(CNN Español) – Las altas temperaturas no se disipan en Estados Unidos. A finales de junio, una ola de calor azotó a millones de personas tanto en el noroeste del país como en el suroeste de Canadá.

Esta situación es tan alarmante que ha tenido consecuencias incluso mortales. Además, las temperaturas en el noroeste de EE.UU. han sido calificadas como “sin precedentes” por expertos.

Y, en vez de atenuarse, las altas temperaturas continúan en Estados Unidos. Desde el viernes, las autoridades advirtieron de otra ola de calor para el oeste del país, donde la preocupación aumenta debido a las condiciones históricas de sequía y el aumento del peligro de incendios en gran parte del noroeste.

Calor en el Valle de la Muerte

Para dimensionar el panorama, tenemos un ejemplo muy reciente: el Valle de la Muerte, en California. Es un lugar que es caluroso; no obstante, el viernes 9 de julio alcanzó los 130 grados Fahrenheit (54,4 grados centígrados).

Esta es la quinta vez en la historia que un lugar alcanza esta temperatura. ¿Qué quiere decir esto? Que únicamente ha habido cinco días con esta temperatura en un universo de datos de 40.000 días registrados.

Según los pronósticos, se esperaba que las temperaturas de 125 grados Fahrenheit (51,6 grados centígrados) o más en el Valle de la Muerte sigan para el martes 13 de julio. Si se cumplía esta previsión, iban a ser 8 días seguidos con temperaturas por arriba de 125 grados Fahrenheit, que sería la segunda racha más larga en la historia registrada (empataría una racha de ocho días en 2013).

De acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional de EE.UU., el martes 12 de julio la temperatura máxima registrada en el Valle de la Muerte fue de 126 grados Fahrenheit (52,2 grados centígrados); sin embargo, el calor cedió un poco el miércoles 13 de julio, cuando la máxima en este sitio fue de 119 grados Fahrenheit (48,3 grados centígrados).

A pesar de esto, es claro que el calor está batiendo récords en muchos lugares. Ahí están las cifras como prueba de ello. Pero, más allá de los datos, ¿por qué estas temperaturas son cada vez más comunes?

Cambio climático y olas de calor

La ola de calor sin precedentes que sufrió el noroeste de Estados Unidos y el oeste de Canadá en la cosa del Pacífico a finales de junio “habría sido prácticamente imposible sin la influencia del cambio climático provocado por el ser humano”, según un análisis realizado por World Weather Attribution, una plataforma colaborativa entre científicos de EE.UU., el Reino Unido, Países Bajos, Francia, Suiza, India, y la Cruz Roja y la Media Luna Roja.

Todos los episodios de calor extremo tienen las huellas del cambio climático, escribieron los autores, pero el calor sin precedentes de finales de junio, que marcó récords históricos en Oregon, Washington y la Columbia Británica, fue posible sobre todo por el calentamiento causado por las emisiones de combustibles fósiles, concluyó el análisis.

Aunque las temperaturas estaban “muy lejos del rango de temperaturas observadas en el pasado”, lo que deja poco que comparar, los científicos determinaron que la ola de calor de finales de junio era 150 veces más probable debido al cambio climático.

Hace una década, los investigadores habrían dudado a la hora de señalar el cambio climático como causa de un acontecimiento concreto.

Ahora, con la ayuda de modelos informáticos de gran potencia, los investigadores pueden utilizar décadas de temperaturas observadas para determinar rápidamente qué papel desempeñó el calentamiento de la Tierra.

  • El uso de energías fósiles, lo cual provoca altos niveles de contaminación. Sobreexplotación de recursos naturales. “Esto nos lleva a romper los límites planetarios, consumimos más rápido de lo que la Tierra puede generar y luego recuperar”, dijo la meteoróloga. Y, “en general, todo eso es atribuible al sistema en el que vivimos donde el desarrollo es predominante hacia la acumulación de la riqueza a través de la explotación de los recursos naturales”, añadió.

Prestar atención a las oscilaciones

El análisis de World Weather Attribution deja claro que el cambio climático provocado por los humanos tiene parte de la responsabilidad en las variaciones de las temperaturas que estamos teniendo actualmente.

La cuestión del cambio climático es algo que se va a seguir estudiando en los siguientes años. Y, así como esto se investiga, al mismo tiempo se deben observar los fenómenos meteorológicos que se desarrollan desde mucho tiempo atrás y que continúan provocando cambios en el clima, de acuerdo con Héctor Magaña Fernández, meteorólogo de la Universidad de Guadalajara.

Magaña Fernández dijo en entrevista con CNN que se necesita hacer énfasis en las oscilaciones, que en pocas palabras se podrían definir como los cambios en el clima provocados por un fenómeno meteorológico, agregó.

‘El Niño’ y ‘La Niña’

Para explicar las oscilaciones, el fenómeno “más conocido es el ENSO”, añadió el meteorólogo. Las siglas en inglés ENSO se refieren al fenómeno ‘El Niño-Oscilación Sur’, el cual consiste de tres fases: ‘El Niño’, ‘La Niña’ y una fase neutral, de acuerdo con información del gobierno de Argentina.

“Cualquiera de las dos (El Niño o La Niña), cuando se presentan en el Pacífico, hace que se cambie toda la maquinaria a nivel planetario. Cuando está presente El Niño o La Niña, hay partes donde llueve más cuando no llovía; y hay partes que llueve menos cuando llovía bastante. Y entonces nos hace un cambio en el patrón de todo el engranaje de la atmósfera”, explicó Magaña Fernández.

Cabe recordar que El Niño y La Niña (que son los dos extremos del fenómeno ENSO) se presentan en el océano Pacífico tropical, indica el gobierno argentino. Mientras el primero vuelve cálidas las aguas y provoca lluvias, el segundo funciona de forma contraria.

Y estos cambios entre uno y otro, que son ejemplos de oscilaciones, generan alteraciones en el clima en diversas partes del mundo, como señaló el experto.