Desde la izquierda, Zachary Kwak, Nicholas Karol-Chik y Joseph Koenig.

(CNN) – Uno de los tres adolescentes acusados de matar a una mujer de Colorado de 20 años después de arrojar una gran roca a través del parabrisas de su auto tomó una foto “como recuerdo” del delito, según declaraciones juradas de arresto publicadas este jueves.

Alexa Bartell murió el 19 de abril después de que su vehículo y varios otros fueran golpeados por rocas, dijo Jacki Kelley, portavoz de la Oficina del Sheriff del Condado de Jefferson. Las autoridades creen que al menos siete vehículos fueron golpeados por grandes rocas de jardinería.

Los sospechosos de 18 años, Joseph Koenig, Nicholas Karol-Chik y Zachary Kwak, fueron arrestados este martes por cargos de homicidio premeditado e indiferencia extrema, según la oficina del sheriff. Están detenidos sin derecho a fianza.

CNN se comunicó con la oficina del defensor público para ver si los tres sospechosos tienen abogados asignados.

Después de tomar la foto del auto de Bartell, Koenig y Karol-Chik hablaron sobre ser “hermanos de sangre” y que “nunca más podrían volver a hablar de este incidente”, según las declaraciones juradas, que se publicaron este jueves, el mismo día que los adolescentes hicieron su primera aparición en la corte.

Los sospechosos comparecieron a través de Zoom ante el juez del primer distrito judicial Mark M. Randall en el tribunal del condado Jefferson. No se declararon culpables y estarán en la corte el 3 de mayo, según el expediente judicial.

Alexa Bartell.

Karol-Chik supuestamente les dijo a los investigadores que sintió “una pizca de culpa” después de ver el auto de la víctima.

Karol-Chik también le dijo a la policía que, después de golpear el auto de Bartell, Kwak, quien supuestamente arrojó la piedra que mató a la mujer, dijo: “Tenemos que regresar y ver eso”, según las declaraciones juradas.

Después de dar la vuelta, Karol-Chik les dijo a los investigadores que Koenig redujo la velocidad para que Kwak pudiera tomar una foto del automóvil. Cuando la policía preguntó por qué, Kwak respondió que pensaba que “Joseph o Mitch lo querrían como recuerdo”, según la declaración jurada.

Los documentos judiciales dicen que Karol-Chik dijo a los investigadores que los sospechosos se sintieron “emocionados” cuando las rocas golpearon los autos.

El día después de la muerte de Bartell, Koenig y Kwak se reunieron y “trataron de aclarar sus historias sobre (lo) que sucedió, negando específicamente su participación”, dicen las declaraciones juradas.

La muerte de Bartell

La noche en que murió, Bartell estaba hablando por teléfono con un amigo cuando la conversación terminó abruptamente, según las declaraciones juradas del arresto.

El amigo de Bartell usó la aplicación Find My iPhone para ubicar a Bartell y encontró su teléfono en un campo al sur de la carretera estatal 128 en Golden, Colorado, según las declaraciones juradas.

El amigo encontró a Bartell inmóvil y con una herida importante en la cabeza en el asiento del conductor de un Chevrolet Spark, según los documentos.

El amigo llamó a la madre de Bartell antes de marcar el 911. La policía encontró “sangre por todas partes” en el interior de la puerta del lado del conductor, así como a la víctima, y “un charco de sangre en su regazo”, según las declaraciones juradas. Fue declarada muerta en la escena.

Los documentos judiciales dicen que los datos de la torre de telefonía celular y un amigo de uno de los sospechosos ayudaron a identificar a los adolescentes. El amigo les dijo a los investigadores que Koenig participó en un “comportamiento destructivo” y que le gustaba “causar ‘caos’”, dicen las declaraciones juradas.

Los tres sospechosos se juntaron la noche del 19 de abril para “pasar el rato” y comenzaron a “recoger rocas del borde de un estacionamiento” y las metieron en la cabina de un camión, según las declaraciones juradas.

Karol-Chik les dijo a los investigadores que él y Kwak “recogieron piedras y que los tres arrojaron piedras a los autos en movimiento”, dicen las declaraciones juradas.

Karol-Chik supuestamente dijo que él y Koenig “han estado involucrados en arrojar objetos desde al menos febrero en diez días separados”.

– Sarah Dewberry y Rachel Webb de CNN contribuyeron a este informe.