Nueva York (CNN Business)– El viejo chiste dice así: dos amigos están en un resort y uno dice: “La comida aquí es realmente terrible”. El otro responde: “¡Y las porciones son tan pequeñas!”. Hoy en día, son los inversores a los que no les gusta el sabor de las subidas de las tasas de interés de la Reserva Federal, pero parece que quieren más de todos modos.
Los mercados se han desplomado en el último mes luego de que la Reserva Federal informara que subiría regularmente las tasas de interés en medio punto porcentual en el futuro inmediato para combatir el persistente crecimiento de la inflación. El miércoles, el índice Dow perdió más de 1.000 puntos y el mercado en general perdió un 3,6%, situando al S&P 500 en el precipicio del territorio del mercado bajista.
Ahora, los inversores piden más. Piden una subida de tasas de interés de tres cuartos de punto al término de la reunión de junio de la Fed, a pesar de que el presidente de la Fed, Jerome Powell, aseguró previamente que no está sobre la mesa una subida tan elevada.
Los analistas de Bank of America escribieron en una nota que temen que pronto se produzca una espiral de precios/salarios en Estados Unidos debido a los riesgos de que “la Fed no suba lo suficiente”. La actual reacción del mercado, decían, sugiere que “los inversores ven que la Fed se mueve con demasiada lentitud en la lucha contra la inflación: una subida de 75 [puntos básicos] podría haberse temido, pero parece que se hubiera preferido”.
Nomura Securities pronosticó que la Fed subirá las tasas de interés para los fondos federales en tres cuartos de punto en junio y julio, después de su subida de medio punto en mayo.
“Reconocemos que el discurso de la Fed aún no ha respaldado abiertamente una subida de 75 puntos básicos, pero en este régimen de alta inflación creemos que la naturaleza de la guía prospectiva de la Fed ha cambiado: se ha vuelto más dependiente de los datos y más ágil”, dijo Rob Subbaraman, jefe de investigación de mercados globales de Nomura, en una nota.
Las tasas de interés podrían alcanzar el 5% cuando termine la racha actual de aumentos de la Fed, dijo el economista jefe de Deutsche Bank. Ese sería el nivel más alto desde 2006.
Los operadores de futuros de fondos de la Fed ven un 9% de probabilidades de que la Reserva Federal eleve su principal objetivo de tasas de interés en tres cuartos de punto en junio, hasta entre el 1,5% y el 1,75%, según la herramienta CME FedWatch.
El presidente de la Reserva Federal de Saint Louis, James Bullard, ha avivado la llama de una posible subida de tres cuartos de punto este año en discursos públicos, y la presidenta del Banco de la Reserva Federal de Cleveland, Loretta Mester, dijo el lunes en una entrevista al diario japonés The Nikkei que no se podía descartar una subida de 0,75 puntos porcentuales para finales de este año.
Entonces, ¿por qué los mercados se resisten a que la Fed asegure que no habrá una subida mayor en junio, y se perjudican al predecir que sí la habrá?
“Cuando un funcionario de la Reserva Federal sugiere una subida de 50 puntos básicos, los mercados comienzan inmediatamente a tratar de fijar el precio de una subida de 75 puntos básicos”, dijo Jamie Cox, socio gerente de Harris Financial Group. “Es una auténtica locura”.
El Dow ha caído 3.930 puntos, o un 11% en 2022. El S&P 500 ha caído casi un 14% y el Nasdaq Composite ha perdido más de un 25%.
“Powell trató de retirar la subida de 75 puntos básicos de la mesa en la última conferencia de prensa”, dijo David Lebovitz, estratega de mercados globales de J.P. Morgan Asset Management.
Pero la semana siguiente, el índice de precios al consumo, una medida clave de la inflación, se disparó un 8,3% en el año. La medida fue inferior al aumento del 8,5% de marzo, pero superior al aumento del 8,1% que esperaban los economistas.
Los problemas entre los mercados y la Fed pueden tener menos que ver con la autoflagelación y más con una creciente desconfianza en la institución. El viejo mantra de “no luches contra la Fed” se ha transformado en “no le creas a la Fed”.
“La gente empieza a perder la fe en la idea de que la Fed realmente tiene el control de la inflación”, dijo Lebovitz. “Se trata de tener una idea de lo que va a hacer la Fed y, por desgracia, dada la falta de orientación clara por su parte, y un informe de inflación que sorprendió al alza, los inversores están un poco incómodos”.
Incluso el expresidente de la Fed, Ben Bernanke, sembró algunas dudas esta semana cuando rompió el edicto tácito entre los expresidentes de la Fed de no hablar mal de sus sucesores. La Fed cometió un error al retrasar su decisión de subir las tasas, dijo durante una entrevista en el programa Squawk Box de CNBC el lunes.
“Y creo que están de acuerdo en que fue un error”.