(CNN) – La aguja o chapitel de un altísimo rascacielos de 118 pisos alcanzó una altura de casi 700 metros sobre la capital de Malasia, Kuala Lumpur.
El Merdeka 118, que se convertirá en el segundo edificio más alto del mundo cuando esté terminado el año que viene, es ahora más alto que la Torre de Shanghái, que mide 631,8 metros, y solo es superado por el Burj Khalifa, de Dubai.
El primer ministro de Malasia, Ismail Sabri Yaakob, describió el proyecto como una “torre icónica para el futuro” en la ceremonia de finalización de la aguja este martes.
“Esto no solo es un gran logro en el campo de la ingeniería”, dijo a los periodistas. “Sino que también refuerza aún más la posición de Malasia como país moderno y desarrollado”.
Con 288.000 metros cuadrados de superficie, más de la mitad de los cuales se ofrecerán como oficinas, la torre también albergará un centro comercial, una mezquita, un hotel Park Hyatt y la plataforma de observación más alta del sudeste asiático. El amplio terreno de 1,6 hectáreas contendrá también espacios públicos y un parque a nivel del suelo.
Situado en una zona histórica de Kuala Lumpur, el rascacielos tiene vistas al estadio Merdeka, donde el antiguo líder Tunku Abdul Rahman declaró la independencia de Malasia, en 1957. Ismail Sabri, quien fue nombrado primer ministro en agosto, dijo este martes que el diseño escultórico “refleja la imagen” de Rahman levantando famosamente la mano para gritar “¡merdeka!”. (en malayo, “¡independiente!”) hace más de seis décadas.
El estudio de arquitectura australiano que está detrás del proyecto, Fender Katsalidis, dijo que los planos de cristal triangulares de la fachada del edificio se inspiraron en patrones encontrados en la artesanía malaya. El diseño también “representa simbólicamente la rica mezcla cultural que define a la gente del país”, dijo la empresa en un comunicado de prensa.
En otro comunicado, uno de los socios fundadores de la empresa, Karl Fender, añadió que el edificio se diseñó para enriquecer “la energía social y el tejido cultural de la ciudad”.
“Además, el logro de crear el segundo edificio más alto del mundo celebra los años de planificación, resolución de problemas, colaboración y esfuerzo humano necesarios para realizar un edificio de esta complejidad”, se le cita. “Alcanzar este hito de altura es un premio bienvenido”.
Anunciado en 2010, el proyecto comenzó a construirse hace cinco años, a pesar de las preocupaciones expresadas por algunos defensores del patrimonio local sobre el impacto que podría tener en el barrio histórico.
Aunque se esperaba que el edificio se inaugurara este año, las obras se detuvieron temporalmente en marzo de 2020 cuando el Gobierno de Malasia estableció medidas de confinamiento estrictas para combatir la propagación del covid-19.
El horizonte de Kuala Lumpur se ha visto transformado por los rascacielos en las últimas décadas, y la capital malaya es ahora la 13ª ciudad con edificios más altos del mundo, según el Consejo de Edificios Altos y Hábitat Urbano. Las Torres Petronas, de 452 metros, fueron los edificios más altos del mundo entre 1998 y 2004, cuando fueron superadas por las Taipei 101, de Taiwán.
En 2019, el Exchange 106, de 106 pisos, se convirtió en el rascacielos más alto de Kuala Lumpur y del sudeste asiático, a pesar de estar envuelto en la controversia financiera del 1MDB, que llevó al ex primer ministro del país Najib Razak a ser acusado de delitos como lavado de dinero y abuso de poder.