(CNN) – Después de que el huracán Ian destruyó comunidades en Florida, los equipos de rescate que van de puerta en puerta en busca de sobrevivientes están informando más muertes, y los residentes que luchan con las pérdidas enfrentan una recuperación larga y desalentadora.
Hasta este martes, al menos 109 personas murieron en EE.UU. a causa del huracán Ian, 55 de ellas tan solo en el condado de Lee, en Florida. Ian también se cobró la vida de cuatro personas en Carolina del Norte; tres de ellas en accidentes de tránsito y una en una fuga de monóxido de carbono.
Ian llegó a Florida como un furioso huracán de categoría 4 el miércoles de la semana pasada. Días después, hay residentes de comunidades isleñas aisladas del continente, cientos de miles de personas sin electricidad y personas que se han quedado sin hogar.
En algunos casos, los funcionarios gubernamentales que se ocupan de los esfuerzos de recuperación se encuentran entre los que perdieron sus hogares.
El concejal de la ciudad de Fort Myers Beach, Bill Veach, dijo que su casa de campo de 90 años de antigüedad está en ruinas, y solo queda en pie una sección que fue una adición reciente. Se encontraron piezas de su casa a dos cuadras de distancia, dijo.
“Cuando caminas por las ruinas, es una escena apocalíptica”, dijo Veach sobre su vecindario.
Aun así, incluso entre los escombros, ha habido momentos de esperanza, dijo.
“Ves a un amigo que no estabas seguro si estaba vivo o muerto y eso te da alegría. Una alegría que es mucho más grande que la pérdida de la propiedad”, agregó Veach.
Los rescatistas de todo el estado han acudido en botes y helicópteros a ayudar a los residentes atrapados. Más de 2.300 personas han sido rescatadas y más de 1.000 rescatistas han evaluado 79.000 estructuras, dijo el gobernador Ron DeSantis durante una conferencia de prensa este martes. El gobernador también anunció la apertura del primer Centro de Recuperación de Desastres - o “ventanilla única” - en Fort Myers para los residentes y las empresas que han sido afectadas por el huracán Ian.
Algunos residentes que esperaban ansiosos noticias de sus seres queridos han recibido noticias inimaginables.
La familia de Elizabeth McGuire dijo que la última vez que hablaron con ella fue el miércoles y que habían tenido problemas para comunicarse con ella. El viernes se enteraron de que la mujer de 49 años había sido encontrada muerta en su casa de Cape Coral.
La policía le dijo a su familia que murió en su cama sosteniendo su teléfono celular y parecía que murió instantáneamente, dijo su hijo Andrew Chedester.
La madre de McGuire, Susan McGuire, dijo que la destrucción de la tormenta “es masiva”.
“Cien tormentas de nieve no te costarán lo que te costará un huracán”, dijo Susan McGuire, quien se mudó a Florida desde Maryland hace unos años. “El negocio de mi esposo se fue a pique, mi hija está muerta… Nunca una tormenta de nieve me quitó nada”.
Hay casas “inhabitables” en islas aisladas del continente, con “caimanes vadeando” alrededor
En Sanibel Island, ahora aislada de la península de Florida después de que Ian destruyó una parte de la carretera que las conectaba, cada casa muestra daños, dijo el jefe de bomberos de Sanibel, William Briscoe.
“Hay muchos lugares que no son habitables. Hay lugares fuera de sus cimientos, y es muy peligroso ahí afuera”, dijo Briscoe. “Hay caimanes vadeando y hay serpientes por todas partes”.
Las cuadrillas han evacuado a 1.000 personas de Sanibel desde que el huracán Ian azotó la isla, según Briscoe.
La alcaldesa de Sanibel, Holly Smith, dijo a CNN este martes que los residentes podrán volver a la isla el miércoles para evaluar los daños a sus propiedades, pero la isla sigue presentando un riesgo extremadamente alto.
Una situación similar se está desarrollando en la cercana Pine Island, la isla barrera más grande en la costa del Golfo de Florida. Hace solo unos días, era un destino tranquilo para pescar y navegar en kayak, conocido por su atmósfera de pueblo pequeño. Ahora es un escenario de desastre, con carreteras agrietadas y casas destruidas.
Ian destruyó el único puente a Pine Island, por lo que solo se puede acceder a él por barco o avión.
Los suministros ahora están siendo lanzados a la isla en helicóptero, ya que algunos residentes han elegido quedarse, dijeron las autoridades.
“Se están entregando alimentos en Pine Island. Ahora bien, ¿es suficiente para sostenerlos durante un largo período de tiempo? No puedo decir eso todavía, ninguno de nosotros puede”, dijo este lunes el administrador del condado de Lee, Roger Desjarlais.
El médico de emergencias Dr. Ben Abo, quien se unió a los rescatistas en Pine Island, dijo que los equipos se están encontrando con residentes que negaban que la tormenta golpearía el área y ahora se están quedando sin suministros.
“Veo mucha desesperación, pero también veo esperanza”, dijo Abo. “Estoy viendo (a los equipos de) búsqueda y rescate urbano, rescate de incendios, trayendo esperanzas a las personas de que vamos a superar esto. Pero tenemos que hacerlo por etapas”.
Se está trabajando para instalar un puente temporal para Pine Island y el objetivo es completarlo para el final de la semana, dijo DeSantis este lunes.
“Este no va a ser necesariamente un puente por el que querrás ir a 70 km/h tal vez, pero al menos tendrás conectividad con el continente”, dijo el gobernador.
La Guardia Nacional también enviará equipos de energía a las islas Sanibel y Pine para comenzar a trabajar en la restauración de la energía.
Es posible que en Fort Myers Beach no se restablezca la energía durante 30 días debido a daños en la infraestructura eléctrica, según Desjarlais.
Pintó un cuadro sombrío del área, describiendo miles de botes y embarcaciones destruidos que terminaron en patios, en manglares y hundidos en aguas poco profundas y peligros ambientales por fugas de diesel y combustible.
No está claro cuántos siguen desaparecidos tras el paso del huracán Ian
No está claro cuántas personas siguen desaparecidas después del ciclón. El director de la División de Manejo de Emergencias de Florida, Kevin Guthrie, dijo que las autoridades están trabajando para consolidar una lista de desaparecidos.
Los equipos de búsqueda llevan días peinando un tramo de 11 kilómetros de Fort Myers Beach en busca de cualquier persona que aún necesite ayuda. Uno de los equipos, el South Florida Task Force 2, encontró a 150 personas atrapadas en casas en sus primeras 48 horas en la comunidad, algunas de las cuales habían subido a los áticos para evitar las aguas de la inundación, dijo.
El lunes, el equipo seguía ayudando a la gente a salir de la ciudad isleña, además de indicarles dónde conseguir comida y agua. El equipo ha encontrado personas que murieron en Fort Myers Beach, pero no ha dicho cuántas.
Bob y Rosemary Kopsack estaban entre las personas a las que el equipo ayudó a salir de la isla el lunes, después de que el ciclón arruinara prácticamente todo lo que había dentro de su casa. Bob Kopsack aún no sabía la suerte de al menos uno de sus amigos en la isla.
“Nuestro mejor amigo, no hemos podido contactar con él… y había dicho que no iba a salir de la isla. Y espero que lo haya hecho”, dijo. “Su teléfono no funciona. … Envié a la policía a su casa”.
En el condado de Lee, que incluye Fort Myers y Fort Meyers Beach, más de la mitad de las escuelas sufrieron al menos algunos daños causados por Ian, y el 14% sufrió daños importantes, según el distrito escolar. Las escuelas reabrirán lo antes posible, dijo el superintendente Christopher Bernier, sin proporcionar un calendario.
En la escuela primaria de Fort Myers Beach, el barro cubría la cafetería; los pupitres quedaron dañados, el material derribado y otros restos se amontonaban en un pasillo; y las marcas de agua llegaban casi hasta la parte superior del quicio de las puertas, según mostraron las fotos publicadas por el distrito.
Hombre atraviesa casi un kilómetro para rescatar a su madre
Después de que Ian se estrellara contra la costa oeste de Florida, un hombre de Naples caminó a través de más medio kilómetro de la inundación para salvar a su madre de 85 años.
Johnny Lauder, un exagente de Policía, le dijo a CNN que entró en acción después de que su madre, que usa una silla de ruedas, llamó presa del pánico y dijo que el agua entraba a toda velocidad en su casa y le llegaba al pecho.
El hombre llegó a su casa y la encontró con el agua hasta el cuello, pero feliz de ver a su hijo.
“El agua llegaba hasta las ventanas y la oí gritar adentro”, dijo Lauder. “Fue un susto y un suspiro de alivio en ese momento: un susto pensando que podría estar lastimada; un suspiro de alivio sabiendo que todavía había aire en sus pulmones”.
Lauder pudo llevar a su madre a un lugar seguro cuando las aguas de la inundación comenzaron a retroceder.
Un hombre de Fort Myers se aferró a las ramas durante horas y sus hijas lo creyeron perdido
Algunos residentes que perdieron propiedades y pertenencias están relatando como escaparon por poco.
Cuando Ian golpeó la costa oeste de Florida y el agua de la inundación surgió en Fort Myers, Stan Pentz, de 69 años, envió un mensaje de texto a su hija, Stephanie Downing, y le dijo que el agua estaba subiendo en su condominio y que podría ahogarse. Después, se quedó sin servicio telefónico, según declaró este martes a CNN.
A más de una hora de distancia, Downing supuso lo peor. Cuando vio a su hermana al día siguiente, “simplemente nos abrazamos y lloramos porque realmente pensamos que lo habíamos perdido”.
Sin embargo, Pentz consiguió salir. Al escapar de su casa, fue “zarandeado”, recordó, y se aferró a unas ramas, a las que se aferró durante horas, “con el viento soplando y el agua cayendo sobre mi cabeza. Fue mucho tiempo”. Al cabo de un tiempo, el viento y el agua cambiaron y llegó al segundo piso de un edificio, donde se acurrucó en un rincón hasta el amanecer, dijo.
“Seguía y seguía. No paraba y yo solo pensaba en mis hijos y en mis nietos y en todos los que conozco, y ellos me mantenían en mi mente”, dijo.
La tormenta pasó y Pentz encontró a alguien que le enviara un mensaje de texto a Downing. La hermana y el cuñado de Downing condujeron hasta Fort Myers y lo recuperaron.
Cuando Downing vio por fin a su padre, “apoyé mi cabeza en su pecho y le dije: ‘Oye, Michael Phelps, has nadado bien’”, recordó mientras Pentz se reía.
Pentz lo perdió todo. Pateó su propio automóvil sumergido mientras nadaba para ponerse a salvo, dijo. Downing dijo que ahora se está quedando con su familia en su casa de Rotonda West. Un GoFundMe ha recaudado miles y un generoso amigo le trajo a su padre ropa y zapatos. Pudo reemplazar su teléfono celular y su licencia de conducir este martes, dijo Downing.
“Estamos logrando algo”, dijo.
En espera de noticias
Tonia Werner es una de las personas que esperan noticias sobre un ser querido. Han pasado tres días desde que escuchó algo sobre su padre, David Park, quien ingresó en la UCI de ShorePoint en Port Charlotte días antes de que el huracán Ian tocara tierra.
“A partir del viernes estaba conectado a un ventilador y ese es el último contacto”, dijo Tonia a CNN. “Sin teléfonos, nada. Ni siquiera sé si está vivo. Me he acercado de todas las formas que se me ocurren, rogando por información porque estamos atascados. Y no hay manera de llegar a él”.
Tonia vive a casi una hora de Port Charlotte y no puede llegar al área debido a las inundaciones en Arcadia, que bloquearon el acceso para que cualquiera pueda cruzar la ciudad, dijo.
Los hospitales en Florida han estado experimentando una “presión significativa” sobre la capacidad desde que Ian azotó la península, dijo Mary Mayhew, presidenta y directora ejecutiva de la Asociación de Hospitales de Florida.
Los departamentos de emergencia sufrieron daños, la dotación de personal se vio afectada ya que muchos trabajadores del hospital fueron desplazados o perdieron sus vehículos en el huracán, y las instalaciones perdieron acceso confiable al agua.
Los hospitales tampoco suelen dar de alta a los pacientes que no tienen un lugar adonde ir, ya sea que sus hogares hayan resultado dañados por la tormenta o que sus hogares de ancianos hayan sido evacuados y cerrados temporalmente.
– Amanda Musa, Amy Simonson, Christina Zdanowicz, Jamiel Lynch, Carma Hassan, Nadia Romero y Jaide García de CNN contribuyeron a este informe.