(CNN) – Las fuerzas rusas saquearon y destruyeron un laboratorio cercano a la planta nuclear de Chernobyl que se utilizaba para monitorear residuos radiactivos, según afirmó el gobierno de Ucrania este miércoles.
El sitio del peor desastre nuclear que ha visto el mundo cayó en manos de Rusia en la primera semana de la invasión rusa a Ucrania, suscitando temores de que se verían comprometidos los estándares de seguridad dentro de la zona de exclusión.
Según una agencia gubernamental de Ucrania, el laboratorio formaba parte de una iniciativa financiada por la Unión Europea para mejorar el manejo de desechos radiactivos, a través del análisis in situ de muestras de desechos, así como de los empaques utilizados para eliminar los residuos.
La agencia gubernamental también informó que se sacaron del laboratorio algunas muestras de radioisótopos, átomos inestables que pueden emitir altos niveles de radiación. La agencia mencionó que esperaba que Rusia las use para “dañarse a sí misma, y no al mundo civilizado”.
Este es apenas el susto más reciente en el infame sitio del norte de Ucrania, cerca de la frontera con Belarús. El martes, el gobierno de Ucrania advirtió sobre varios incendios cerca de la planta, que, según dijo, probablemente habían sido provocados por la artillería rusa o por incendios intencionados.
Y el personal que trabajaba en la planta el día que fue capturada acaba de tener la oportunidad de volver a casa, tres semanas después de que tuvieran que cambiar de guardia con otro equipo.
El alcalde local Yuriy Fomichev habló con CNN después de 10 días de confinamiento de los trabajadores dentro de la planta y los describió en ese momento como “agotados, tanto mental como emocionalmente, pero sobre todo físicamente”.
Fomichev dijo que más de 100 personas eran personal de turno que debería haber sido relevado después de 12 horas.
Unos 13 miembros del personal y la mayoría de los guardias se negaron a rotar, dijo Rafael Mariano Grossi, director general del Organismo Internacional de Energía Atómica, en una declaración publicada el lunes.
A principios de este mes, la central se vio obligada a obtener energía de generadores diésel de emergencia durante varios días, antes de ser reconectada a la red eléctrica nacional tras reparar las líneas dañadas.
Más de 30 personas murieron inmediatamente después de la explosión del 26 de abril de 1986 que arrasó el reactor 4 de Chernobyl, cerca de Pripyat.
En los años siguientes, otras innumerables personas murieron a causa de los síntomas producidos por la radiación, según el Organismo Internacional de Energía Atómica y la Organización Mundial de la Salud. El gobierno de Ucrania evacuó a unas 135.000 personas de la zona y una zona de exclusión de 30,5 kilómetros alrededor de la planta seguirá siendo inhabitable durante décadas.
En los meses posteriores al accidente, se construyó un sarcófago para cubrir el reactor 4 y contener el material radiactivo. Más tarde se deterioró, lo que provocó fugas de radiación.
En 2016, se colocó sobre el sarcófago una estructura conocida como Nuevo Sarcófago Seguro. El enorme diseño en forma de arco pretende evitar la liberación de material contaminado, así como proteger el sarcófago de impactos externos, como tornados o tormentas eléctricas extremas.