(CNN) – Lo primero que pensó el fotógrafo Jalil Najafov cuando vio al gran tiburón blanco fue: “¿Es eso real?”.
Era agosto de 2019 y Najafov, un entusiasta de los tiburones, conservacionista y cineasta, estaba explorando la costa de México con unos amigos. El grupo divisó un gran tiburón blanco nadando cerca de su barco.
Esto ya era emocionante de entrada. Entonces, el grupo se dio cuenta de que el tiburón tenía una misteriosa marca de mordedura en el costado.
“Me sorprendió mucho, ya que nunca había visto algo así en mi vida”, cuenta hoy Najafov a CNN Travel. “La marca de la mordedura era tan grande en un tiburón enorme”.
El conservacionista de tiburones y cineasta nacido en Azerbaiyán se sumergió en las aguas, armado con su cámara acuática GoPro7, para capturar una toma del gran pez con la mordida.
Compartió una de las fotografías resultantes en su cuenta de Instagram por primera vez a finales de diciembre de 2021.
Najafov explica que había extraviado su tarjeta de memoria tras el viaje a México y que no fue hasta hace poco que redescubrió las fotos.
Najafov sabía que la imagen era emocionante.
“Llevo muchos años trabajando con tiburones y contenido sobre ellos, tengo mucha experiencia en este campo”, dice Najafov. “Me queda claro cuando estoy ante algo inusual, nunca había visto una cicatriz de tiburón tan grande”.
Origen de la cicatriz
La foto, que Najafov subió a Instagram en forma de video enfocando la misteriosa mordedura, se hizo viral.
La respuesta, en palabras de Najafov, fue “una locura”, ya que la gente teorizó sobre el origen de la cicatriz.
Antes de publicarlo, Najafov recurrió a amigos y compañeros expertos en tiburones para que le dieran su opinión.
El científico Dr. Tristan Guttridge, que dirige la organización marina sin ánimo de lucro Saving the Blue y ha presentado la Semana del Tiburón de Discovery Channel, descartó la teoría de que el tiburón hubiera sufrido la mordedura en un acto de apareamiento.
“Descartaría el apareamiento probablemente debido a la posición, ya que la herida parece estar bastante curada y, aunque las cicatrices de apareamiento pueden ser desagradables, son más superficiales que eso”, fue la aportación de Guttridge, según Najafov.
Najafov dice que Guttridge concluyó que lo más probable es que el tiburón fuera atacado por otro tiburón.
Najafov dice que Michael Domeier, otro amigo y expresentador de la Semana del Tiburón, que también es director del Instituto de Ciencias de la Conservación Marina, dijo que estaba “seguro de que se trata de una agresión competitiva” y añadió que la cicatriz se habría curado desde entonces, volviéndose indistinguible.
La importancia de los tiburones
Najafov trabajó durante varios años para el gobierno de Azerbaiyán antes de que su pasión por los tiburones le hiciera cambiar de rumbo.
Su objetivo es dar a conocer los tiburones y destacar su importante papel en el ecosistema del planeta.
“No hay océano sin tiburones, ni oxígeno sin el océano. Así que si salvamos a los tiburones, salvamos al planeta”, dice Najafov, que está preocupado por la amenaza que supone el comercio de aletas.
Para algunos, la imagen de Najafov del gran blanco con la alarmante mordida tiene un atractivo de factor de miedo. Pero Najafov insiste en que nunca le ha asustado bucear junto a estas criaturas.
“Me encantan los tiburones y disfruto absolutamente de ellos mientras buceo”, dice. “¡Los tiburones no son monstruos!”
Según Najafov, existe una idea equivocada sobre el peligro que representan los tiburones.
“Los océanos albergan unas 500 especies diferentes de tiburones, pero se sabe que una docena de ellas son potencialmente peligrosas para los humanos”, afirma.
La cuenta de Instagram de Najafov incluye increíbles fotos de otras especies de tiburones tomadas en todo el mundo y el fotógrafo promete que tiene “toneladas de contenido increíble sobre tiburones aún no publicado”.
También tiene planeados próximos viajes a México y Maldivas para 2022.
“No puedo esperar a sumergirme en el agua y compartir mi experiencia”, dice