(CNN) – El uso de marihuana recreativa se asocia con un mayor riesgo de atención en la sala de emergencias y de ser hospitalizado por cualquier motivo, encontró un nuevo estudio.
“El consumo de cannabis no es tan benigno ni tan seguro como algunos podrían pensar”, dijo el autor del estudio, Nicholas Vozoris, profesor asistente e investigador clínico en la división de respirología del departamento de medicina de la Universidad de Toronto.
“Nuestro estudio demuestra que el uso de esta sustancia está asociado con resultados negativos graves, específicamente, visitas a urgencias y hospitalizaciones”, dijo Vozoris en un correo electrónico.
La marihuana recreativa genera un riesgo significativo de hospitalización
El estudio, publicado este lunes en la revista BMJ Open Respiratory Research, analizó los datos de los registros de salud nacionales de más de 30.000 residentes de Ontario, Canadá, entre las edades de 12 y 65 años durante un período de seis años.
En comparación con las personas que no consumían, los consumidores de marihuana recreativa tenían un 22% más de probabilidades de visitar un departamento de emergencias o ser hospitalizados, reveló el estudio.
El resultado se mantuvo incluso después de ajustar el análisis a más de 30 factores de confusión, como el consumo de otras drogas ilícitas, el consumo de alcohol y el tabaquismo.
“Las lesiones corporales físicas fueron la principal causa de visitas al departamento de emergencias y hospitalizaciones entre los usuarios de cannabis, seguidas de cerca por las razones respiratorias”, dijo Vozoris.
Los fumadores de marihuana tenían niveles más altos en sangre y orina de varias toxinas relacionadas con el humo, como naftaleno, acrilamida y acrilonitrilo, que los no fumadores, encontró un estudio de 2021. El naftaleno se asocia con anemia, daño hepático y neurológico, mientras que la acrilamida y el acrilonitrilo se han asociado con cáncer y otros problemas de salud.
Otro estudio realizado el año pasado encontró que los adolescentes tenían el doble de probabilidades de reportar “sibilancias o silbidos” en el pecho después de vapear marihuana que después de fumar cigarrillos o usar cigarrillos electrónicos.
La relación entre el consumo de marihuana y la salud
Varios estudios han demostrado una asociación entre el consumo de marihuana y las lesiones, tanto físicas como mentales.
El uso intensivo de marihuana por parte de adolescentes y adultos jóvenes con trastornos del estado de ánimo, como depresión y trastorno bipolar, se ha relacionado con un mayor riesgo de autolesiones, intentos de suicidio y muerte, según un estudio de 2021.
Otro estudio de ese mismo año encontró que los consumidores habituales de cannabis, incluidos los adolescentes, acuden cada vez más a las salas de emergencia quejándose de malestar intestinal grave que se conoce como “síndrome de hiperémesis por cannabis” o CHS.
La afección causa náuseas, dolor abdominal intenso y vómitos prolongados “que pueden durar horas”, dijo a CNN el Dr. Sam Wang, especialista en medicina de emergencia pediátrica y toxicólogo del Children’s Hospital Colorado, en una entrevista previa.
Una revisión publicada a principios de este año analizó estudios en más de 43.000 personas y encontró un impacto negativo del tetrahidrocannabinol o THC, el principal compuesto psicoactivo del cannabis, en los niveles superiores de pensamiento del cerebro.
Para los jóvenes, este impacto puede “consecuentemente conducir a un logro educativo reducido y, en adultos, a un desempeño laboral deficiente y una conducción de autos peligrosa. Estas consecuencias pueden ser peores en los usuarios habituales y pesados”, le dijo a CNN el coautor del estudio, el Dr. Alexandre Dumais, profesor clínico asociado de psiquiatría de la Universidad de Montreal, en una entrevista previa.
En un momento en que “los sistemas de atención de la salud ya están al límite en todo el mundo tras la pandemia de covid y con tiempos económicos difíciles… el consumo de cannabis está aumentando en todo el mundo”, dijo Vozoris.
“Los resultados de nuestro estudio deberían hacer sonar las ‘campanas de alarma’ en la mente del público, los profesionales de la salud y los líderes políticos”, dijo en su correo electrónico.