(CNN) – Xi Jinping quiere que China aprenda cómo hacer amigos e influir en la gente.
En su intervención ante la cúpula del Partido Comunista el lunes, el presidente chino dijo que era importante que el país contara su historia de forma positiva, presentando la imagen de una “China creíble, amable y respetable”, según la agencia estatal de noticias Xinhua.
Xi añadió que las organizaciones de propaganda del Partido deben dejar claro al mundo que Beijing no quiere “nada más que el bienestar del pueblo chino”.
La visión de Xi tiene sentido. Desde que asumió el poder en 2012, ha presionado para que China asuma un papel más importante en los asuntos globales, pero aparte de Rusia y Pakistán, China tiene pocas relaciones diplomáticas sólidas con las principales potencias mundiales.
Lo que Xi no dijo es que su país tiene actualmente un gran problema de imagen en muchas partes del mundo. Un informe del Centro de Investigaciones Pew de finales de 2020 reveló que de los 14 países encuestados en Europa, América del Norte y Asia Oriental, todos tenían una opinión mayoritariamente negativa de China.
El peso de la pandemia
Parte del problema de imagen de Beijing proviene de la pandemia de covid-19, y de las acusaciones de que el gobierno encubrió el brote original en Wuhan en diciembre de 2019, empeorando potencialmente la propagación global del virus.
Pero las opiniones sobre China estaban empeorando incluso antes de la pandemia, y parte de ello se debe a que el país ha adoptado la diplomacia del “guerrero lobo”.
Con el nombre de una serie de películas de acción chinas nacionalistas, esta política exterior patriotera comenzó a tomar forma en 2019, cuando los altos diplomáticos comenzaron a denunciar agresivamente los supuestos desprecios contra China en conferencias de prensa o en las redes sociales.
En julio de 2019, Zhao Lijian, entonces consejero de la embajada china en Pakistán, comenzó a condenar lo que consideraba la hipocresía de Estados Unidos en materia de derechos humanos, señalando los propios problemas de Washington como el racismo, la desigualdad de ingresos y la violencia armada.
Un enfoque controversial y popular
La defensa a ultranza de China por parte de Zhao fue controvertida. Pero le valió un ascenso a portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores y otros diplomáticos chinos empezaron a imitarle.
Ha habido informes sobre el malestar dentro de la comunidad diplomática china por los “guerreros lobo”, pero por ahora no hay señales de que Zhao o sus colegas estén perdiendo influencia, especialmente cuando su enfoque es tan popular entre la población china.
Después de que el alto diplomático chino Yang Jiechi dijera a sus homólogos estadounidenses en marzo que Washington “no estaba calificado para hablar con China”, su eslogan se imprimió rápidamente en camisetas que se vendían en Beijing y otras ciudades.
Puede que Xi quiera que China extienda la mano de la amistad al mundo, pero con los “guerreros lobo” del Ministerio de Asuntos Exteriores aullando a su espalda, muchos países podrían ser reticentes a aprovechar la oportunidad.