(CNN) – El arzobispo de Munich, importante clérigo de la Iglesia católica de Alemania, dijo este jueves que el informe sobre abusos sexuales históricos en la archidiócesis de la ciudad es “un corte profundo para la Iglesia”.
El cardenal Reinhard Marx señaló en una conferencia de prensa, después de leer el informe, que está “repetidamente conmocionado por el daño y el sufrimiento de las personas afectadas y también por lo que han hecho los preparadores y también por cómo se han comportado los responsables”.
“Lo que está claro aquí en el informe pericial es que hay un lado oscuro y esto seguirá siendo visible en la historia futura de nuestra Iglesia”, dijo Marx.
El bufete de abogados Westpfahl Spilker Wastl anunció la semana pasada los resultados de una investigación, encargada por la Iglesia, sobre abusos sexuales históricos en la arquidiócesis de Munich durante varias décadas.
Marx dice que está dispuesto a tomar responsabilidad por abuso sexual en la Iglesia
“La Iglesia ha sido un lugar de miedo y daño”, dijo el cardenal Marx, en la conferencia de prensa.
“Estoy dispuesto a asumir la responsabilidad”, añadió.
El cardenal recordó que el año pasado le escribió al papa Francisco sobre su sentimiento de culpa por no considerar “a las personas afectadas”.
“No puede haber perdón por esto. Durante los últimos 20 años parece que los obispos no han tenido interés en su sufrimiento y daño. En mi opinión, esto también se basa en causas sistémicas”, dijo el cardenal Marx.
Y agregó: “Quisiera pedir personalmente y también en nombre de la arquidiócesis perdón a ustedes, los afectados, por lo que han sufrido en la Iglesia”.
El arzobispo de Munich dijo que se culpa a sí mismo por no acercarse activamente a las personas afectadas.
“La forma en que la Iglesia lidió con el abuso debería ser una prioridad. ¿Podría haber actuado de una manera más comprometida? Seguramente, sí.
El cardenal Marx dijo que decidió no estar en la presentación del histórico informe de abusos, la semana pasada, pero que “no tenía nada que ver con las personas afectadas”.
Marx dijo que el informe es un “bloque de construcción” para una mayor revaluación y dijo que el trabajo no ha concluido, “debe continuar en varias esferas, especialmente en cómo el consejo asesor para las víctimas trabaja en conjunto”.
Además, dijo que sigue en pie con su petición de renunciar, presentada al papa Francisco.
“Cuando pedí mi renuncia fue en serio. El papa Francisco decidió de otra manera y me pidió que continuara con mi trabajo. Estoy listo para continuar mi trabajo si esto es útil, si esto ayuda a dar los últimos pasos en términos de revaluación y reforma de la Iglesia”, dijo el cardenal Marx.
Entre tanto, Christoph Klingan, vicario general de la archidiócesis de Munich y Freising, dijo en la conferencia de prensa sobre el informe: “Esto me conmueve y me avergüenza”.
Agregó que es necesario actuar con rapidez y “dar los pasos correctos”, pues “en el pasado no hemos hecho esto lo suficiente”, dijo.
Klingan pidió que cualquier persona afectada, que no se haya presentado, se acerque a los servicios de ayuda psicológica de las iglesias que han establecido.
“El papa Benedicto XVI debe tener la oportunidad de hacer una declaración”
Cualquier acción contra el papa emérito Benedicto XVI, conocido entonces como el cardenal Joseph Ratzinger, está indecisa ya que se le debe dar la oportunidad de hacer una declaración después de que una investigación descubrió que sabía sobre sacerdotes que abusaron de niños, pero no actuó cuando era arzobispo de Munich, de 1977 a 1982.
“¿Qué medidas son posibles contra Joseph Ratzinger? Primero tenemos que ver las acusaciones, qué tipo de declaraciones tenemos y luego quién es el responsable.
“El informe pericial también se enviará a Roma”, dijo Stephanie Herrmann, directora gerente de la archidiócesis de Munich y Freising.
Marx dijo que el papa emérito “debe tener la oportunidad de hacer una declaración, en términos de preguntas y acusaciones”.
Cuando se le preguntó si Ratzinger debería renunciar a su título de papa emérito, Marx dijo: “No quiero dar una opinión sobre el papa emérito y él quiere hacer una declaración… Creo que necesita tener la oportunidad de hacer una declaración”.
Benedicto XVI admitió el lunes que estuvo en una reunión, en 1980, en la que se discutió sobre un sacerdote abusivo, y culpó de su negación anterior de haber estado allí a “un error en la edición de su declaración”.
Una investigación independiente sobre los abusos cometidos por el clero católico en la arquidiócesis de Munich, donde Ratzinger fue arzobispo de 1977 a 1982, mostró –la semana pasada– las actas de la reunión en las que se decía que estaba presente y rechazó su negación como “apenas creíble”.