(CNN) – Irán está buscando la ayuda de Rusia para reforzar su programa de armas nucleares, creen funcionarios de inteligencia de EE.UU., a medida que Teherán busca un plan de respaldo en caso de que no se materialice un acuerdo nuclear duradero con las potencias mundiales.
La información de inteligencia estadounidense sugiere que Irán ha estado pidiendo ayuda a Rusia para adquirir materiales nucleares adicionales y para la fabricación de combustible nuclear, dijeron fuentes informadas sobre el asunto. El combustible podría ayudar a Irán a alimentar sus reactores nucleares y potencialmente podría acortar aún más el llamado “tiempo de fuga” de Irán para crear un arma nuclear.
Los expertos enfatizaron a CNN, sin embargo, que el riesgo de proliferación nuclear varía según el reactor en el que se utilice el combustible. Y tampoco está claro si Rusia ha accedido a ayudar: el Kremlin se ha opuesto abiertamente durante mucho tiempo a que Irán obtenga un arma nuclear.
Pero la propuesta iraní se produjo en medio de una asociación en expansión entre Irán y Rusia que, en los últimos meses, incluyó el envío de drones y otros equipos de Irán a Rusia para su uso en su guerra en Ucrania, y el posible asesoramiento de Moscú a Teherán sobre cómo reprimir un movimiento de protesta actual en Irán, dijeron funcionarios estadounidenses.
Por lo tanto, el Gobierno Biden observa con preocupación cualquier nueva área de cooperación entre Irán y Rusia. Cualquier asistencia rusa encubierta a Irán que pudiera impulsar los esfuerzos iraníes para producir un arma nuclear también significaría un cambio significativo en la política rusa, dada la membresía de Rusia en el grupo P5+1 de países que han sido parte de las negociaciones para obstaculizar el programa nuclear de Irán.
“Como hemos dicho, el JCPOA no está en la agenda”, dijo a CNN la portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, Adrienne Watson, refiriéndose al nombre formal del acuerdo nuclear con Irán, el Plan de Acción Integral Conjunto. “Hemos estado trabajando con socios para exponer los crecientes lazos entre Irán y Rusia, y hacerlos responsables. Seremos firmes en contrarrestar cualquier cooperación que sea contraria a nuestros objetivos de no proliferación”.
La Misión iraní ante la ONU y el Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia no respondieron las solicitudes de comentarios.
Ucrania alega que Irán está buscando ayuda de Rusia
El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, sugirió la semana pasada que Irán buscaba ayuda de Rusia con su programa nuclear a cambio de la asistencia militar que le ha brindado a Moscú, pero la información de inteligencia obtenida por EE.UU. no indica la existencia de un quid-pro-quo explícito, dijeron las fuentes.
En cambio, las propuestas de Irán a Rusia parecen estar motivadas, al menos en parte, por la creencia entre altos funcionarios iraníes de que un nuevo acuerdo nuclear no se reactivará o, si lo hace, no durará.
Fuentes informadas sobre la información de inteligencia le dijeron a CNN que las preocupaciones de Irán parecieron más agudas durante el verano boreal, ya que parecía estar acercándose a un nuevo acuerdo nuclear con EE.UU. y otras potencias mundiales conocido como P5+1, un grupo que incluye a Rusia. El temor de Irán era que una futura administración pudiera retirarse de un acuerdo, como lo hizo el Gobierno Trump en 2018, por lo que buscó un acuerdo paralelo con Rusia que le permitiera reconstituir su programa nuclear rápidamente si fuera necesario.
CNN informó anteriormente que Irán buscó garantías de EE.UU. de que una futura administración no incumpliría el acuerdo, una promesa que Washington dijo que no podía cumplir.
Cuando se le preguntó si la creciente asociación Irán-Rusia fue un factor en el descarrilamiento de las conversaciones sobre el acuerdo nuclear, un alto funcionario de la administración dijo a CNN: “Obviamente, los acuerdos paralelos entre Rusia que socavaron fundamentalmente la estructura del acuerdo de 2015 serían una preocupación seria y reducirían aún más la posibilidad de un retorno al acuerdo”. El funcionario se negó a comentar específicamente sobre las evaluaciones de inteligencia.
James Acton, codirector del Programa de Política Nuclear de Carnegie Endowment for International Peace, dijo que no cree que Irán necesariamente necesite la ayuda, pero que sí tienen un incentivo, a saber, producir el combustible de manera más rápida, económica y y en una línea de tiempo más corta.
“Tienen incentivos claros para pedir ayuda, particularmente en el lado del combustible”, dijo Acton.
“Hace tres o cuatro años, cuando las relaciones entre Estados Unidos y Rusia eran malas, pero no catastróficas, sería bastante escéptico de que Rusia brindara ayuda a Irán”, agregó Acton. “Pero en las condiciones actuales, en las que las relaciones entre Estados Unidos y Rusia son extremadamente malas y las relaciones entre Rusia e Irán están mejorando, creo que la ecuación parece bastante diferente para Rusia”.
La retirada de EE.UU. del JCPOA probablemente también aumentó la voluntad de Rusia de ayudar a Irán a este respecto, señaló Acton, y especialmente ahora que un nuevo acuerdo parece fuera de su alcance.
Rusia desempeñó un papel clave a lo largo de 2021 en las conversaciones del acuerdo nuclear e incluso medió en algunos acuerdos que permitieron que el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) avanzara con las inspecciones en los sitios nucleares iraníes, manteniendo efectivamente las negociaciones en marcha.
Sin embargo, después de la invasión rusa de Ucrania en febrero, los funcionarios rusos parecían menos interesados en el acuerdo. En junio, Rusia rechazó una resolución propuesta por el OIEA que criticaba a Irán por no cooperar con las inspecciones de rastros de uranio encontrados en algunos sitios nucleares no declarados en el país, un punto crítico que contribuyó al descarrilamiento de las conversaciones. Ese mismo mes, una delegación rusa comenzó a hacer visitas a un aeródromo en Irán para examinar drones con capacidad armamentística, que Rusia ahora ha comprado y utilizado en Ucrania por cientos.
Los funcionarios estadounidenses han enfatizado en los últimos días y semanas que las negociaciones del acuerdo nuclear están casi muertas, al menos por ahora. La represión brutal y violenta del régimen iraní contra los manifestantes y el apoyo a las operaciones militares rusas en Ucrania ha hecho que sea cada vez más difícil para los altos funcionarios del Gobierno Biden imaginar llegar a un acuerdo con Teherán que le proporcione una ganancia financiera inesperada en forma de alivio de las sanciones.
El enviado especial de Estados Unidos para Irán, Rob Malley, dijo el lunes que, si bien Estados Unidos sigue comprometido con la diplomacia para limitar el programa nuclear de Irán, los funcionarios estadounidenses no van a “perder el tiempo” en el acuerdo nuclear “si nada va a suceder”.
En cambio, EE.UU. ahora se enfoca en áreas en las que puede ser “útil”, dijo Malley, como apoyar a los manifestantes en Irán y buscar formas de detener las transferencias de armas iraníes a Rusia. Señaló que Estados Unidos todavía tiene “una preferencia por la diplomacia” al tratar con Irán. Pero, agregó, “usaremos otras herramientas y, en última instancia, una opción militar si es necesario, para evitar que Irán adquiera un arma nuclear”.
Katie Bo Lillis de CNN contribuyó con el reportaje.