(CNN) – Diplomáticos de Occidente criticaron ferozmente al ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov, por el ataque no provocado de su país a Ucrania durante una sesión presencial que organizó este lunes el máximo diplomático de Moscú en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
Lavrov estaba a cargo de la reunión, que llevó el nombre de “Mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales”, porque Rusia ostenta actualmente la presidencia rotatoria del Consejo de Seguridad. La última vez que Rusia presidió el Consejo de Seguridad fue en febrero de 2022, cuando lanzó su invasión de Ucrania.
Los embajadores de Estados Unidos, el Reino Unido y Suiza ante la ONU utilizaron sus discursos en el encuentro para condenar la invasión rusa. Las tres mujeres, la estadounidense Linda Thomas-Greenfield, la británica Barbara Woodward y la suiza Pascale Baeriswyl, expresaron críticas fuertes y directas a Moscú y Lavrov, en ocasiones mirando directamente al máximo diplomático ruso.
“Nuestro hipócrita convocante de hoy, Rusia, invadió a su vecino, Ucrania, y golpeó el corazón de la Carta de la ONU. Esta guerra ilegal, no provocada e innecesaria va directamente en contra de nuestros principios más compartidos: que una guerra de agresión y conquista territorial nunca, nunca es aceptable”, afirmó Thomas-Greenfield.
“Mientras estamos aquí sentados, esa agresión continúa. Mientras estamos aquí sentados, las fuerzas rusas siguen matando e hiriendo a civiles. Mientras estamos aquí sentados, las fuerzas rusas están destruyendo las infraestructuras críticas de Ucrania. Mientras estamos aquí sentados, nos preparamos para el próximo Bucha, el próximo Mariúpol, el próximo Jersón, el próximo crimen de guerra, la próxima atrocidad”, añadió.
En la apertura de la sesión, el secretario general de la ONU, António Guterres, también condenó las acciones de Rusia.
“La invasión de Ucrania por parte de Rusia, en violación de la Carta de las Naciones Unidas y del derecho internacional, está causando un sufrimiento y una devastación inmensos al país y a su pueblo y se suma a la disrupción económica mundial provocada por la pandemia de covid-19”, dijo, sentado junto a Lavrov.
Los diplomáticos rusos han estado prácticamente aislados de varias conferencias internacionales desde que Moscú lanzó su invasión a gran escala de Ucrania el año pasado. Sin embargo, el liderazgo del Consejo de Seguridad, el órgano más poderoso de la ONU, rota alfabéticamente entre sus 15 naciones miembros. Cinco países, China, Francia, Rusia, el Reino Unido y Estados Unidos, tienen puestos permanentes en el Consejo. Los 10 miembros restantes son elegidos por periodos de dos años por la Asamblea General de la ONU.
Rusia asumió la presidencia el 1 de abril, un hecho que varios diplomáticos calificaron de “broma del día de los inocentes”.
A la reunión de este lunes asistió Elizabeth Whelan, cuyo hermano Paul Whelan lleva más de cuatro años detenido en Rusia. Estados Unidos considera que Whelan está detenido injustamente. El gobierno estadounidense no pudo conseguir la liberación de Whelan el año pasado, cuando trajo a casa a otros dos estadounidenses que, según Washington, habían sido detenidos injustamente en Rusia: Trevor Reed en abril y Brittney Griner en diciembre.
Los países de la Unión Europea emitieron una declaración conjunta antes de la reunión, condenando las acciones de Rusia en Ucrania y criticando la presencia de Lavrov en la reunión.
“Rusia intenta presentarse como defensora de la Carta de la ONU y del multilateralismo. Nada más lejos de la realidad. Es cínico”, dijo Olaf Skoog, representante de la Unión Europea ante la ONU. “Todos sabemos que mientras Rusia destruye, nosotros construimos. Mientras ellos violan, nosotros protegemos”.
En su discurso de apertura, Lavrov lanzó una diatriba de acusaciones infundadas contra Ucrania y sus aliados occidentales, culpándolos del conflicto.
“Como ocurrió durante la Guerra Fría, hemos llegado a un umbral peligroso, posiblemente aún más peligroso”, dijo Lavrov, acusando a “Estados Unidos y sus aliados” de “abandonar la diplomacia y exigir la clarificación de las relaciones en el campo de batalla”.
Lavrov describió repetidamente al gobierno de Ucrania como “los putchistas” y “el régimen nazi de Kyiv”, una afirmación infundada que Rusia ha hecho en repetidas ocasiones para justificar su invasión ilegal del país. Lavrov también criticó a los países occidentales por no reconocer la península ucraniana de Crimea como territorio ruso, a pesar de “haberse celebrado allí un referéndum”.
Rusia se anexó Crimea por la fuerza en 2014 tras celebrar allí un falso referéndum. Ucrania y sus aliados occidentales consideran la zona territorio ucraniano ocupado. La ONU rechazó abrumadoramente el referéndum como ilegítimo y la anexión como ilegal.
–Richard Roth y Jennifer Deaton, de CNN, contribuyeron con este reportaje.