(CNN) – Casi todos los fines de semana, los callejones estrechos de Itaewon, el distrito de vida nocturna iluminado con luces de neón en la capital de Corea del Sur, Seúl, están llenos de personas que salen de fiesta y turistas. Ahora es el sitio de uno de los peores desastres en el país.
El sábado por la noche, decenas de miles de personas acudieron al área en el centro de Seúl para celebrar Halloween, pero el pánico estalló cuando la multitud se abultó, y algunos testigos dijeron que se volvió difícil respirar e imposible moverse.
Al menos 156 personas murieron en el aplastamiento, con docenas más heridos, según el Ministerio del Interior y Seguridad del país. Entre los muertos había 20 ciudadanos extranjeros, según las autoridades. El Ministerio dijo que no puede verificar las nacionalidades.
Las autoridades iniciaron una investigación urgente para averiguar cómo salió tan terriblemente mal lo que se suponía que sería una noche de celebración, mientras familias de todo el país lloran y buscan a sus seres queridos desaparecidos.
Esto es lo que sabemos hasta ahora.
¿Por qué las multitudes eran tan grandes?
Itaewon ha sido durante mucho tiempo un lugar popular para celebrar Halloween, especialmente porque la festividad se volvió más popular en Asia en los últimos años. Algunos incluso vuelan a Seúl desde otros países de la región para las festividades.
Pero durante los últimos dos años, las celebraciones fueron impactadas por las restricciones pandémicas sobre el tamaño de las multitudes y las órdenes de uso de máscaras.
El sábado por la noche marcó el primer Halloween desde que el país levantó estas restricciones, lo que le otorga un significado particular para muchos participantes entusiastas en Seúl, así como para visitantes internacionales, incluidos residentes y turistas extranjeros.
Los hoteles y los eventos con boleto en el distrito se habían reservado con mucha anticipación y se esperaban grandes multitudes.
¿Qué sucedió?
Testigos le dijeron a CNN que había muy poco control de multitudes, si es que había alguno, antes de que la masa de personas se volviera mortal.
Los videos y fotos publicados en las redes sociales muestran a personas hacinadas, de pie hombro con hombro en la calle estrecha.
Las multitudes no son inusuales en esa área, ni para los residentes de Seúl, que están acostumbrados a los metros y las calles abarrotados en una ciudad de casi 10 millones.
Un testigo dijo que la gente tardó un tiempo en darse cuenta de que algo andaba mal, y los gritos de pánico de la gente competían con la música a todo volumen de los clubes y bares de los alrededores.
Después de que llegaron las primeras llamadas de emergencia alrededor de las 10:24 p.m., las autoridades acudieron rápidamente al lugar, pero el gran volumen de personas dificultó llegar a quienes necesitaban ayuda.
Videos publicados en las redes sociales mostraron a personas realizando compresiones en el pecho a otros asistentes a la fiesta tirados en el suelo mientras esperaban asistencia médica.
Las miles de personas disfrazadas de Halloween contribuyeron a la sensación generalizada de confusión y caos. Un testigo describió haber visto a un agente de policía gritando durante el desastre, pero algunos juerguistas lo confundieron con otro asistente a la fiesta.
La causa del aplastamiento aún está bajo investigación, aunque las autoridades dijeron que no hubo fugas de gas ni incendios en el lugar.
¿Quiénes eran las víctimas?
Las víctimas eran jóvenes, en su mayoría adolescentes y veinteañeros, según las autoridades. Conocido por su vida nocturna y sus restaurantes de moda, Itaewon es popular entre mochileros y estudiantes internacionales.
Entre los 151 muertos había 19 ciudadanos extranjeros, algunos provenientes de Estados Unidos, Irán, Noruega, China, Tailandia y Uzbekistán, según las autoridades.
Más del 90% de las víctimas han sido identificadas, indicó el domingo el ministro del Interior y Seguridad de Corea del Sur, Lee Sang-min.
Agregó que alrededor de 10 personas no pueden ser identificadas, ya que algunas son menores de 17 años, demasiado jóvenes para tener una tarjeta de identificación nacional, y otras son extranjeras.
A partir de las 2 p.m. del domingo, hora local, las autoridades de Seúl recibieron 3.580 informes de personas desaparecidas, según el gobierno de la ciudad. Ese número podría incluir múltiples informes para la misma persona, o informes presentados el sábado por la noche para personas que han sido encontradas desde entonces.
¿Cuál fue la respuesta oficial?
Lee Sang-min, Ministro del Interior y Seguridad, dijo el domingo que “un número considerable” de policías y fuerzas de seguridad habían sido enviados a otra parte de Seúl el sábado en respuesta a las protestas esperadas allí.
Mientras tanto, en Itaewon, la multitud no había sido inusualmente grande, dijo, por lo que solo se había desplegado un nivel “normal” de fuerzas de seguridad allí.
A medida que se desarrollaba el desastre el sábado por la noche, se enviaron más de 1.700 personas de las fuerzas de respuesta de emergencia, incluidos más de 500 bomberos, 1.100 agentes de policía y unos 70 trabajadores del gobierno.
El presidente Yoon Suk Yeol convocó una reunión de emergencia e instó a los funcionarios a identificar a los muertos lo antes posible.
Pero incluso horas después, las familias seguían esperando saber si sus seres queridos sobrevivieron.
Inmediatamente después, muchas personas fueron trasladadas a instalaciones cercanas, mientras que los cuerpos fueron llevados a morgues de hospitales. Las familias se reunieron en sitios cercanos a la escena, donde los funcionarios recopilaban los nombres de los desaparecidos y fallecidos.
Yoon prometió implementar nuevas medidas para evitar que vuelvan a ocurrir incidentes similares y dijo que el gobierno “realizaría inspecciones de emergencia no solo para los eventos de Halloween sino también para los festivales locales y los gestionaría minuciosamente para que se realicen de manera ordenada y segura”.
El gobierno también proporcionará tratamiento psicológico y un fondo para las familias de los fallecidos y heridos. Las autoridades han declarado un período de luto nacional hasta el 5 de noviembre y han designado el distrito de Yongsan-gu, donde se encuentra Itaewon, como zona especial de desastre.
Preguntas que se hacen
A medida que una nación atónita y afligida se enfrenta a la tragedia, también surgen preguntas sobre cómo pudo haberse desarrollado tal desastre en un área popular donde se sabe que la gente se reúne.
Es difícil precisar qué pudo haber desencadenado la aglomeración, pero las autoridades “habrían anticipado grandes números… antes del sábado por la noche”, dijo Juliette Kayyem, experta en gestión de desastres y analista de seguridad nacional de CNN.
“Las autoridades tienen la responsabilidad de vigilar el volumen de la multitud en tiempo real, para que puedan sentir la necesidad de sacar a la gente”, agregó.
Suah Cho, de 23 años, quedó atrapada entre la multitud pero logró escapar a un edificio a lo largo del callejón. Cuando se le preguntó si había visto a algún funcionario tratando de limitar el número de personas que ingresaban al callejón, respondió: “Antes del incidente, en absoluto”.
Otro testigo presencial describió que la situación “empeoraba cada vez más”, y dijo que podían escuchar a “personas pidiendo ayuda para otras personas, porque no había suficientes rescatistas que pudieran manejar todo eso”.