(CNN) – Las respuestas escritas presentadas por Estados Unidos y la OTAN a las demandas de seguridad de Rusia no abordaron la principal preocupación de Moscú: la expansión de la alianza del Atlántico Norte hacia el Este.
“No hay una reacción positiva sobre el tema principal en este documento”, dijo el canciller de Rusia, Sergei Lavrov, a los periodistas en Moscú.
“El problema principal es nuestra posición clara sobre la inadmisibilidad de una mayor expansión de la OTAN hacia el Este y el despliegue de armas de ataque que podrían amenazar el territorio de la Federación Rusa”.
Lavrov explicó que EE.UU. y la OTAN habían acordado previamente en el contexto de la OSCE no expandirse a expensas de la seguridad de Rusia.
“Presentamos promesas no verbales, documentos escritos firmados por los líderes de todos los países de la OSCE (la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa), incluido el presidente de Estados Unidos (Declaración de Estambul de 1999, Declaración de Astana de 2010), nuestros socios occidentales tienen que salir de una situación más grave”, explicó Lavrov.
“Este principio está claramente establecido. Tiene dos enfoques principales interrelacionados. En primer lugar, se reconoce el derecho de todo Estado a elegir libremente alianzas militares. Segundo: la obligación de cada Estado de no fortalecer su seguridad a expensas de la seguridad de los demás”, agregó el canciller ruso.
“En otras palabras, el derecho a elegir alianzas está claramente condicionado por la necesidad de tener en cuenta los intereses de seguridad de cualquier otro estado de la OSCE, incluida la Federación Rusa”, concluyó Lavrov.
El ministro de Relaciones Exteriores de Rusia admitió que las respuestas de EE.UU. y la OTAN podrían conducir a discusiones serias, pero solo sobre temas secundarios.
“Hay una reacción ahí que nos permite contar con el inicio de una conversación seria, pero en temas secundarios”, dijo.
Rusia no dará una respuesta pronto
Antes de la declaración de Lavrov, el Kremlin había informado que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, leyó las respuestas escritas de Estados Unidos y la OTAN a sus demandas de seguridad, pero dijo que él y su gobierno no se apresurarán a sacar ninguna conclusión.
“El presidente ya leyó las respuestas escritas”, dijo el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, a los periodistas durante una conferencia telefónica el jueves. “Todos los papeles están con el presidente. Tomará algún tiempo analizarlos, no nos apresuraremos a sacar ninguna conclusión”.
Peskov dijo que la respuesta de Rusia no tardaría mucho, pero advirtió que no ocurriría de inmediato.
“La reacción no debe retrasarse, pero esperar la reacción al día siguiente probablemente sería una tontería”, dijo.
El portavoz del Kremlin dijo que, en apariencia, las principales preocupaciones de Rusia no se habían abordado, pero se negó a dar una respuesta oficial definitiva a las respuestas presentadas por Estados Unidos y la OTAN.
“No se puede decir que se tomaron en cuenta nuestras consideraciones o que se demostró la voluntad de tener en cuenta nuestras preocupaciones, pero, una vez más, repito, no nos apresuraremos a emitir juicios”, explicó Peskov.
“Escuchó la declaración tanto del Secretario de Estado [de EE.UU.] [Antony Blinken] como la del [Secretario General de la OTAN, Jens] Stoltenberg, donde hablaron de manera absolutamente inequívoca sobre el rechazo de nuestra preocupación fundamental”, agregó Peskov, señalando que apenas hubo indicios positivos.
“Hay pocas razones para el optimismo, pero me abstendría de realizar evaluaciones conceptuales”, puntualizó.