(CNN) – Una nueva variante de coronavirus, más contagiosa y potencialmente más mortal, se extiende actualmente por EE.UU., y los funcionarios de salud están preocupados.
La variante B.1.1.7, detectada por primera vez en el Reino Unido, no solo se transmite más fácilmente, sino que también parece ser más mortal. El Dr. Anthony Fauci lo advirtió el viernes en la Casa Blanca en un reporte sobre coronavirus.
Se vio por primera vez en Colorado a fines de diciembre, dijo Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas y principal asesor médico del presidente Biden.
“Desde entonces, se ha detectado en 50 jurisdicciones en Estados Unidos y probablemente ahora representa alrededor del 20 al 30% de las infecciones en este país. Y ese número está creciendo”, afirmó Fauci.
“Es preocupante que haya un incremento del 50% en la transmisión con esta variante en particular, que se ha documentado en el Reino Unido, y es probable que haya un aumento en la gravedad de la enfermedad si se infecta con esta variante”, indicó.
Fauci señaló un estudio que muestra un 64% más de riesgo de muerte para las personas infectadas con B.1.1.7 en comparación con las infectadas con la variante más antigua, llamada de tipo salvaje. Mostró un segundo estudio que indicó un 61% más de riesgo de muerte con B.1.1.7.
Sin embargo, las vacunas parecen proteger bien contra la B.1.1.7 y los tratamientos como los anticuerpos monoclonales también parecen funcionar contra esta variante en particular, dijo Fauci.
Eso hace que sea más importante que nunca vacunar a las personas rápidamente, aseguró.
“La forma en que podemos contrarrestar la 1.1.7, que es una amenaza creciente en nuestro país, es hacer dos cosas: vacunar a la mayor cantidad de personas de la manera más rápida y expedita posible con la vacuna que sabemos que funciona contra esta variante y, finalmente, implementar las medidas de salud pública de las que hablamos todo el tiempo … uso de máscaras, distanciamiento físico y evitar las multitudes, particularmente en interiores”, afirmó.
Las vacunas parecen proteger contra la variante B.1.1.7
Las tres vacunas que hasta ahora han obtenido la autorización de uso de emergencia de la Administración de Medicinas y Alimentos de EE.UU. parecen proteger bien a las personas contra la B.1.1.7.
El uso en la vida real de las vacunas Pfizer/BioNTech y Moderna indica que si bien la variante B.1.1.7 puede eludir, de alguna manera, la respuesta inmune provocada por las dosis inyectadas, no es suficiente para hacer que las vacunas sean menos efectivas al proteger a las personas. Esto se debe a que las vacunas provocan una amplia respuesta inmunitaria, de modo que incluso si está un poco debilitada, sigue siendo lo suficientemente potente como para prevenir enfermedad grave y la muerte.
Hay menos evidencia sobre la vacuna fabricada por Janssen de Johnson & Johnson, aunque se probó en EE.UU. después de que la B.1.1.7 comenzara a circular.
“La evidencia preliminar sugiere que las vacunas contra el covid-19 actualmente autorizadas pueden brindar cierta protección contra una variedad de cepas, incluida la B.1.1.7 (originalmente identificada en el Reino Unido)”, dicen los CDC en su guía para personas completamente vacunadas.
Tanto BioNTech como Moderna han ayudado a coordinar múltiples pruebas de sus vacunas contra las variantes.
Ugur Sahin de BioNTech y sus colegas analizaron sangre de 40 voluntarios inmunizados con la vacuna Pfizer/BioNTech contra versiones diseñadas en laboratorio de la variante B.1.1.7.
“La vacuna siguió siendo eficaz contra la B.1.1.7 con una disminución leve pero significativa en la neutralización que fue más evidente en los participantes menores de 55 años. Por lo tanto, la vacuna proporciona un ‘colchón’ significativo de protección contra esta variante”, informaron en la revista Science.
De manera similar, Kai Wu de Moderna y un equipo del NIAID analizaron sangre de voluntarios contra versiones de laboratorio de la B.1.1.7. La variante “no tuvo un efecto significativo sobre la neutralización por suero obtenido de participantes que habían recibido la vacuna mRNA-1273 en el ensayo de fase 1”, reportaron en el New England Journal of Medicine.
Ravindra Gupta de la Universidad de Cambridge en el Reino Unido y sus colegas allí y en Sudáfrica estudiaron sangre extraída de adultos mayores con una edad promedio de 62 que habían sido inmunizados con la vacuna de Pfizer/BioNtech. Vieron una “pequeña reducción en la neutralización por sueros de vacunas que fue más marcada después de la primera dosis que de la segunda dosis”, informaron en la revista Nature, pero nuevamente no lo suficiente como para tener un efecto importante.
El virus podría adquirir más mutaciones
Lo que sí les preocupaba era si el virus adquiría más mutaciones. Varias variantes preocupan a los médicos, incluida la variante B.1.351 que se reportó por primera vez en Sudáfrica y la variante P.1 que ahora es común en Brasil. Ambas portan una mutación conocida como E484K que parece evadir significativamente la respuesta inmune del cuerpo.
“Es preocupante, hemos demostrado que hay múltiples secuencias de la B.1.1.7 en el Reino Unido que llevan la E484K con evidencia temprana de transmisión, así como adquisiciones independientes”, escribieron.
Varios experimentos indican que las variantes B.1.351 y P.1. pueden evadir mucho más fácilmente la respuesta inmune provocada por las vacunas y también por algunos tratamientos con anticuerpos monoclonales, que implementan proteínas del sistema inmune diseñadas en laboratorio para estimular la respuesta inmune.
No se han ejecutado tantos experimentos con la vacuna de Johnson & Johnson que fue recientemente autorizada, pero se probó en EE.UU. después de que la B.1.1.7 comenzara a extenderse; en Sudáfrica después de que la B.1.351 ya era la variante más común y en Brasil luego de que la P.1 se generalizó.
Si bien fue menos eficaz contra enfermedad moderada en Sudáfrica y Brasil que en EE.UU., protegió fuertemente a las personas contra enfermedades graves, hospitalizaciones y muertes en ensayos clínicos.
Los virus mutan todo el tiempo, y algunas de las mutaciones se han arraigado en variantes que han surgido en EE.UU., en particular en California y Nueva York. Los cambios que llevan incluyen algunos de los cambios que hacen que las variantes B.1.351 y P.1 sean mucho más peligrosas que la B.1.1.7. Por eso, Fauci y los CDC dicen que eso hace que sea aún más importante vacunar a la mayor cantidad posible de personas antes de que esas variantes se puedan propagar.