(CNN) – La pandemia de covid-19 ha tenido un efecto enorme en los adultos hispanos en comparación con los adultos blancos y negros, según una investigación publicada el jueves por la Kaiser Family Foundation.
Entre los encuestados, los adultos hispanos tenían más probabilidades que los adultos negros o blancos de decir que ellos o alguien en su hogar dio positivo en la prueba de covid-19 o que un miembro de la familia o un amigo cercano murió de covid-19.
Más de dos tercios de los adultos hispanos informaron que les preocupaba que ellos o alguien de su familia se enfermara a causa de covid-19. Este número aumentó al 89% en adultos hispanos potencialmente indocumentados.
Se recopilaron datos de entrevistas con 778 adultos hispanos como parte del Monitor de vacuna contra el covid-19 de KFF.
Los adultos hispanos también expresaron un mayor deseo de vacunarse lo antes posible. Poco menos de la mitad de los adultos hispanos encuestados habían recibido al menos una dosis de la vacuna covid-19, en comparación con el 51% de los adultos negros y el 60% de los adultos blancos.
De los que aún no habían comenzado a vacunarse, el 17% de los adultos hispanos dijeron que querían vacunarse lo antes posible, más que el porcentaje de adultos negros o blancos. Los adultos hispanos tenían el porcentaje más pequeño de cualquier grupo que dijo que “definitivamente no” recibirían una vacuna.
La mayoría de los adultos hispanos no vacunados estaban preocupados por faltar al trabajo debido a los efectos secundarios de la vacuna, y más de la mitad estaban preocupados por pagar la vacuna, aunque todas las vacunas covid-19 se proporcionan sin costo alguno para los beneficiarios.
Los investigadores dijeron que las brechas de vacunación en las comunidades hispanas pueden deberse a preocupaciones como esta y a barreras de documentación. A más del 40% de los adultos hispanos se les pidió que proporcionaran una identificación del gobierno al hacer una cita, al 32% se les pidió información sobre el seguro médico y al 14% se les pidió un número de seguro social.
“Si bien las vacunas están disponibles para todos los adultos independientemente de su seguro o estado migratorio, muchos adultos hispanos que han sido vacunados dicen que se les pidió la información de su seguro médico o una identificación emitida por el gobierno”, dijo Samantha Artiga, cicepresidente de KFF y director del programa de políticas de salud y equidad racial. “Eso puede representar barreras para muchos, en particular para aquellos que no tienen seguro o son inmigrantes potencialmente indocumentados”.
Los adultos hispanos que eran más jóvenes, menos educados o republicanos informaron la mayor cantidad de vacilación por las vacunas, con el 15% de los adultos hispanos republicanos diciendo que “definitivamente no” recibirían una vacuna disponible.