Geovanny Caripaz, de 39 años, se toma una foto con Santa Claus el día de Navidad en un albergue para migrantes en El Paso, Texas.

(CNN) – Cuando Santa Claus llegó al albergue de migrantes de El Paso, Texas, para traer regalos a los niños, un migrante pidió solo una foto con él.

La foto que tomó Geovanny Caripaz, de 39 años, fue enviada rápidamente por WhatsApp a su hijo de 7 años en Venezuela.

“Le dije que Santa Claus está en Estados Unidos, así que su regalo podría demorarse en llegar a Venezuela”, dijo Caripaz.

Su hijo, Carlos Santiago Caripaz, quería desesperadamente una bicicleta para Navidad, según su padre, que abandonó Venezuela hace tres meses.

Respondiendo con una nota de voz, el niño le dijo a su padre que le encantaba la foto y le preguntó si era realmente Santa el que estaba con él.

Caripaz, derrumbándose, dijo a CNN que la bicicleta llegará después de que encuentre trabajo en Estados Unidos.

“Le dije que llegaría el Día de Reyes o en algún momento de enero”, comentó.

Caripaz planea viajar a Dallas, donde tiene familia y amigos. Pero, por ahora, ha dormido en las calles cerca del refugio para inmigrantes de la Iglesia del Sagrado Corazón, que actualmente está por encima de su capacidad.

Las temperaturas de El Paso se han vuelto gélidas debido a la tormenta invernal que azota Estados Unidos, y en medio del reciente aumento de llegadas de inmigrantes, muchos como Caripaz han luchado por encontrar refugio.

La ciudad declaró el estado de emergencia el pasado fin de semana por los miles de migrantes que viven en condiciones inseguras, mientras la política fronteriza del gobierno de Trump que mantiene a los migrantes fuera de Estados Unidos sigue en proceso de cambio en medio de procedimientos judiciales.

Muchos de los migrantes que llegan a El Paso no quieren quedarse, según las autoridades de la ciudad, pero la infraestructura local lucha para apoyar a las multitudes que llegan y salen.

El refugio de la Iglesia del Sagrado Corazón dijo que da prioridad a las mujeres y los niños durante el frente frío, y ha estado abierto a todos los migrantes, independientemente de su estatus migratorio. Cientos de personas siguen esperando fuera de la iglesia.

Muchos migrantes dijeron a CNN que dormir a -6 grados centígrados de temperatura ha sido muy difícil, pero que estar lejos de sus familias es especialmente duro en Navidad.

“Lo hago por mis hijos”, dijo Caripaz. “Vine a trabajar, tengo fe… (Mi hijo) quiere su bicicleta y le dije que Santa no puede traerla todavía, pero que la traerá en enero”.

Ashley Killough, Ed Lavandera, Paradise Afshar y Christina Maxouris, de CNN, contribuyeron a este artículo.