(CNN) – La inflación en Estados Unidos se tomó un respiro en agosto, bajando de su máximo de 13 años. Aun así, el aumento de los precios sigue siendo incómodamente alto en comparación con antes de la pandemia.
Los precios subieron un 5,3% en agosto en forma interanual, algo menos que el aumento del 5,4% registrado en junio y julio, según informó este martes la Oficina de Estadísticas Laborales. Si se excluyen los artículos más volátiles, como alimentos y energía, los precios subieron un 4%, también un aumento menor que en julio.
Sólo en agosto, los precios subieron un 0,3% ajustados a las variaciones estacionales. Fue el segundo mes consecutivo en que la tasa de inflación descendió ligeramente. Sin alimentos ni energía, los precios subieron un 0,1% en el mes, el menor incremento desde febrero.
Los precios de los billetes de avión y de los seguros de automóviles bajaron en agosto. Y los precios de los coches usados bajaron en agosto por primera vez desde febrero.
En los últimos 12 meses, los precios de los automóviles usados han subido un sorprendente 31,9%. La demanda de coches usados se ha disparado durante toda la pandemia, ya que la gente buscaba alternativas al transporte público. Además, la producción de coches nuevos se ha visto obstaculizada por la escasez mundial de chips, afectando también a los precios.
La inflación sigue estando muy por encima del objetivo de la Reserva Federal, en torno al 2%. La Reserva Federal ha señalado que tiene la intención de reducir parte de su estímulo económico de emergencia impuesto el año pasado cuando comenzó la pandemia. Esto podría mantener la inflación bajo control. Pero también corre el riesgo de ralentizar la economía cuando la variante del delta parece obstaculizar el crecimiento del empleo.