(CNN) – Todos los estudiantes elegibles que asisten a las escuelas públicas del Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles (LAUSD, por sus siglas en inglés), el segundo más grande del país, deberán vacunarse contra el covid-19 antes de que finalice el año calendario, según votó la junta escolar.
En una reunión especial celebrada el jueves, la Junta Escolar Unificada de Los Ángeles decidió por voto unánime que un mandato era apropiado con base en el repentino aumento del virus provocado por la variante delta y los datos que muestran tasas más bajas de infección y hospitalización entre los que están vacunados.
La propuesta aprobada el jueves requiere que todos los estudiantes elegibles de 12 años de edad o mayores reciban sus primeras dosis de la vacuna de covid-19 a más tardar el 21 de noviembre y estén completamente vacunados para el 19 de diciembre. Los estudiantes que participan en actividades extracurriculares en persona, incluidos los deportes, enfrentan una fecha límite más temprana, el 3 de octubre, para una primera dosis de la vacuna y una segunda dosis a más tardar el 31 de octubre.
El distrito, que incluye a más de 600.000 estudiantes, ya exige la vacuna para los maestros y el personal, requiere que todos usen mascarilla, y examina a todos los estudiantes y al personal para detectar infecciones semanalmente. Las aulas también se han equipado con sistemas de ventilación mejorados en un esfuerzo por disminuir la propagación del virus.
La superintendente interina Megan Reilly estimó que hay alrededor de 225.000 estudiantes de 12 años o más en el distrito, de los cuales alrededor de 80.000 no están vacunados, pero dijo que el departamento de salud tendría los números específicos.
En su actualización diaria, Salud Pública del Condado de Los Ángeles dijo que más de la mitad de los jóvenes de 12 a 17 años en el condado están vacunados.
El mandato se aplicará a todos los estudiantes elegibles para vacunas que asistan a la escuela en persona y permitiría que aquellos con “exenciones calificadas y aprobadas” opten por no participar, aunque no se especificaron las condiciones.
Los estudiantes que rechazan la vacuna y no tienen exenciones pueden participar en el Programa de Estudio Independiente en línea. Cerca de 15.000 estudiantes están inscritos actualmente en el programa de aprendizaje remoto, según la miembro de la junta Tanya Ortiz Franklin.
Durante la reunión, Reilly enmarcó el requisito de vacunación como la mejor manera de garantizar que los niños puedan cosechar los beneficios del aprendizaje presencial.
“Como el segundo distrito más grande del país, con una población estudiantil muy diversa, sabemos que el impacto y las experiencias del covid-19 son variados entre nuestros estudiantes y nuestras familias, y que existen diferentes niveles de comodidad e incomodidad con la vacuna y otras medidas de seguridad relacionadas con el covid”, dijo Reilly.
“Junto con estas verdades, nuestra tarea sigue siendo clara: brindar a los estudiantes la mejor educación posible, que incluye los muchos beneficios del aprendizaje presencial”, dijo.
El Dr. Richard Pan, senador estatal, pediatra y padre del distrito abogó por la medida, presionando por la “inmunidad comunitaria” para proteger a los niños que son demasiado pequeños para ser elegibles para la vacuna. Elogió a LAUSD por “liderar el camino” y “seguir la ciencia para garantizar que las escuelas sean seguras”.
Si bien algunos padres hablaron a favor del mandato, otros denunciaron con enojo la propuesta.
“Debemos ser nosotros quienes decidamos por nuestros hijos, no el distrito, ni nadie más”, amonestó la madre Carla Franca. “Si quieres llevar a tus propios hijos a los campos de exterminio, hazlo, pero no eres el que debería decidir”, dijo. “Cuando tienes tus propios hijos, puedes tomar tus propias decisiones locas”.
United Teachers Los Angeles (UTLA), el sindicato que representa a los maestros, apoya la decisión de la junta.
“En última instancia, queremos que nuestras escuelas permanezcan abiertas, y la mejor manera de asegurarnos de eso es vacunar a la mayor cantidad posible de personas que están en nuestras escuelas”, dijo Cecily Myart-Cruz, presidenta del sindicato, en un comunicado.
“UTLA hizo esta petición en la mesa de negociaciones, pidió públicamente esta acción y se enorgullece de continuar liderando los temas de seguridad en nuestras escuelas. Instamos al distrito a que continúe brindando mayor acceso, educación y alcance para facilitar el aumento de la vacunación en nuestras comunidades escolares”.
El miembro de la junta escolar Nick Melvoin instó a la junta a apoyar el mandato de devolver a los niños a un sentido de normalidad, limitando la posibilidad de cerrar las escuelas al aprendizaje en persona nuevamente, como algunas escuelas se han visto obligadas a hacer en áreas con una baja tasa de vacunación.
“Es nuestra moral, ética, política, elige una palabra, es nuestra responsabilidad proteger a los niños menores de 12 años que no pueden ser protegidos de otra manera”, dijo la miembro de la junta Jackie Goldberg, quien se pronunció a favor de la medida en el reunión, instando a todos los demás miembros a apoyar también la propuesta.
“La ciencia política no es ciencia médica”, agregó el miembro de la junta George McKenna. “Sería un error no confiar en la ciencia médica en este momento, porque la alternativa es no hacer nada”.
LAUSD, que comenzó las clases el 16 de agosto, sería el primer distrito escolar importante en Estados Unidos en exigir vacunas de covid-19 para sus estudiantes elegibles. Un distrito más pequeño en el condado de Los Ángeles, el Distrito Escolar Unificado de Culver City, anunció en agosto que planeaba exigir que los estudiantes elegibles se vacunen a mediados de noviembre.
“Imaginamos que para el segundo semestre, nuestros campus de la escuela intermedia y secundaria serán absolutamente incluso más seguros de lo que son hoy”, dijo la miembro de la junta escolar del LAUSD Tanya Ortiz Franklin a John Berman de CNN el jueves por la mañana.
LAUSD estima que será necesario administrar al menos 150.000 dosis, dijo Franklin, pero el condado de Los Ángeles tiene las dosis y la capacidad para realizar este esfuerzo.
Los estudiantes que se nieguen a recibir la vacuna pero no tienen una exención pueden inscribirse en el Programa de Estudio Independiente del distrito, un recurso en línea que ya tiene alrededor de 15.000 estudiantes que han optado por el aprendizaje remoto por una variedad de razones, dijo Franklin.
El distrito está “tratando de hacer todo lo posible para mantener seguras nuestras escuelas”, dijo Franklin, lo que incluye instituir el uso de mascarillas, hacer pruebas y actualizar los sistemas de filtración de aire de las escuelas.
“Los casos están aumentando y los niños están en riesgo de la variante delta de formas que no vimos el semestre pasado”, dijo, “y nuestra responsabilidad con los niños y nuestras comunidades es su seguridad y bienestar”.
El departamento de salud dijo que al 28 de agosto, las tasas de casos para los jóvenes de 12 a 17 años no vacunados eran 424 casos entre cada 100.000 personas en comparación con 51 casos entre 100.000 de los vacunados.
Hubo 7.784 pruebas positivas entre estudiantes y 1.250 casos de personal en escuelas K-12 en todo el condado entre el 15 de agosto y el 7 de septiembre. La gran mayoría fueron en instalaciones en el Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles, que evalúa a todos semanalmente, dijo el departamento de salud.
La vacuna de Pfizer/BioNTech es la única disponible en EE.UU. autorizada para uso de emergencia para niños entre 12 y 15 años, aunque la vacuna ha recibido la aprobación total de la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA) para personas de 16 años o más.
Pero ese no es un problema para la junta escolar del LAUSD, dijo Franklin a CNN, diciendo: “Entendemos que los beneficios superan con creces los riesgos, por lo que la autorización de emergencia realmente no influye en nuestra decisión”.
“Se trata del acceso”, agregó, “y que podamos brindarlo en este país a nuestros niños, y queremos hacerlo lo más rápido posible”.
La secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, elogió la medida el jueves y le dijo a CNN: “Bien por ellos”. Pero también dijo que era importante que todos los que rodeaban a los estudiantes también fueran vacunados para proteger a los estudiantes menores de 12 años que siguen sin ser elegibles para las vacunas.