(CNN Español) – El Gobierno del cuestionado presidente Nicolás Maduro rechazó la ampliación por un año del decreto que declara Venezuela “como una amenaza inusual y extraordinaria” para la seguridad nacional y la política exterior de Estados Unidos.
El documento fue originalmente firmado en marzo de 2015 por el entonces presidente Barack Obama.
El Gobierno de Biden prorrogó la vigencia del decreto porque considera que la situación de Venezuela “no ha mejorado”.
En 2015 la administración de Obama aseguraba que el régimen de Maduro erosionaba las garantías de los derechos humanos, perseguía a sus adversarios políticos, hostigaba a la prensa independiente, cometía violaciones y abusos contra los derechos humanos en la represión de las protestas antigubernamentales, incluyendo la detención arbitraria de los manifestantes, y denunciaba “la exacerbada presencia” de una “importante corrupción gubernamental”.
El canciller Yván Gil calificó la renovación del decreto “como una política de agresión” en un comunicado publicado el jueves en su cuenta de Twitter.
“El Gobierno Bolivariano, además, condena la afirmación infundada de que Venezuela representa algún tipo de amenaza contra la nación estadounidense, aún más cuando es evidente que ha sido Venezuela el país que ha tenido que enfrentar una multiplicidad de amenazas, chantajes, agresiones y ataques”, detalla el documento.
El Gobierno venezolano agrega que esta decisión es “autoritaria” y que irrespeta su soberanía.