(CNN Español) –– La fiebre del mercado laboral en Estados Unidos todavía no cede completamente: la economía sumó 263.000 empleos en septiembre, lo que representa una reducción frente a los 315.000 de agosto, según el reporte de la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS, por sus siglas en inglés).
Si bien la cifra es sólida, también marca el segundo mes consecutivo de caída de los totales, apuntando a una contracción del mercado laboral. Un resultado que, justamente, la Reserva Federal busca mientras batalla con una inflación no vista en décadas.
“El mercado laboral se está contrayendo con calma, moderando los empleos y el aumento de los salarios sin complicaciones, mientras la Reserva Federal busca señales de un enfriamiento de la inflación”, dijo Daniel Zhao, economista principal de Glassdoor, en un comunicado. “El mercado laboral está haciendo su parte al mantener las ganancias de empleo positivas y moderando las ganancias salariales”.
Aún así, un tema que le preocupa a la Fed es la participación en la fuerza laboral, destacó Julia Pollak, economista en jefe de ZipRecruiter. Tener una mayor proporción de personas en la fuerza laboral puede ayudar a reducir el crecimiento de los salarios, uno de los varios factores que los funcionarios de la Reserva Federal temen que pueda mantener alta la inflación. El informe de septiembre mostró que la tasa de participación en la fuerza laboral se redujo al 62,3% en comparación al 62,4% del mes anterior.
“Había esperanza de que la reapertura de las escuelas pudiera un gran momento” para que muchas de las personas que abandonaron la fuerza laboral durante la pandemia regresaran a trabajar, dijo Pollak a CNN Business. “Es posible que no veamos volver a algunas de las personas que se fueron”.
La tasa de desempleo volvió a caer a un 3,5%, un mínimo de medio siglo, frente al 3,7% anterior, como resultado de la disminución en el número de personas que buscan trabajo.
“La Reserva Federal analiza este y otros datos del mercado laboral, junto a las presiones inflacionarias todavía fuertes, y seguirá creyendo que necesita aumentar las tasas de interés”, dijo Mark Hamrick, analista económico principal de Bankrate, en un comunicado.
“Eso parece ser una certeza para la próxima reunión a principios de noviembre. La magnitud de los futuros aumentos de tasas se hará más clara a medida que nos acerquemos a las dos últimas reuniones [de formulación de políticas] del año”, dijo.
La Fed se reúne el 1 y 2 de noviembre para discutir la política monetaria y se espera que aumente su tasa de interés de referencia en tres cuartos de punto porcentual por cuarta vez consecutiva, algo sin precedentes.