(CNN) – Rebeldes separatistas en la región de Papúa en Indonesia dicen que han matado al menos a 13 soldados militares indonesios después de que el ejército envió tropas en busca del piloto capturado de Nueva Zelandia, Phillip Mehrtens, quien fue tomado como rehén en febrero.
El Ejército de Liberación Nacional de Papúa Occidental (TPNPB) dijo que sus soldados atacaron dos puestos militares indonesios en los distritos de Yal y Mugi en Nduga Regency durante el fin de semana, según un comunicado.
El documento dice que los rebeldes mataron a tiros a 13 militares y policías indonesios en el distrito de Mugi. El ejército indonesio había evacuado un cuerpo, pero los rebeldes todavía estaban en posesión de 12 cuerpos, agregó el comunicado, sin proporcionar pruebas.
En una conferencia de prensa televisada este domingo, el ejército de Indonesia dijo que uno de sus soldados había muerto mientras peinaba el área cerca de donde se cree que se encuentra detenido Mehrtens.
Algunos soldados estaban desaparecidos, confirmaron los militares, pero el clima había dificultado determinar su paradero.
“Conocemos la ubicación del piloto, la operación se ha intensificado, pero las condiciones meteorológicas en Papua son impredecibles”, dijo el portavoz militar Julius Widjojono.
Por separado, los rebeldes dijeron que nueve soldados indonesios fueron ejecutados este domingo después de ser capturados en el distrito de Yal.
Los rebeldes dijeron que el ataque al puesto militar de Yal fue una “venganza” por una operación militar indonesia en la zona a finales de marzo, cuando las tropas mataron a una mujer embarazada y a dos combatientes rebeldes.
Un portavoz militar en Papua, Herman Taryaman, negó que los soldados hubieran llevado a cabo el ataque de marzo y dijo que las fuerzas de seguridad estaban protegiendo a los civiles que fueron ahuyentados por los rebeldes, informó Reuters.
El grupo rebelde dijo que había propuesto negociaciones de paz con los gobiernos de Nueva Zelandia e Indonesia, pero durante dos meses sus cartas fueron ignoradas.
Dijeron que Nueva Zelandia y la ONU tenían la “obligación de instar al gobierno de Indonesia a detener las operaciones militares” y dijeron que las conversaciones de paz podrían llevarse a cabo bajo un “tercero neutral, a saber, el organismo organizativo de la ONU”.
Mehrtens fue capturado en febrero después de aterrizar un vuelo chárter comercial de Susi Air en el remoto aeropuerto de Paro en la regencia de Nduga.
El ejército indonesio mantiene una fuerte y controvertida presencia en Papúa, que quedó bajo el control de Yakarta luego de una votación ampliamente disputada en 1969 supervisada por las Naciones Unidas. Los disturbios en la región empobrecida pero rica en recursos se han intensificado en los últimos años a medida que los combatientes separatistas exigen la independencia.
El TPNPB, designado por el gobierno indonesio como grupo terrorista, dijo originalmente que Mehrtens no sería liberado hasta que Yakarta reconociera la independencia de Papúa y retirara sus tropas de la región.
Sin embargo, luego abandonaron esa demanda como condición para la liberación del piloto y ahora quieren hablar con los gobiernos de Nueva Zelandia e Indonesia para asegurar su liberación, según el portavoz de TPNPB, Sebby Sambom.