(CNN) – Desde Louisiana hasta Nueva York, las comunidades están tratando de reconstruir sus vidas más de una semana después de que el huracán Ida azotara la costa del Golfo.
Cuando tocó tierra en Louisiana el 29 de agosto, Ida era un huracán de categoría 4; y aunque se debilitó hasta convertirse en una depresión tropical cuando llegó al noreste, trajo devastación a la región.
En ambas zonas de EE.UU., las carreteras se convirtieron en ríos, se perdieron vidas y las estructuras fueron destruidas por los fuertes vientos y el aumento de las aguas. La recuperación y reparación podrían durar semanas en algunos lugares, dijeron las autoridades.
Justo después de la llegada a tierra, más de un millón de personas se quedaron sin electricidad en Louisiana. Una semana después, más de 530.000 clientes están en la oscuridad, según PowerOutage.US. La falta de energía coincide con una escasez de combustible, lo que lo convierte en un “doble golpe”, dijo la presidenta del distrito de Jefferson, Cynthia Lee Sheng, en CBS “Face the Nation”.
“Me pregunto dónde está la ayuda”, dijo el viernes Eric Mertz, residente del distrito de St. Charles. “No tengo aire acondicionado. No hay luces. Tuve covid el año pasado. Estuve en la UCI durante 14 días, y estoy recibiendo (tratamientos de) oxígeno (ahora). Y no tengo electricidad, es duro”.
En Queens, Nueva York, los afectados por la tormenta buscaban recursos para ayudar en la recuperación el domingo. Algunos necesitaban ayuda para recuperar sus servicios públicos, otros necesitaban ayuda con los daños causados por el agua y otros necesitaban ayuda con los traumas emocionales.
“Si conduces por Queens, parece que estalló una bomba. Las pertenencias personales de todos están en la calle y hemos visto cómo se ve en el sur después de un huracán. Así es Queens hoy. Es horrible”, dijo a CNN Barbara Amarantinis, residente de Queens.
Debido al cambio climático, la destrucción como la que se ve tanto en el Golfo como en la costa este por el clima extremo será “nuestra nueva normalidad”, advirtió el domingo la administradora de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias, Deanne Criswell.
“Esta es la crisis de nuestra generación, estos impactos que estamos viendo del cambio climático, y tenemos que actuar ahora para tratar de protegernos de los riesgos futuros que vamos a enfrentar”, dijo Criswell durante una entrevista en Fox el domingo.
Cientos de miles sin electricidad en Louisiana tras el huracán Ida
En Louisiana, no solo el daño de la tormenta fue grave, sino que el impacto en los servicios públicos ha dificultado aún más la recuperación de muchas partes del estado.
El estado todavía tiene un largo camino por recorrer en su proceso de recuperación, y el mayor desafío es la electricidad, dijo el gobernador, John Bel Edwards.
Más de 550.000 clientes seguían sin electricidad en Louisiana este lunes por la mañana, según PowerOutage.US.
Respondiendo a la pregunta de un periodista, el gobernador dijo que es necesario fortalecer la infraestructura eléctrica. Si bien la infraestructura se verá en apuros para resistir una tormenta tan fuerte como el huracán Ida, dijo que parece que debe fortalecerse para estar más cerca de poder hacerlo.
Algunas partes del distrito de Jefferson experimentaron “más postes de energía rotos (y) líneas de servicios públicos caídas de lo que hemos tenido en la historia” debido al huracán Ida, dijo en una actualización del sábado del concejal del distrito Dominick Impastato.
“No hay un vecindario que se haya salvado, no hay una calle que se haya salvado, no hay un vecindario que no tenga una gran cantidad de postes de energía partidos”, dijo Impastato.
Gran parte de EE.UU. acudió en ayuda del estado después de Ida para ayudar a las personas desplazadas y restaurar los servicios públicos caídos.
“La Guardia Nacional de Louisiana tiene 7.568 miembros con la ayuda de 9 estados”, dijo Edwards en una serie de tuits durante el fin de semana.
Más de 30.000 guardias civiles de 40 estados estaban ayudando con la restauración de energía, dijo Edwards.
Y a medida que la región busca que las cosas vuelvan a funcionar, algunos funcionarios también miran hacia los cambios que podrían realizarse en el futuro.
Al menos siete personas han muerto después de ser evacuadas de un hogar de ancianos a un almacén en el distrito de Tangipahoa, Louisiana, informó CNN. En respuesta, el senador estatal Kirk Talbot dijo que quiere requerir generadores de respaldo en los hogares de ancianos.
“Puedo decirles que el primer proyecto de ley que presentaré el próximo año será exigir que los hogares de ancianos tengan generadores de energía de respaldo”, dijo Talbot a WDSU, afiliada de CNN.
‘Una tormenta en un siglo’ golpea el este
Después de estudiar los daños en Louisiana el viernes, el presidente Joe Biden viajará a Nueva Jersey y Nueva York el martes para evaluar el impacto en la costa este, donde la tormenta se cobró la vida de al menos 50 personas.
El alcalde de Paterson, Nueva Jersey, André Sayegh, lamentó la destrucción y le dijo a CNN: “Como si un virus único en un siglo no fuera suficiente, tuvimos una tormenta única en un siglo”.
Solo en Paterson, alrededor de 300 personas han sido rescatadas, casi 100 autos quedaron abandonados en toda la ciudad y 30 familias buscaban refugio en refugios de emergencia el sábado, dijo Sayegh.
Muchos de los esfuerzos de rescate han sido arduos, como la ayuda de un hombre a orillas del río Passaic cerca de un puente. El jefe de bomberos de Paterson, Brian McDermott, describió cómo el Metro Urban Strike Team de Paterson perforó un agujero en el puente de hormigón, abriendo varias capas de varillas de refuerzo y acero corrugado para ver la parte inferior del puente y, finalmente, sacar al hombre.
“Todo mientras la tormenta arrecia, los vientos rugen y estamos manejando una tercera alarma de incendio. Una ambulancia atrapada con gente. Ciento cincuenta personas pidiendo ayuda y solo en 22 kms cuadrados… Muchísimo pasando”“, dijo McDermott al comentar sobre las operaciones de rescate generales de su equipo.
En Elizabeth, Nueva Jersey, una madre, un padre y un hijo murieron ahogados en su edificio de apartamentos, dijeron las autoridades.
Rosa Espinal, de 72 años, su esposo José Torres, de 71 años, y su hijo José Torres, de 38 años, murieron cuando más de 3 metros de agua empaparon su apartamento en un complejo residencial, dijo el viernes a CNN la portavoz de la ciudad Kelly Martins. Su vecina, Shakia Garrett, de 33 años, también se ahogó, dijo Martins
En Nueva York, la evaluación inicial del daño que Ida dejó se estima en al menos US$ 50 millones, dijo la gobernadora, Kathy Hochul, en una conferencia de prensa el domingo por la tarde.
Los neoyorquinos desplazados serán elegibles para recibir fondos de asistencia para vivienda temporal, asistencia por desempleo, servicios legales, asesoramiento en caso de crisis y reparaciones en el hogar, dijo.
Polo Sandoval, Sara Jorgensen, Evan McMorris-Santoro, Linh Tran, Rick Hall, Jason Hoffman, Elizabeth Joseph y Melissa Alonso de CNN contribuyeron a este informe.