(CNN) – En la primera mirada integral de una agencia gubernamental a la masacre de la escuela primaria Uvalde, una comisión de investigación de la Cámara de Representantes de Texas publicó un informe preliminar el domingo que describe una serie de fallas de varias agencias policiales en su respuesta en la escena.
El “informe provisional” de 77 páginas, que primero se puso a disposición de las familias de las víctimas, describió “un enfoque general indiferente” por parte de casi 400 agentes que respondieron, algunos de los cuales eran de agencias federales.
Las imágenes de la cámara corporal de los primeros agentes en responder que se proporcionaron a CNN también brindan una mirada más cercana a cómo las fuerzas del orden navegaron los agonizantes 77 minutos en la Escuela Primaria Robb, que terminó como el segundo tiroteo más mortífero en una escuela en EE.UU.
El informe se produce después de que las agencias policiales fueran señaladas, que funcionarios locales denunciaran la falta de transparencia y las familias de las víctimas conocieran poco a poco qué se hubiera podido hacer mucho más para salvar las vidas de sus seres queridos.
Estas son cinco conclusiones clave del informe y los videos.
Las fuerzas del orden comparten la “responsabilidad sistémica”
El informe encontró que “la totalidad de las fuerzas del orden y su capacitación, preparación y respuesta comparten la responsabilidad sistémica de muchas oportunidades perdidas”.
Según el informe, los policías que ingresaron sabían que había disparos, evidenciados por una “nube de escombros” en el pasillo, agujeros de bala en las paredes y casquillos de rifle gastados en el piso.
Pero no hubo evidencia de que los agentes tuvieran “algún entendimiento contemporáneo, cuando llegaron al edificio, de que maestros y estudiantes en ese momento habían recibido disparos dentro de las aulas”.
Pasaría más de una hora antes de que los agentes finalmente irrumpieran en el salón de clases y mataran al atacante.
Según el informe de la comisión, los primeros en responder “perdieron un impulso crítico” al tratar la situación como un escenario de “sujeto atrincherado”, lo que requiere una respuesta más mesurada en comparación con un atacante activo.
“Corregir este error debería haber despertado una mayor urgencia para irrumpir inmediatamente en el salón de clases por cualquier medio posible, someter al atacante y brindar ayuda inmediata” a las víctimas, dice el informe.
Si hubieran reconocido la situación como un escenario de atacante activo, deberían haber priorizado el “rescate de víctimas inocentes sobre el tiempo precioso perdido en la búsqueda de llaves de puertas y escudos para mejorar la seguridad de los agentes de la ley”, dice el informe.
De los 376 agentes en la escena, 149 eran de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos, 14 eran del Departamento de Seguridad Nacional y 91 eran del Departamento de Seguridad Pública de Texas. El informe no indicó cuándo llegaron a la escena los agentes de cada agencia que respondió.
CNN se comunicó con el DSP de Texas, la Patrulla Fronteriza de EE.UU., el Distrito Escolar de Uvalde, el Departamento de Policía de la ciudad y el fiscal del distrito de Uvalde para obtener comentarios, entre otros.
Hubo “falta de comando efectivo de incidentes”
En una audiencia ante una comisión del Senado de Texas el mes pasado, el director del Departamento de Seguridad Pública de Texas, el coronel Steven McCraw, calificó la respuesta de las autoridades como un “fracaso abyecto”, culpando al comandante, quien las autoridades estatales han identificado como el jefe de policía del distrito escolar Pedro “Pete” Arredondo.
Pero Arredondo, quien fue puesto en licencia administrativa por el distrito escolar, no se consideraba comandante de incidentes, dice el informe, haciéndose eco de los comentarios que hizo al Texas Tribune el mes pasado.
“Mi enfoque y pensamiento fue responder como policía. Entonces tomé el liderazgo”, dijo Arredondo en el informe de investigación.
El informe también señaló que otros podrían haber asumido el mando.
Capacitación avanzada de respuesta rápida para el cumplimiento de la ley “enseña que cualquier agente del cumplimiento de la ley puede asumir el mando, que alguien debe asumir el mando y que un comandante de incidentes puede transferir la responsabilidad a medida que se desarrolla un incidente”, dice.
“Eso no sucedió en la Escuela Primaria Robb, y la falta de un comando efectivo de incidentes es un factor importante que provocó que otras medidas vitales no se hicieran”, según el informe.
Hubo interrupción de la comunicación durante la masacre de Uvalde
El informe atribuyó algunas de las fallas de respuesta a una interrupción de la comunicación, en la que la información conocida por algunos fuera de la escuela puede no haber sido transmitida a los de adentro.
“En particular, nadie se aseguró de que los agentes que tomaban decisiones clave dentro del edificio recibieran información de que los estudiantes y maestros habían sobrevivido a la ráfaga inicial de disparos, estaban atrapados en (las aulas) y habían pedido ayuda”, dice el informe.
Arredondo le dijo previamente al Texas Tribune que dejó sus dos radios afuera de la escuela porque quería tener las manos libres para sostener su arma.
La Escuela Primaria Robb tenía sus propios problemas, según el informe de investigación, que encontró que el WiFi deficiente “probablemente retrasó la alerta de bloqueo” el día del tiroteo. No todos los maestros recibieron el informe de inmediato y el intercomunicador de la escuela no se utilizó para comunicarse durante el cierre.
“Como resultado, no todos los maestros recibieron un aviso oportuno del cierre”, dice el informe.
Además, la escuela tenía lo que el informe llama “problemas recurrentes” con las puertas y las cerraduras, incluido el mecanismo de cierre del salón 111, que era “ampliamente conocido por estar defectuoso, pero no fue reparado”.
“La Escuela Primaria Robb tenía una cultura de incumplimiento de las políticas de seguridad que requerían que las puertas se mantuvieran cerradas con llave, lo que resultó ser fatal”, dice el informe.
El nuevo video evidencia que hubo confusión y caos durante el operativo
Imágenes dramáticas de la cámara corporal que el alcalde de Uvalde, Don McLaughlin, entregó primero a CNN, brindan una vista de cerca de la respuesta de las fuerzas del orden público a la masacre que se desarrolla.
El video fue entregado a CNN este domingo, el mismo día que se publicó el informe provisional. Este muestra a agentes rompiendo ventanas y sacando a los niños de otras aulas de la escuela, así como dentro de un pasillo buscando las llaves a tientas y sin poder abrir una puerta cerca de donde un hombre armado tenía el control de dos aulas llenas de niños muertos, moribundos y aterrorizados y maestros
Las imágenes muestran primeros planos de las afueras de las aulas 111 y 112 y revelan conversaciones entre agentes y súplicas al atacante.
CNN vio horas de imágenes de la cámara corporal, incluida la revelación de nuevas imágenes obtenidas por sargento de policía de Uvalde, Daniel Coronado, quien fue uno de los primeros en llegar a la escena a las 11:35 am, y el agente de la UPD, Justin Mendoza.
Según el video, Coronado identifica al atacante como un “sujeto masculino con un AR” a las 11:39 am, minutos después de que el atacante ingresara por primera vez a las aulas y poco después disparó a los agentes que respondieron.
Inicialmente hay confusión sobre si el pistolero estaba en un salón, pero a las 11:42 sale una llamada de que es el salón de clases de Eva Mireles, una maestra que llamó para decirle a su esposo, el policía de Uvalde Rubén Ruiz, que ella había recibido un disparo.
La cámara corporal de Mendoza muestra alrededor de las 12:11 p.m. a los agentes enterándose de que BORTAC, un equipo de respuesta rápida de la Patrulla Fronteriza, aún está a 30 minutos de distancia. Casi al mismo tiempo, la cámara corporal de Coronado capta a alguien que le pide al atacante en inglés y español que se rinda.
En el video de Mendoza, se puede escuchar a un telefonista diciendo que hay un niño en la línea de la “Sala 12” hablando de una “sala llena de víctimas”, lo cual fue transmitido al jefe interino de la Policía de Uvalde en la escena, el teniente Mariano Pargas, quien no hace ningún comentario audible.
El domingo, la ciudad de Uvalde anunció que Pargas había sido puesto en licencia administrativa para investigar más a fondo su papel en la respuesta policial. CNN se ha comunicado con Pargas en busca de comentarios y no ha recibido una respuesta.
Se conocen nuevos detalles sobre los antecedentes del atacante
El informe no nombra al pistolero ni muestra su imagen, “para no glorificarlo”, dijo, pero sí ofrece información sobre sus antecedentes, tanto en casa como en la escuela como estudiante del Distrito Escolar Independiente.
Aunque tenía “pocos problemas disciplinarios”, tuvo problemas académicos, habiendo completado solo el noveno grado cuando tenía 17 años. Y la escuela no hizo “ninguna intervención significativa” antes de que finalmente lo retiraran involuntariamente por bajo rendimiento y ausencias excesivas, el pasado octubre.
Debido a esas ausencias, dice el informe, “no había información realmente conocida por el distrito escolar que debería haber identificado a este atacante como una amenaza para cualquier campus escolar”.
Pero el atacante envió mensajes sobre armas a algunos de sus contactos en las redes sociales, dice el informe, y sugirió que iba a “hacer algo” que escucharían en las noticias.
Algunos usuarios podrían haber informado el comportamiento a las plataformas de redes sociales, indica el informe, pero las plataformas “parecen no haber hecho nada en respuesta”.
Antes del tiroteo, varios miembros de la familia del atacante sabían que había “pedido ayuda para comprar armas que habrían sido ilegales”, dice el informe. “Los miembros de la familia se negaron uniformemente a comprarle armas”.
– Travis Caldwell, Matthew J. Friedman y Elizabeth Joseph de CNN contribuyeron a este informe.