(CNN) – Un informe mordaz del organismo de control de la Policía del Capitolio de Estados Unidos (USCP, por sus siglas en inglés) obtenido por CNN revela que hubo incluso más fallas de lo que se sabía antes por parte de los encargados de la seguridad. Un nuevo reporte da detalles sobre municiones caducadas, escudos ineficaces y una advertencia no informada anteriormente –más de dos semanas antes del asalto– sobre un mapa de los túneles subterráneos del Capitolio, que se publicó en un sitio web a favor de Donald Trump.
Estos hallazgos del Inspector General de la USCP se incluyen en el segundo informe preliminar sobre los eventos que rodearon el asalto al Capitolio y sugieren que hubo varios problemas de larga data que el Departamento “sabía y no abordó a tiempo o no abordó de manera rutinaria para prevenir”, según el resumen obtenido por CNN.
Específicamente, el resumen destaca problemas importantes con la vigilancia del Departamento en lo que respecta al mantenimiento de equipos, las políticas para la Unidad de Disturbios Civiles y el manejo de la inteligencia antes del ataque.
FOTOS | Así se vio el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021
Los mapas de los túneles del Capitolio
Las deficiencias más amplias relacionadas con la inteligencia descritas en el informe se evidencian en una advertencia que la Policía del Capitolio recibió del Departamento de Seguridad Nacional (DHS por sus siglas en inglés) el 21 de diciembre de 2020, pero que no pareció tomar en cuento por completo.
Ese día, “el Departamento de Seguridad Nacional notificó al Departamento de un blog que hacía referencia a túneles en los terrenos del Capitolio de Estados Unidos utilizados por miembros del Congreso y la investigación del sitio web identificó cuatro ‘temas de hilos / blogs que contienen comentarios de preocupación’”, dice el resumen.
“El informe identifica el sitio web como https://thedonald.win e incluye varias páginas de comentarios publicados en el sitio web”, agrega.
El informe continúa exponiendo, por primera vez, un sorprendente grado de indiferencia por parte del liderazgo de la Policía del Capitolio cuando se trataba de asuntos rutinarios de limpieza, como no mantener una lista precisa de agentes asignados a la Unidad de Disturbios Civiles (CDU por sus siglas en inglés).
El resumen señala que la lista de la “CDU” enumeró a 187 agentes, dos de los cuales ya no trabajaban para la Policía del Capitolio el día de la insurrección. Los 187 agentes enumerados es un número mucho más bajo que los 276 agentes que la jefa de la Policía del Capitolio en funciones, Yogananda Pittman, dijo al Congreso que estaban activos el 6 de enero.
Además, el informe señala que el liderazgo de la Policía del Capitolio sabía desde julio de 2020 que el Departamento necesitaba hacer cambios significativos, pero inexplicablemente no los hizo.
El resumen enumera varios ejemplos, incluido el hecho de que el Departamento no estableció procedimientos operativos estándar para la Unidad de Disturbios Civiles, destacando una actitud casual hacia la unidad encargada finalmente de detener la insurrección.
Municiones caducadas y escudos ineficaces
Incluso el mantenimiento del equipo parecía tener baja prioridad. El resumen muestra que los escudos de la CDU no se almacenaron a la temperatura correcta, lo que los hizo ineficaces, mientras que algunas municiones en la armería estaban vencidas.
En otro ejemplo, el inspector general escribió que un funcionario del Departamento les dijo a los investigadores que los agentes reciben capacitación cada tres años, según lo exige el fabricante de un arma que portan, sin embargo, el Departamento no tenía ninguna directiva formal que les ordenara realizar la capacitación.
El día de la insurrección, la CDU no usó todas sus opciones menos letales, como un lanzagranadas de 40 mm, un lanzagranadas de 37 mm y granadas Sting Ball debido a “órdenes del liderazgo”.
Al final, la unidad estaba “funcionando a un nivel de preparación disminuido” debido a las numerosas fallas, indica el informe.
El resumen describe la falta de estándares para el brazo de evaluación y recopilación de inteligencia de importancia crítica de la Policía del Capitolio y que el Departamento no siguió los pocos procedimientos que tenía. Por ejemplo, no todos los miembros de la división de inteligencia tenían autorizaciones de seguridad de alto secreto en sus funciones, “lo que podría haber provocado que el Departamento manejara mal la información clasificada”, y no tenían un programa de capacitación para todos los empleados de la división.
El resumen dice que en el otoño de 2020, el brazo de inteligencia de la Policía del Capitolio se ajustó después de que quedó claro que la unidad “no estaba cumpliendo con las demandas del Departamento”.
Mientras el Departamento se preparaba para lo que creía que sería un mitin el 6 de enero, la inteligencia contradictoria resultó problemática, según el informe.
“La explicación que brinda la OIG para esto es asombrosa”, dice el resumen. “El ‘Bottom Line Up Front’ (BLUF) dice que están rastreando protestas que pueden incluir algunos manifestantes armados y supremacistas blancos, y la evaluación 30 páginas después es mucho más alarmante, incluso que las condiciones en el terreno podrían ‘conducir a una situación peligrosa para las fuerzas del orden y el público en general por igual”. CNN informó anteriormente que la división de inteligencia del Departamento concluyó que las amenazas de violencia eran “improbables”.
El resumen enumera 27 recomendaciones para correcciones, incluido el cambio de procedimientos para “refinar la presentación de informes de documentos que capture mejor el impacto operativo para incluir resultados improbables basados en inteligencia, datos de tendencias, amenazas a los miembros y análisis de información”.
Se espera que el Inspector General de la USCP testifique en el Congreso la próxima semana sobre el informe y sus hallazgos.