(CNN) – A la hora de elegir el protector solar para la diversión veraniega, asegúrate de evitar los productos con sustancias químicas nocivas y las afirmaciones publicitarias falsas, según la 15ª Guía Anual de Protectores Solares publicada por el Environmental Working Group (Grupo de Trabajo Ambiental), una organización de consumidores que aboga por la seguridad medioambiental.
Este año, el EWG analizó 500 protectores solares más, con lo que el total superó los 1.800 productos, y descubrió que el 75% no ofrecía una protección solar adecuada o incluía ingredientes considerados nocivos.
“La respuesta no es desesperarse y decir que ningún protector solar es seguro”, dijo Nneka Leiba, vicepresidenta de ciencias de la vida saludable del EWG. “Hay al menos 200 protectores solares de uso recreativo en nuestra base de datos que obtuvieron el visto bueno”.
Además, los consumidores deben confiar siempre en las prácticas seguras para tomar sol en primer lugar, y luego en la aplicación del protector solar, dicen los expertos.
“Una buena camiseta bloquea los rayos del sol de forma mucho más eficaz que un mal protector solar. La tela proporciona un pequeño espacio entre la piel y los rayos, y además se encarga de ocluir gran parte de los rayos”, afirma Leiba.
“Cubrirse la piel, usar sombreros, evitar el sol del mediodía y tener cuidado con los niños, por su mayor susceptibilidad” son buenas opciones, dijo Leiba. “Hay muchas herramientas en esa caja de herramientas de protección solar: el protector solar es solo una de ellas”.
Sustancias químicas de los protectores solares en el torrente sanguíneo
Según la Administración de Medicinas y Alimentos de EE.UU., (FDA, por sus siglas en inglés), tras una sola aplicación, es posible absorber en el torrente sanguíneo un total de siete sustancias químicas que se encuentran habitualmente en los protectores solares a niveles que superan los umbrales de seguridad.
Un estudio de la FDA reveló que, tras cuatro días de uso de protectores solares, los participantes en el estudio seguían presentando niveles inseguros de dos de las sustancias químicas (oxibenzona y homosalato) en las muestras de sangre tomadas 21 días después de que los sujetos dejaran de utilizarlos.
Esto no significa necesariamente que los productos de protección solar sean inseguros, según la FDA, pero los fabricantes deben realizar pruebas de seguridad adecuadas.
Esas sustancias químicas forman parte de una docena que la FDA lleva años pidiendo a los fabricantes que investiguen para que puedan ser consideradas GRASE o “generalmente reconocidas como seguras y eficaces”.
Además de la oxibenzona y el homosalato, las sustancias químicas que necesitan pruebas de seguridad son la avobenzona, el octinoxato, el octisalato, el octocrileno, el cinoxato, la dioxibenzona, el ensulizol, el meradimato, el padimato O y la sulisobenzona.
Un estudio de 2008 realizado en Suiza encontró oxibenzona o una de otras cuatro sustancias químicas de protección solar en el 85% de las muestras de leche materna, lo que detonó la preocupación de que los recién nacidos pudieran estar expuestos. Un estudio de 2010 encontró otra sustancia química de uso común, el octinoxato, en la leche materna.
Las investigaciones han demostrado una posible relación entre la oxibenzona y la disminución de los niveles de testosterona en los adolescentes, los cambios hormonales en los hombres, y los embarazos más cortos y las alteraciones del peso al nacer en los bebés.
La oxibenzona y el octinoxato también se han relacionado con daños en los arrecifes de coral y la vida marina. En la actualidad, Hawai, las Islas Vírgenes de EE.UU., Key West y la isla de Palau, en el Pacífico, prohíben el uso de productos de protección solar que contengan oxibenzona y octinoxato, y otros lugares de todo el mundo se están planteando hacer lo mismo.
Opciones minerales
Para los que se preocupan por la entrada de sustancias químicas en el torrente sanguíneo, hay dos tipos de ingredientes minerales (no químicos) de protección solar considerados seguros y eficaces por la FDA: el dióxido de titanio y el óxido de zinc.
Los protectores solares hechos con minerales desvían y bloquean físicamente los rayos solares, a diferencia de los protectores solares con filtros químicos que absorben los rayos UVB y liberan calor al descomponerse.
Otra ventaja: los ingredientes minerales no parecen dañar al medio ambiente.
El número de productos que contienen minerales ha crecido a medida que los consumidores buscan productos más seguros para la salud humana y el medio ambiente, dijo Carla Burns, analista principal de la ciencia de la vida sana del EWG.
“Este año, alrededor del 45% de todos los productos de la guía contienen ingredientes activos minerales, ya sea óxido de zinc, dióxido de titanio o una combinación de ambos”, dijo Burns.
“Definitivamente estamos registrando un aumento en los últimos tres a cinco años de las cremas hidratantes de uso diario con SPF (factor de protección solar) basadas en ingredientes minerales”, añadió.
Al mismo tiempo, se está produciendo otra tendencia: la reducción del uso de oxibenzona en los productos de Estados Unidos.
“Hace dos o tres años, el 60% de los productos no minerales contenían oxibenzona”, dijo Leiba. “El año pasado era solo el 40% y este año es el 38%. Así que definitivamente hemos registrado un descenso de la oxibenzona en los últimos dos años”.
Declaraciones engañosas
“El factor de protección solar”, o SPF, es lo que la mayoría de los estadounidenses miran cuando eligen un protector solar: cuanto más alto sea el SPF, mejor, ¿verdad? No es así.
Según la FDA, elegir un SPF de más de 100 no protege más que un protector solar con un SPF de más de 60. Esto se debe a que no hay datos fiables que demuestren que los protectores solares puedan proteger más allá de un nivel de SPF de 60+. Según la FDA, etiquetar los protectores solares con niveles superiores podría dar a los usuarios una falsa sensación de protección solar.
“Más de uno de cada diez de los protectores solares que hemos revisado afirman tener un SPF superior a 50+”. El Environmental Working Group recomienda a los consumidores que eviten los productos que afirman tener un SPF superior a 50+.
Además, el SPF solo aplica a los rayos UVB que causan quemaduras solares y no a los rayos UVA que, según los expertos, penetran más profundamente en el tejido cutáneo, causando envejecimiento y daños duraderos en las células de la piel.
Por eso los dermatólogos recomiendan utilizar siempre un protector solar de “amplio espectro”, que proteja tanto de los rayos UVA como de los UVB.
Un aditivo químico, la avobenzona, y una opción mineral, el óxido de zinc, proporcionan la mejor protección contra los rayos UVA disponible actualmente en los protectores solares de EE.UU., según el EWG. En Europa hay más opciones de protección, pero no han sido aprobadas por la FDA para su uso en Estados Unidos.
El dióxido de titanio y el óxido de zinc protegen tanto de los rayos UVA como de los UVB, aunque el dióxido de titanio tiene una eficacia moderada contra los rayos UVA, según el EWG.
Otra nota de precaución: algunos fabricantes de protectores solares están añadiendo antiinflamatorios para reducir el enrojecimiento de la piel, el signo revelador de las quemaduras solares que es una clara señal de daño en la piel. Busque extractos botánicos como el regaliz, la manzanilla y el aloe, dice el EWG, que no protegen contra los rayos dañinos.
Cuidado con los protectores solares en aerosol
Otro aspecto que preocupa a la FDA es el posible peligro que suponen las formas de aplicación de protectores solares en spray y en polvo. Los aerosoles son potencialmente inflamables, y tanto los aerosoles como los polvos pueden entrar en los pulmones si las partículas son lo suficientemente pequeñas.
Cualquier partícula de 10 micrómetros de diámetro o menos plantea los mayores problemas de salud. Estas pueden penetrar profundamente en los pulmones y podrían causar daños irreversibles.
“Sabemos que el dióxido de titanio, cuando se inhala, ya sea en polvo o en aerosol, puede tener efectos cancerígenos, es decir, se ha relacionado con el cáncer”, dijo Leiba.
La FDA ha propuesto que se sometan a pruebas todos los protectores solares en aerosol y en polvo, pero esto aún no ha comenzado. Debido a la falta de pruebas definitivas, el EWG recomienda evitar todos los productos en aerosol.
Desgraciadamente, el informe del EWG de 2021 reveló que el número de protectores solares en aerosol en el mercado estadounidense ha ido en aumento a lo largo de los años. A los consumidores parece gustarles la comodidad de una rápida ráfaga de aerosol.
“Más de una cuarta parte de los protectores solares que aparecen en la guía de este año son en forma de aerosol, es decir, unos 260 productos diferentes”, dijo Leiba.
Hay otra razón por la que los aerosoles y los polvos no son una buena protección solar, dicen los expertos. Es demasiado fácil pasar por alto un punto o encontrarse con una brisa que podría arrastrar el protector solar lejos de la piel.
“El estadounidense promedio no se sienta y mantiene un aerosol o un spray el tiempo suficiente para obtener esa cobertura adecuada”, dijo Burns. “Sugerimos a los consumidores que opten por una loción o un producto en barra para asegurarse de que pueden obtener una cobertura que se aplique de forma uniforme”.
También puede sorprenderte la cantidad real, la extensión y el momento en que debe aplicarse el protector solar en la piel. La Academia Estadounidense de Dermatología recomienda aplicar al menos 28 gramos, o el equivalente a dos cucharadas, de protector solar en toda la piel expuesta cada dos horas o después de nadar, incluyendo “la espalda, el cuello, la cara, las orejas, la parte superior de los pies y las piernas”.
“Si usas la cantidad adecuada de protector solar, gastarás ese producto con bastante rapidez”, dijo Burns, por lo que “una botella no debería durar varios años”.
“También queremos que revises tu producto antes de usarlo, especialmente si lo dejas en un coche caliente”, añadió. “Si hay algún tipo de separación o está grumoso o no es una mezcla perfecta, entonces tíralo y consigue una botella nueva”.