(CNN Español) – La exministra de Seguridad de Mauricio Macri, Patricia Bullrich, negó este viernes haber enviado “material bélico” a Bolivia en noviembre de 2019 durante la crisis social.
En una publicación en Facebook, Bullrich señaló que en ese entonces se colaboró con el país vecino en el envío de gendarmes para proteger la Embajada de Argentina en La Paz, así como a periodistas argentinos y funcionarios del Gobierno de Evo Morales.
“Nunca pasó por mis manos pedido alguno de material para la Fuerza Aérea Boliviana”, afirmó la exfuncionaria. Una fuente cercana al exministro de Defensa Oscar Aguad dijo a CNN que “solo se colaboró poniendo un avión Hércules de la Fuerza Aérea” para el operativo que mencionó Bullrich.
La acusación de Bolivia contra el Gobierno de Macri
La reacción de Bullrich es en respuesta a afirmaciones del Ministerio de Relaciones Exteriores de Bolivia, que este jueves acusó al Gobierno de Macri, presidente de Argentina entre 2015 y 2019, de enviar “material bélico” para dispersar las protestas durante la crisis política y social de noviembre de 2019.
En conferencia de prensa, el canciller Rogelio Mayta mostró una nota que dice haber sido enviada el 13 de noviembre de 2019 por un comandante de la Fuerza Aérea de Bolivia (FAB) al embajador de Argentina en el país.
Según leyó Mayta, la carta agradece “la colaboración prestada a esta institución armada, en el marco del apoyo internacional entre nuestros países, debido a la situación conflictiva que vive Bolivia”. En la misiva se confirmaría la recepción de 40.000 cartuchos AT12/70, gases lacrimógenos y granadas de gas.
La carta, que fue difundida por Mayta en redes sociales, no menciona la fecha en que presuntamente fue enviado el material.
Los enfrentamientos de 2019
El canciller relacionó estas acciones directamente con los violentos hechos registrados en Sacaba y Senkata el 15 de noviembre, dos días después de fechada la carta, cuando varias personas murieron en violentos enfrentamientos entre fuerzas de seguridad y manifestantes que reclamaban la renuncia de Jeanine Áñez, quien había asumido la presidencia interina del país el 12 de ese mes.
La asunción de Áñez se produjo luego de que Morales renunció a la presidencia en un momento en que oficiales de alto rango de las Fuerzas Armadas le sugirieron la dimisión en medio de acusaciones de fraude. Las acusaciones tuvieron lugar luego del informe preliminar presentado por la Organización de Estados Americanos (OEA) que establecía irregularidades en la elección de octubre de 2019 y en el marco de una creciente convulsión social. El expresidente siempre negó las acusaciones.
Para el canciller Mayta, las supuestas acciones del entonces Gobierno argentino ayudaron a consolidar el gobierno interino de Áñez, hoy en detención preventiva por presuntamente haber participado en un golpe de Estado contra Morales. Áñez niega que haya existido este golpe y denuncia una persecución política en su contra.
El canciller boliviano señaló que enviarán la información a las autoridades que adelantan investigaciones, porque consideran la situación de “extrema gravedad y absolutamente inaceptable”.
CNN se comunicó con los voceros del expresidente Macri y su entonces canciller, Jorge Faurie, para conocer sus posturas ante las denuncias de Bolivia y espera respuesta.
La reacción de Alberto Fernández
El presidente de Bolivia, Luis Arce, repudió el hecho en su cuenta de Twitter, en la que publicó una misiva enviada por su homólogo de Argentina, Alberto Fernández.
En la carta, Fernández expresa su “dolor y vergüenza” al haberse enterado de los hechos que señala Bolivia.
Además de pedir disculpas, Fernández dijo que se constató que desde Argentina hubo una partida de material “que no puede ser interpretada sino como un refuerzo a la capacidad de acción de las fuerzas sediciosas contra la población boliviana en esos días”.
La ministra de Seguridad de Argentina, Sabina Frederic, informó este jueves en Twitter que por indicación del presidente ordenó a los jefes de las fuerzas federales que informen, en las próximas 72 horas, las responsabilidades en el supuesto envío de material policial a Bolivia.
Ignacio Grimaldi colaboró con este informe.