(CNN Business) – La senadora Amy Klobuchar criticó a Ticketmaster en una carta abierta a su presidente ejecutivo, diciendo que tiene “serias preocupaciones” sobre las operaciones de la compañía luego de un colapso del servicio este martes que enfureció a los seguidores de Taylor Swift.
En la carta al CEO Michael Rapino, el demócrata de Minnesota y presidenta de la subcomisión Judicial del Senado sobre Política de Competencia, Antimonopolio y Derechos del Consumidor, escribió que las quejas de los seguidores de Swift por no poder comprar boletos para su próxima gira, además de las críticas sobre las altas tarifas, sugiere que la empresa “sigue abusando de sus posiciones en el mercado”.
“El poder de Ticketmaster en el mercado primario de boletos lo aísla de las presiones competitivas que normalmente empujan a las empresas a innovar y mejorar sus servicios. Eso puede resultar en los tipos de fallas dramáticas en el servicio que vimos esta semana, donde los consumidores son los que pagan el precio”, escribió Klobuchar.
Ticketmaster y Live Nation, el promotor de conciertos más grande del país, se fusionaron hace aproximadamente una década. Klobuchar señaló que la compañía en ese momento se comprometió a “desarrollar una plataforma única de fácil acceso” para la entrega de boletos. Este jueves, la senadora le dijo a Rapino, el CEO de Ticketmaster, que “parece que su confianza estaba fuera de lugar”.
“Cuando Ticketmaster se fusionó con Live Nation en 2010, estaba sujeto a un decreto de consentimiento antimonopolio que le prohibía abusar de su posición en el mercado”, escribió Klobuchar. “Sin embargo, ha habido numerosas denuncias sobre el cumplimiento de ese decreto por parte de su empresa”.
La carta incluye una lista de preguntas para que Rapino responda la próxima semana. Ticketmaster no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios de CNN Business.
Este martes, la compañía dijo que “ha habido una demanda históricamente sin precedentes con millones que se presentaron” para comprar boletos para la gira de Swift y agradeció a los seguidores por su “paciencia”.
Críticas al dominio de Ticketmaster
Klobuchar es la última política de alto perfil en criticar abiertamente a Ticketmaster por el desastre de venta de entradas que dejó mala sangre entre los seguidores de Swift y la compañía.
“Los tiempos de espera excesivos y las tarifas de @Ticketmaster son completamente inaceptables, como se ve con los boletos de @taylorswift13 de hoy, y son un síntoma de un problema mayor. No es ningún secreto que Live Nation-Ticketmaster es un monopolio sin control”, tuiteó el martes el representante David Cicilline, actualmente presidente del Subcomité Antimonopolio.
“Recordatorio diario de que Ticketmaster es un monopolio, su fusión con LiveNation nunca debería haber sido aprobada y deben ser controlados”, tuiteó la representante Alexandria Ocasio-Cortez.
Las quejas sobre el poder de monopolio de la compañía se remontan mucho antes de los problemas de boletos de este martes, cuando la plataforma pareció colapsar o congelarse durante las compras de preventa para la última gira de Swift.
En 1994, cuando Taylor Swift tenía solo cuatro años y las colas de compra de boletos eran en persona o por teléfono, no en línea, el grupo de rock Pearl Jam presentó una queja ante la división antimonopolio del Departamento de Justicia afirmando que Ticketmaster tiene un “virtualmente absoluto monopolio de la distribución de entradas para conciertos”. Intentó reservar su gira solo en lugares que no usaban Ticketmaster.
El Departamento de Justicia y muchos fiscales generales estatales han presentado quejas similares a lo largo de los años.
A pesar de esas preocupaciones, Ticketmaster continuó volviéndose más dominante. La queja de Pearl Jam fue desestimada en silencio. El Departamento de Justicia y los estados permitieron que se llevara a cabo la fusión de Live Nation Ticketmaster a pesar de una presentación judicial en 2010 en el caso que planteó objeciones a la fusión. En la presentación, el Departamento de Justicia dijo que la participación de Ticketmaster entre las principales salas de conciertos superó el 80%.
– Chris Isidore de CNN Business contribuyó a este informe.