Washington (CNN) – El gobierno de Biden está examinando la posibilidad de establecer una línea directa de emergencia con el gobierno chino similar al llamado “teléfono rojo” establecido entre EE. UU. y la Unión Soviética durante la Guerra Fría, que permitió la comunicación directa con el Kremlin como una forma de evitar una guerra nuclear.
Si bien el concepto aún está en pañales y aún no se ha planteado formalmente con los chinos, la administración Biden quiere desarrollar una herramienta de comunicación rápida que podría incorporarse a un esfuerzo más amplio para reducir el riesgo de conflicto entre Estados Unidos y China, según a un funcionario de EE.UU. y otra fuente familiarizada con las primeras conversaciones sobre el dispositivo.
Una línea directa a Beijing permitiría al presidente Joe Biden, o los altos funcionarios de su equipo de seguridad nacional, enviar inmediatamente llamadas telefónicas o mensajes encriptados al presidente Xi Jinping o a quienes lo rodean, según las dos fuentes.
Por ejemplo, se podría compartir información urgente sobre movimientos militares repentinos o mensajes de advertencia enviados sobre ciberataques.
¿Cómo nació la idea del ‘teléfono rojo’ con China?
La idea de establecer una línea directa con Beijing se remonta al menos a la administración Obama, aunque el concepto no se codificó en un memorando de seguridad nacional clasificado sino hasta el último año de la administración Trump, según una fuente familiarizada con el memo.
Los funcionarios de la administración de Biden han continuado con la idea, dijeron las fuentes, pero quedan numerosos detalles por resolver, incluido si los chinos incluso aceptarían usar el dispositivo. Durante mucho tiempo ha habido problemas para obtener respuestas rápidas de Beijing cuando se trata de asuntos urgentes, dijeron a CNN funcionarios estadounidenses actuales y anteriores.
La naturaleza de arriba hacia abajo del sistema político chino significa que la mayor parte del contacto más allá del compromiso a nivel de líder está desincentivado.
Ya existe una línea directa similar a China en el Pentágono y se supone que se usa exclusivamente para asuntos militares, pero rara vez se usa.
“Tenemos una línea directa. Se sabe que, el par de veces que la usamos, simplemente timbró en una habitación vacía durante horas y horas”, dijo Kurt Campbell, coordinador senior del Indo-Pacífico del Consejo de Seguridad Nacional, antes de este año durante una conversación sobre la diplomacia entre Estados Unidos y China y Taiwán.
Los problemas con el sistema actual, junto con el ejército cada vez más ofensivo de China, han generado una creciente preocupación entre los funcionarios de Seguridad Nacional de Estados Unidos sobre el potencial de un error de cálculo con China y la sensación de que se debe hacer más para aumentar la comunicación.
“Hay una escasez preocupante de herramientas para la gestión de incidentes en la relación entre Estados Unidos y China. Es bastante urgente que el gobierno de Estados Unidos busque líneas de comunicación que le permitan responder a una crisis o prevenir una crisis. Necesitamos un operador del 911 por así decirlo “, dijo Danny Russel, ex secretario adjunto del Departamento de Estado. Russel agregó que es imperativo considerar también herramientas “que puedan integrarse en una estrategia más amplia de comunicación de crisis, con el enfoque en una amplia reducción del riesgo”.
Un alto funcionario de la administración se negó a hablar sobre el dispositivo cuando se le preguntó al respecto, pero dijo que “en términos generales, por supuesto, tenemos interés en garantizar que la competencia con China se gestione de manera responsable. Hemos dejado claro que esta relación será definida por competencia y damos la bienvenida a esa dura competencia, pero también continuaremos trabajando para asegurarnos de que esta competencia no se convierta en conflicto”.
Ultimando los detalles técnicos
Los funcionarios del Departamento de Estado y el Consejo de Seguridad Nacional todavía están trabajando en cómo funcionaría técnicamente el dispositivo, dijeron las fuentes a CNN. El siguiente paso sería desarrollar el concepto general e incorporarlo al plan de compromiso de la administración Biden con China. Entonces, el dispositivo necesitaría la aprobación de la Casa Blanca y de los funcionarios chinos antes de ser implementado.
Si bien el “teléfono rojo” entre Estados Unidos y Rusia fue visto como una herramienta útil que aumentó la comunicación durante la Guerra Fría, su efectividad es cuestionable. Por ejemplo, la administración Obama usó la línea directa del Kremlin para advertir a Rusia que no interfiriera en las elecciones estadounidenses de 2016, una advertencia que no fue escuchada.
La eficacia de una nueva línea directa con China dependería en gran medida del compromiso de Beijing de usarla y colocarla en una posición en la que Xi tuviera acceso regular a ella.
“Sería beneficioso establecer este tipo de herramienta para la mensajería de alto nivel con China sobre preocupaciones cibernéticas estratégicas, pero debe asegurarse de que esté conectado al lugar correcto en la cadena para conectarse con el liderazgo sin esfuerzo y rápidamente”, dijo. Chris Painter, excoordinador del Departamento de Estado para asuntos cibernéticos durante la presidencia de Barack Obama. “Es posible que no obtenga la información que desea, pero podría usarse para enviar mensajes de un lado a otro para avisar a las personas”.