(CNN) – La implementación de una política de vacunas de refuerzo contra el covid-19 mixta proporcionaría dos ventajas claras: una respuesta inmunológica más fuerte a la dosis adicional y mucha menos confusión para las personas que buscan dosis de refuerzo.
Los primeros resultados de la investigación realizada por un equipo dirigido por los Institutos Nacionales de la Salud de EE.UU. (NIH, por sus siglas en inglés) muestran que la administración de una vacuna de refuerzo diferente a la originalmente recibida proporciona una respuesta inmunológica más fuerte que la administración de una dosis adicional de la misma vacuna, resultados que coinciden con la investigación realizada a principios de año en el Reino Unido.
A los expertos en vacunas no les sorprende que sea seguro mezclar tipos de vacunas. La gente lo hace regularmente con una variedad de vacunas, incluidas las vacunas contra la influenza, que son fabricadas por seis o siete empresas diferentes tan solo en Estados Unidos en un año determinado, siguiendo una variedad de fórmulas. Entre ellas se incluyen vacunas fabricadas en huevos de gallina, células de oruga y células de riñón de perro, vacunas que protegen contra tres o cuatro cepas de gripe diferentes y vacunas que se administran por inyección o por spray nasal.
En muchos países, los niños reciben primero las vacunas contra la polio en forma de inyección y luego se refuerzan con una formulación oral diferente, una combinación que es más segura y eficaz.
Tanto la vacuna contra el covid-19 de Pfizer como la de Moderna son vacunas de ARNm, fabricadas con un material genético llamado ARN mensajero envuelto en lípidos que instruyen a las células del cuerpo para que produzcan pequeños trozos de coronavirus que estimulen una respuesta inmunológica. La vacuna Janssen, de Johnson & Johnson, utiliza un método diferente: un virus del resfriado común modificado genéticamente, llamado adenovirus, que no puede replicarse por sí mismo, pero que puede entregar un pequeño trozo de coronavirus a las células y también estimular una respuesta inmunológica.
La vacuna contra el covid-19 de AstraZeneca utiliza una tecnología similar a la de Johnson & Johnson, y varios estudios han demostrado que alternar dosis de esta vacuna con la de Pfizer genera una respuesta inmunológica fuerte.
Respuestas inmunológicas más amplias
La mezcla de diferentes tipos de vacunas podría ampliar el tipo de respuesta inmune, dijo la doctora Angela Branche, profesora adjunta de la Facultad de Medicina de la Universidad de Rochester que está ayudando a dirigir algunos de los ensayos clínicos que mezclan dosis de refuerzo.
Una vacuna vectorial, como la de Janssen o AstraZeneca, estimula una fuerte inmunidad celular, dijo. Las vacunas de ARNm estimulan potentes oleadas de anticuerpos. La mezcla de ambas, dijo, “puede ampliar la profundidad de la respuesta inmunológica”.
“Creo que los datos mostrarán que el uso de refuerzos es sin duda muy eficaz para conferir una protección adicional y más prolongada”, dijo a CNN. “Podremos reforzar con todas las vacunas”.
La semana pasada, la Dra. Kirsten Lyke, profesora de Medicina de la Universidad de Maryland, presentó los hallazgos del equipo de los NIH a los asesores de vacunas de la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA, por sus siglas en inglés). La FDA les pidió que se pronunciaran sobre la cuestión de los refuerzos mixtos y está preparando una propuesta de autorización de uso de emergencia para los refuerzos que podría incorporar sus ideas.
Aunque Lyke subrayó que los datos aún no están completos, dijo que mostraban que el refuerzo con un tipo de vacuna diferente a la dosis original proporcionaba una respuesta de anticuerpos más fuerte que el refuerzo con el mismo tipo.
“Lo que quiero señalar es que los anticuerpos neutralizantes aumentaron en respuesta a cualquier refuerzo de la serie de vacunación primaria”, dijo al Comité Asesor de Vacunas y Productos Biológicos Relacionados (VRBPAC, por sus siglas en inglés) de la FDA. “El estudio no se diseñó para comparar entre refuerzos”, añadió, en otras palabras, no fue diseñado para decir a la gente qué marca concreta podría ser mejor.
Pero eso podría no importar, porque la otra ventaja de permitir que la gente se refuerce con cualquiera de las tres vacunas autorizadas en EE.UU. sería la flexibilidad.
Mensajes confusos sobre las vacunas de refuerzo
Ahora mismo, la autorización de los refuerzos es algo complicado. Pfizer tiene una autorización de uso de emergencia para una vacuna de refuerzo para aquellas personas que recibieron las dos primeras dosis hace al menos seis meses y tengan 65 años o más, o que tengan 18 años o más y que también estén en riesgo de padecer una enfermedad grave debido a una enfermedad subyacente o porque sus condiciones de vida o de trabajo los pongan en peligro.
Moderna y Johnson & Johnson también pidieron autorización para los refuerzos. La solicitud de Moderna es casi idéntica a la de Pfizer, pero Johnson & Johnson pide refuerzos para todas las personas de 18 años o más que hayan recibido su vacuna. Si la FDA concede estas solicitudes, los miembros del VRBPAC dijeron que la gente se sentirá confundida.
“Ahora se ha creado la posibilidad de mezclar, combinar y que diferentes grupos sean elegibles”, dijo la Dra. Jeannette Lee, profesora de Bioestadística en la Universidad de Arkansas, en la reunión del viernes pasado. “Esto va a ser muy, muy desordenado en cuanto a la comunicación”.
La Dra. Amanda Cohn, funcionaria de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC, por sus siglas en inglés), que forma parte tanto del VRBPAC, como del comité asesor de vacunas de los CDC, dijo que sería muy útil que hubiera flexibilidad para las personas que intentan aplicar los refuerzos, por ejemplo, para los proveedores de medicamentos que van a los asilos con una sola marca de vacuna.
Además, está el problema de las personas que olvidaron qué vacuna recibieron o que perdieron sus registros, señaló la Dra. Melinda Wharton, directora asociada de Política de Vacunas de los CDC.
¿Qué puede suceder ahora?
El Dr. Peter Marks, que dirige la rama de vacunas de la FDA, el Centro de Evaluación e Investigación Biológica, dejó caer algunas pistas sobre la dirección que podría tomar la agencia.
“Creo que hemos obtenido lo que necesitábamos de este debate”, dijo. “Parece que hay cierto consenso en que se trata de una opción importante para la gente”, añadió. “Algunos creen que son datos suficientes”.
Señaló que varios miembros del VRBPAC dijeron que se sentirían cómodos permitiendo que cualquier persona mayor de 40 años recibiera refuerzos. El riesgo de complicaciones de una afección cardíaca inflamatoria llamada miocarditis disminuye considerablemente después de los 40 años, dijo.
Esto apunta a la posibilidad de que la FDA autorice el uso de refuerzos que cubran las tres vacunas. Los asesores en materia de vacunas de los CDC, el Comité Consultivo sobre Prácticas de Inmunización (ACIP, por sus siglas en inglés), se reunirán este jueves para ofrecer guías sobre la administración de refuerzos.
El ACIP y los CDC podrían reducir los parámetros de la FDA en su decisión final sobre los refuerzos, pero no tienen la autoridad para ampliarlos.