7 y la carrera que tenemos entre la vacuna y la variante”, dijo Osterholm. “Al relajarnos como estamos ahora […] estamos creando un escenario de tormenta perfecto para que este virus se propague”.
Diferentes enfoques del Día de San Patricio
En un momento que los funcionarios de salud dicen que es fundamental para determinar cómo continúa desarrollándose la pandemia, las celebraciones del Día de San Patricio también se verán diferentes en algunas partes del país.
Algunos bares irlandeses en Nueva Orleans anunciaron que no abrirán para las celebraciones, citando preocupaciones sobre la propagación del covid-19 y las restricciones a los negocios.
El bar irlandés Finn McCool, ubicado en el área de Mid-City, escribió en Facebook el lunes que las multitudes “no nos permitirían cumplir con las reglas estatales y de la ciudad”.
“Por mucho que nos encantaría estar abiertos y ver las caras de todos, hacerlo pondría en peligro no solo a nuestro personal sino también a la comunidad”, leía la publicación.
Los funcionarios de Nueva Orleans redujeron aún más las restricciones la semana pasada, lo que permitió que las tiendas minoristas, restaurantes, salones y otras empresas aumentaran su capacidad de funcionamiento al 75%. Los bares, cervecerías, gimnasios y otros lugares ahora pueden operar al 50% de su capacidad.
Savannah, Georgia, sí está abierto de par en par
Mientras tanto, en Georgia, el alcalde de Savannah, Van Johnson, dijo el martes que la ciudad está abierta e instó a que se mantengan los esfuerzos de mitigación de covid-19.
“Es importante tener en cuenta que Savannah está abierta de par en par. Hemos estado abiertos de par en par. Y la forma en que permanecemos abiertos es exigir el uso de mascarillas”, señaló el alcalde, destacando la importancia de las celebraciones del Día de San Patricio para la economía local.
A pesar de la pandemia y de un mandato del uso de tapabocas emitido por la ciudad, miles de residentes y turistas, algunos sin mascarillas y muchos sin distanciamiento físico, llenaron las calles y negocios de la ciudad durante el fin de semana.
Todos los estados han vacunado al menos al 10% de los adultos
La fiesta en Savannah y la multitud por las vacaciones de primavera en Florida son ejemplos del hambre de las personas por volver a la normalidad, pero los expertos dicen que ahora no es el momento de deshacerse de las precauciones de seguridad. Un futuro más seguro está a solo unos meses de distancia, cuando una gran parte del país esté vacunada.
Más de 72 millones de estadounidenses han recibido hasta ahora al menos una dosis de la vacuna contra el covid-19, según datos de los CDC. Más de 39 millones están completamente vacunados, eso es alrededor del 11,8% de la población de EE.UU.
Entre la población de 65 años o más del país, más de un tercio están completamente vacunados y casi dos tercios han recibido al menos una dosis de la vacuna contra el covid-19.
Además, todos los estados han vacunado completamente al menos al 10% de su población adulta.
Para impulsar más rápido los números de vacunación, muchos líderes estatales expandieron recientemente las pautas de elegibilidad, agregando a millones de estadounidenses a la lista de personas que pueden vacunarse. El presidente Joe Biden dijo que quiere que todos los adultos estadounidenses sean elegibles para una vacuna antes del 1 de mayo, y algunos estados han dicho que planean llegar antes.
Pero, aunque las vacunas se han acelerado, persisten los desafíos, incluida la vacilación y la desinformación sobre las vacunas.
El papel de la iglesia en la vacunación
Y la iglesia puede desempeñar un papel de liderazgo en el aumento de la confianza en la vacuna contra el covid-19, dijo el martes el director de los Institutos Nacionales de Salud, el Dr. Francis Collins.
“Muchos de los que podrían beneficiarse más, porque tienen mayor riesgo de infecciones graves e incluso mortales, todavía están vacilando”, indicó Collins, hablando desde la Catedral Nacional de Washington, donde los líderes religiosos se reunieron para ayudar a reforzar la confianza en la vacuna.
“Hoy, todos ustedes están poniendo la esperanza en acción”, manifestó. “Esperanza de poner fin al terrible sufrimiento y la pérdida de vidas por covid-19, esperanza de que se ponga fin a la devastación económica que ha causado, esperanza de que la vacuna no solo pueda protegerte, sino también, si lo hacemos juntos, a tu familia, tus amigos, tu comunidad, tu nación, a todo tu mundo”.
Deidre McPhillips, Jamiel Lynch, Gregory Lemos, Gisela Crespo y Michael Nedelman, de CNN, contribuyeron a este informe.