(CNN Español) – El presidente de Argentina, Alberto Fernández, confirmó este viernes por la noche los cambios en su gabinete, luego de días de una profunda crisis interna en el Gobierno tras la derrota del oficialismo en las elecciones primarias del 12 de septiembre.
Los nuevos integrantes del gabinete serán Juan Manzur (jefe de Gabinete de Ministros), Santiago Cafiero (Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto), Aníbal Fernández (Ministerio de Seguridad), Julián Domínguez (Ganadería, Agricultura y Pesca), Jaime Perzyck (Educación), Daniel Filmus (Ciencia y Tecnología) y Juan Ross (secretario de Comunicación y Prensa).
El mandatario resaltó y agradeció el trabajo realizado por los funcionarios salientes y recibió el compromiso en esta nueva etapa de los ministros designados. La jura de los nuevos integrantes del gabinete será el próximo lunes en Casa Rosada.
Ola de renuncias a disposición
El miércoles estalló la crisis interna cuando funcionarios del Gobierno comenzaron a ofrecer sus renuncias.
El primero en poner públicamente su cargo a la orden del presidente fue el ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro, encargado del manejo político del gobierno y uno de los más cercanos a la vicepresidenta, quien en una carta escribió: “Escuchando sus palabras del domingo por la noche donde planteó la necesidad de interpretar el veredicto que ha expresado el pueblo argentino, he considerado que la mejor manera de colaborar con esa tarea es poniendo mi renuncia a su disposición”.
Lo secundaron los responsables de las carteras de Justicia, Martín Soria; de Desarrollo Territorial, Jorge Ferraresi; de Ciencia, Roberto Salvarezza; de Medio Ambiente, Juan Cabandié; y de Cultura, Tristán Bauer.
Entre los funcionarios de otros niveles que hicieron lo mismo se destacan Fernanda Raverta, directora de la agencia de seguridad social, Anses, y Luana Volnovich, a cargo del servicio de salud de los jubilados, PAMI. Ambos organismos manejan uno de los mayores presupuestos del gobierno.
La dura carta de Cristina Fernández de Kirchner
El jueves, la vicepresidenta publicó una extensa carta en su sitio web donde sostuvo que “el peronismo sufrió una derrota electoral en elecciones legislativas sin precedente” y dio cuenta de que no habla con el presidente desde el martes.
También afirmó que en reiteradas ocasiones planteó que la “delicada situación social”, que “se traducía entre otras cosas, en atraso salarial, descontrol de precios (…) y falta de trabajo”, así como “la falta de efectividad en distintas áreas de gobierno” iba a tener “consecuencias electorales”.
Pero aseguró que no fue escuchada y que luego de “semejante catástrofe política” considera que había que renovar el gabinete. “¿En serio creen que no es necesario, después de semejante derrota, presentar públicamente las renuncias y que se sepa la actitud de los funcionarios y funcionarias de facilitarle al Presidente la reorganización de su Gobierno?”.
En su misiva, pidió al mandatario “relanzar su Gobierno”, cambiar al jefe de Gabinete y junto con el ministro de Economía “mirar los números del presupuesto”.
A pesar de la dureza de su carta, la vicepresidenta recordó sus dos mandatos presidenciales y afirmó: “He sufrido un vicepresidente declaradamente opositor a nuestro gobierno. Duerman tranquilos los argentinos y las argentinas… eso nunca va a suceder conmigo”.