(CNN) – En los últimos días, Estados Unidos ha quedado cautivado por la búsqueda de un tigre que se escapó en un barrio de Houston. Sin embargo, el hecho no es tan exótico como podríamos creer.
Hay más tigres en cautiverio en Estados Unidos que en la naturaleza en todo el mundo, dicen los expertos.
El World Wildlife Fund (WWF) estima que cerca de 5.000 de estos grandes felinos viven en cautiverio en el país, aunque los expertos en bienestar animal dicen que es difícil manejar cifras precisas. Esa cifra se compara con los cerca de 3.900 tigres salvajes que quedan en el mundo, estiman los expertos.
La mayoría de los tigres en Estados Unidos están en patios traseros, instalaciones para cría y en parques temáticos pequeños o atracciones en las carreteras, dice el WWF. Solo cerca del 6% están en zoológicos acreditados, dice el grupo.
Es posible que la cantidad real de tigres en cautiverio en Estados Unidos sea mayor porque cientos se crían cada año para las atracciones de animales salvajes, dice Carole Baskin, fundadora de Big Cat Rescue. Este es un santuario de animales en Florida que se hizo famoso por la serie de Netflix “Tiger King”.
Los defensores de los animales han criticado durante mucho tiempo la propiedad privada de tigres y otros grandes felinos, a la que califican como imprudente e inhumana.
“Muchos de estos propietarios privados de tigres no están debidamente entrenados para cuidar a animales salvajes, lo que hace que los animales queden vulnerables al maltrato y la explotación”, dijo WWF. “A menudo estas instalaciones permiten el contacto del público con los tigres, incluso sesiones de fotos y momentos de juego con cachorros de tigre”.
“Ningún tigre debe estar en un patio trasero o en un sótano”, dijo Baskin a CNN esta semana al ser consultada sobre el tigre desaparecido en Houston. “La única razón por la que la gente tiene tigres como mascotas es para tratar de presumir ante los demás”.
En muchos estados es legal tener un tigre en el patio trasero
La Sociedad Protectora de Animales dice que la falta de leyes uniformes hace que sea fácil acceder a los animales exóticos en muchos estados.
Las personas deben conseguir una licencia del Departamento de Agricultura para tener tigres con fines comerciales, pero no hay requisitos federales de ese tipo para quienes quieren tenerlos como mascotas.
Sin una ley federal que funcione como paraguas, la posesión de animales salvajes se rige por un mosaico de regulaciones estatales.
Unos 20 estados prohíben la propiedad privada de algunos animales exóticos como los grandes felinos. Otros estados exigen que los residentes obtengan un permiso para poseer esos animales.
Y otros, entre ellos Alabama, Nevada, Carolina del Norte y Wisconsin, no tienen leyes contra la tenencia de animales salvajes peligrosos como mascotas.
En Texas, un residente puede tener un tigre si tiene un certificado de registro emitido por la oficina local de control de animales y al menos US$ 100.000 de seguro de responsabilidad civil para pagar por daños a la propiedad o lesiones. Las restricciones no se aplican a zoológicos y acuarios acreditados.
No es raro ver grandes felinos escapados
Los avistamientos de grandes felinos escapados han llegado a los titulares en muchas ocasiones. De hecho, ha habido cerca de 800 incidentes relacionados con felinos exóticos en cautiverio en Estados Unidos desde 1990, dijo Baskin de Big Cat Rescue.
En febrero, las autoridades de Texas rescataron a un tigre durante una tormenta de nieve cerca de San Antonio. La nombraron “Elsa” por el personaje de la película de Disney “Frozen”. Elsa era la mascota de una persona y llevaba un arnés cuando la encontraron en temperaturas bajo cero, dijeron las autoridades.
Los dueños fueron citados por un delito menor y al tigre lo llevaron a un santuario de animales.
En 2011, el propietario de una reserva de animales salvajes en Zanesville, Ohio, soltó a decenas de tigres, leones, osos y otros animales de gran tamaño, que vagaron por los bosques y vecindarios cercanos. Lo que siguió fue una noche de terror y caos en la que las autoridades dispararon y mataron a 49 de los animales para proteger a los residentes cercanos. En ese total estaban incluidos 18 tigres y 17 leones.
Como resultado de lo sucedido, Ohio aprobó una ley que prohíbe poseer animales salvajes peligrosos, incluidos los grandes felinos.
Un proyecto de ley federal prohibiría la propiedad privada de animales exóticos
En diciembre, la Cámara de Representantes aprobó el proyecto de Ley de Seguridad Pública de los Grandes Felinos que busca impedir que personas sin licencia tengan tigres, leones, jaguares y otros animales salvajes.
La ley se presentó después de que “Tiger King”, una popular docuserie sobre un cuidador de grandes felinos en Oklahoma, generara atención sobre el tema.
Un grupo bipartidista de legisladores presentó el mes pasado una versión del proyecto de ley en el Senado.
Por otra parte, en 2016 Estados Unidos endureció la normativa sobre la propiedad de tigres en cautiverio en virtud de la Ley de Especies en Peligro de Extinción, lo que dificulta que los tigres queden atrapados en redes de comercio ilegal de especies silvestres.