(CNN) – La administración Biden revelaría nuevas sanciones a Belarús y un nuevo decreto presidencial en medio de la continua represión por parte del régimen de Alexander Lukashenko.
Una fuente del Congreso le dijo a CNN que se esperaba que las acciones se anunciaran el lunes, en el primer aniversario de las elecciones del país de Europa del Este, que la comunidad internacional condenó como fraudulentas.
No estaba claro de inmediato cuál sería el objetivo de las nuevas sanciones, pero la líder de la oposición bielorrusa, Sviatlana Tsikhanouskaya, dijo en una sesión informativa con periodistas en Washington que durante sus reuniones en la capital estadounidense el mes pasado, le dio a la administración Biden una lista específica de objetivos que le gustaría ver sancionados.
Tsikhanouskaya dijo a los periodistas que entregó una lista de empresas que están monopolizadas por el régimen de Lukashenko “y sus compinches”, incluida la empresa de potasa Belaruskali, así como empresas petroleras, madereras y siderúrgicas.
La política opositora bielorrusa pidió a la administración Biden que promulgue sanciones más fuertes y dijo que creía que los tramos iniciales eran más simbólicos y “sanciones morales”. “No golpearon al régimen y creo que realmente perdimos tiempo”, dijo. Tsikhanouskaya añadió que las sanciones sectoriales impuestas por la Unión Europea tras la desviación forzada de Lukashenko de un vuelo de Ryanair y el arresto de un periodista bielorruso disidente a bordo eran fuertes. Estados Unidos podría seguir esa política, dijo, “y también considerar la posibilidad de imponer sanciones sectoriales a Lukashenko”, dijo.
Tsikhanouskaya se reunió con el presidente Joe Biden, el secretario de Estado Antony Blinken, el asesor de seguridad nacional Jake Sullivan y legisladores del Congreso durante su estadía en la capital de Estados Unidos.
CNN se ha comunicado con el Departamento de Estado, el Consejo de Seguridad Nacional y el Tesoro sobre las acciones previstas.
‘Envíen una señal’
Tsikhanouskaya pidió esta semana a la comunidad internacional que “envíe una señal de solidaridad con los bielorrusos que luchan por la democracia y la libertad” el 9 de agosto, aniversario de la disputada elección que provocó protestas masivas en Belarús.
La senadora demócrata Jeanne Shaheen de New Hampshire y el senador republicano Roger Wicker de Mississippi anunciaron el viernes el lanzamiento del Caucus Libre de Bielorrusia, que “presionará por la democracia en Belarús, incluidas elecciones libres y justas; luchará por unos medios de comunicación libres y protección para los periodistas y apoyar a los países vecinos, como Lituania y Polonia, en sus esfuerzos por ayudar al pueblo de Belarús , según un comunicado de prensa.
La administración anunció sanciones en junio como parte de una respuesta coordinada con el Reino Unido, Canadá y la Unión Europea al aterrizaje forzoso del vuelo de Ryanair por parte del gobierno de Lukashenko, así como a la “represión continua” en el ex estado soviético.
La embajadora de Estados Unidos en Belarús, Julie Fisher, dijo a los legisladores del Senado a principios de junio que la administración estaba “centrada en un nuevo decreto presidencial en el plazo más temprano posible”.
“Tiene toda la razón. El 2006 fue hace mucho tiempo”, dijo en respuesta al presidente de la comisión, el senador Bob Menéndez, quien hizo referencia al decreto presidencial sobre Belarús emitido por el entonces presidente George W. Bush.
“Era un mundo muy diferente, y hay espacio para que hagamos mucho con un nuevo decreto presidencial. Ese es un esfuerzo que está en marcha”, dijo Fisher en ese momento. “Nuestro objetivo sigue siendo en el que estamos, estamos enfocados en promover la rendición de cuentas de aquellas personas y entidades que son responsables o son cómplices de la represión violenta de la sociedad civil por parte del régimen y de esos abusos de derechos humanos. Así que seguiremos trayendo nuevas autoridades y nuevas herramientas de presión”.
Lukashenko, quien ha sido rechazado por gran parte de la comunidad internacional y ha estado bajo sanciones de Estados Unidos desde 2006, ha tomado medidas enérgicas contra los manifestantes y periodistas en el país. CNN informó esta semana que se pudo haber construido un posible campo de prisioneros para disidentes políticos aproximadamente a una hora de la ciudad capital Minsk. La velocista olímpica bielorrusa Kristina Timanovskaya desertó a Polonia después de alegar que representantes de la selección nacional intentaron enviarla de regreso a Belarús contra su voluntad luego de que criticara a las autoridades deportivas.