(CNN) – Dos semanas después del asesinato del presidente de Haití, Jovenel Moïse, en su casa en Puerto Príncipe, un hecho que ha generado una ola de incertidumbre en el país, su familia se prepara despedir los restos del mandatario.
Según un comunicado publicado el lunes por la oficina de la primera dama, quien fue herida durante el ataque en el que murió Moïse, la familia del presidente pagará por el funeral.
En el comunicado, Martine Moïse dijo que “nuestra familia decidió cubrir todos los gastos del funeral del presidente, no aceptaremos dinero del Estado. Queremos agradecer a todo el mundo su apoyo en este difícil momento, tanto aquí en Haití como fuera de Haití”.
La primera dama fue trasladada a un hospital de Miami para recibir tratamiento tras el atentado y regresó a Haití durante el fin de semana.
La semana pasada el primer ministro en funciones, Claude Joseph, anunció que el funeral del presidente tendrá lugar el viernes 23 de julio en Cabo Haitiano, en el norte del país. Desde entonces Joseph ha dejado el cargo para que pueda asumir Ariel Henry, designado por Moise poco antes de ser asesinado.
El magnicidio que sacude a Haití
Moïse, quien asumió la presidencia en 2017 y gobernaba por decreto y en un ambiente de tensión tras disolver el Congreso en 2020, fue asesinado el 7 de julio en su casa en Puerto Príncipe, capital de Haití, luego de que un comando fuertemente armado ingresara en el domicilio.
En operaciones posteriores de la policía de Haití se detuvieron a 26 presuntos miembros de este comando, compuesto por 18 colombianos, 5 haitianos y 3 ciudadanos estadounidenses, según dijo a CNN la portavoz de la Policía Nacional de Haití, Marie Michele Vernier.
Sus supuestos roles varían, pero no se cree que la mayoría sean arquitectos de alto nivel de la trama. Varios policías haitianos también han sido detenidos en una investigación administrativa separada, según las autoridades haitianas, que también acusaron a Christian Emmanuel Sanon, un médico haitiano-estadounidense, de orquestar el asesinato.
Sanon, residente en Florida pero actualmente detenido en Haití, ha negado todo conocimiento de la operación a los investigadores e insistió en su inocencia, informó CNN. En Florida, la familia de Sanon cree que lo están convirtiendo en un chivo expiatorio, según dijo Steven Bross, un amigo de la familia, a CNN.
Se cree que los colombianos operaron en dos grupos: un grupo más grande que pensó que fueron contratados como seguridad privada para Sanon, y un grupo más pequeño que sabía de un objetivo “criminal” y sabía que la operación más grande era una fachada, dijo el presidente de Colombia, Iván Duque, la semana pasada.
Con información de Caitlin Hu, Jaide García, Etant Dupain, Lionel Vital, David Shortell, Natalie Gallón y Stefano Pozzebon.