(CNN) – Decenas de demócratas de la Cámara de Representantes instaron este jueves al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, a no “brindar refugio” al expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, a raíz de un ataque a las instituciones democráticas de Brasil que se hizo eco de los ataques del 6 de enero en el Capitolio de Estados Unidos.
En su carta, los legisladores pidieron al gobierno que revalúe el estatus de Bolsonaro en Estados Unidos y revoque su visa si es necesario, y que “el Departamento de Justicia y otras agencias federales relevantes rindan cuentas, según corresponda, a cualquier actor radicado en Florida que pudo haber financiado o apoyado los crímenes violentos del 8 de enero”.
“Deberíamos cooperar plenamente con las autoridades brasileñas en la investigación de cualquier papel que jugaron el señor Bolsonaro o quienes lo rodeaban en los eventos del 8 de enero y cualquier delito que cometió mientras estaba en el cargo”, escribieron los legisladores, encabezados por los representantes Joaquín Castro, Gregory Meeks, Rubén Gallego, Jesús “Chuy” García, and Susan Wild.
La carta llega cuando el representante demócrata Bennie Thompson, expresidente de la comisión del 6 de enero, fue contactado por funcionarios brasileños para hablar sobre los disturbios que se desarrollaron en Brasilia el domingo pasado.
Según una fuente familiarizada, las discusiones aún no han tenido lugar, aunque Thompson le dijo a CNN que si el trabajo y el informe de la comisión del 6 de enero “sirven como modelo para investigaciones similares, ayudaré de cualquier manera posible”.
Más de 1.000 personas han sido arrestadas tras el ataque, y la carta de los demócratas de la Cámara de Representantes argumentó que el ataque en Brasilia “se construyó tras meses de fabricaciones preelectorales y postelectorales por parte de Bolsonaro y sus aliados que afirmaban que las elecciones presidenciales del 30 de octubre habían sido robadas”.
“Su difusión de desinformación, su fracaso en llamar a sus seguidores a aceptar los resultados de las elecciones y sus llamados activos a movilizarse contra las instituciones democráticas incitaron a miles de manifestantes a atacar edificios gubernamentales y a participar en los actos violentos del 8 de enero contra los pilares de la democracia de Brasil”, escribieron.
Bolsonaro, quien partió de Brasil poco antes de la toma de posesión del presidente Luiz Inácio Lula da Silva el 1 de enero, ha estado residiendo en Florida. Una fuente familiarizada con su reciente decisión dijo que está considerando regresar a Brasil en las próximas semanas para hablar sobre las acusaciones en su contra.
Aún así, se cree que Bolsonaro pudo haber ingresado a EE.UU. con una visa A-1, que se otorga a los jefes de estado y solo es válida mientras están en ese puesto.
“Como ya no es el presidente de Brasil ni se desempeña actualmente como funcionario brasileño, le solicitamos que vuelva a evaluar su estatus en el país para determinar si existe una base legal para su estadía y revocar cualquier visa diplomática que pueda tener”, escribieron los demócratas de la Cámara a Biden.
Esta semana, el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, no quiso comentar sobre el estado de la visa de Bolsonaro, citando leyes de privacidad, pero confirmó que si un A-1 “ya no se dedica a asuntos oficiales en nombre de su gobierno, le corresponde a ese titular de la visa partir de Estados Unidos o para solicitar un cambio a otro estatus migratorio dentro de los 30 días”.
“Si una persona no tiene base para estar en Estados Unidos, está sujeta a ser expulsada por el Departamento de Seguridad Nacional”, dijo Price en una sesión informativa del Departamento de Estado este lunes.
Este miércoles, el secretario de Estado, Antony Blinken, dijo que Estados Unidos “no había recibido ninguna solicitud específica de las autoridades brasileñas” con respecto a la insurrección de Brasilia.
“Por supuesto, si lo hacemos y cuando lo hagamos, trabajaremos rápidamente para responder, como siempre lo hacemos”, dijo.
CNN se ha comunicado con la Casa Blanca y el Departamento de Justicia para solicitar comentarios sobre la carta.
Kylie Atwood, Annie Grayer y Michael Conte de CNN contribuyeron a este reporte.