(CNN) – Rusia vio cómo los efectos de su guerra contra Ucrania repercutían dramáticamente en su propio territorio este miércoles, después de que un bombardeo “masivo” hiriera a cuatro personas en Belgorod y de que, según informaciones preliminares, un avión no tripulado se estrellara y causara un incendio en una refinería de petróleo situada más al sur.
Ocho edificios de apartamentos, cuatro viviendas, una escuela y dos edificios administrativos resultaron dañados durante el bombardeo en Shebekino, un pueblo de la región fronteriza de Belgorod, dijo su gobernador, mientras el oblast se convierte cada vez más en un foco de violencia desviada.
Anteriormente, el martes por la noche, Gladkov dijo que una persona había muerto y dos habían resultado heridas en un ataque contra un centro de alojamiento temporal.
Y un avión no tripulado se estrelló en la refinería de petróleo de Ilsky, en la región de Krasnodar, al este del territorio anexionado de Crimea, generando un incendio en la madrugada de este miércoles, según informaron las autoridades locales. Las llamas fueron sofocadas poco después.
Los incidentes se producen un día después de un ataque con drones contra Moscú, del que Rusia ha culpado a Ucrania. Los ocho aviones no tripulados lanzados contra la capital rusa fueron destruidos, según informó el Ministerio de Defensa ruso en un comunicado.
Kyiv aún no ha hecho comentarios sobre el ataque con aviones no tripulados ni sobre los incidentes de este miércoles en Belgorod y Krasnodar. Por lo general, el Gobierno ucraniano no confirma ni desmiente ataques en territorio ruso.
En otro lugar, este miércoles se lanzó un ataque con drones en la región rusa de Bryansk, informó la agencia rusa estatal de noticias RIA Novosti. Unos 10 drones intentaron atacar el distrito de Klimovsky y fueron derribados o interceptados, informó RIA citando a los servicios de emergencia.
La cadena de sucesos —tras la incursión, la semana pasada, en Belgorod de rusos contrarios a Putin que habían estado luchando junto a los militares ucranianos— marca un nuevo giro en un conflicto que cada vez afecta más a la población rusa, 15 meses después de que Moscú lanzara su invasión no provocada de Ucrania.
Además, cinco personas murieron y 19 resultaron heridas en un bombardeo ucraniano contra el pueblo de Karpaty, en el territorio ucraniano de Luhansk, ocupado por Rusia, dijo en Telegram el jefe en funciones de la autoproclamada República Popular de Luhansk.
Las autoridades rusas reaccionaron el miércoles con un previsible despliegue de ira. Refiriéndose a la situación en Belgorod, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo a CNN en una llamada regular con periodistas, el miércoles: “Estamos realmente preocupados por esta situación, el bombardeo de objetos civiles continúa allí”.
“También en este caso, por cierto, no hemos oído ni una sola palabra de condena de nadie del Occidente colectivo, hasta ahora”, dijo Peskov. “La situación es bastante alarmante. Se están tomando medidas”.
“Me desperté por las explosiones y el ruido de cristales rompiéndose”, dijo una mujer en Belgorod al diario ruso Izvestia. “Mi marido y yo saltamos inmediatamente y corrimos al baño […] y ahora estamos deambulando. El centro de la ciudad está todo desparramado”.
Este martes, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, culpó a Ucrania del ataque con drones en la región de Moscú, calificándolo de “clara señal de actividad terrorista”. Putin afirmó que “Kyiv eligió el camino de la intimidación de los ciudadanos rusos y los ataques a edificios residenciales”.
Putin dijo este martes que las defensas antiaéreas de la ciudad funcionaban con normalidad, pero que aún quedaba “trabajo por hacer para mejorarlas”. Cuando se le pidió que aclarara las declaraciones del presidente ruso, Peskov dijo: “El sistema funcionó con eficacia, pero hay margen de mejora. Se seguirá trabajando para mejorar el sistema de defensa aérea”.
La Legión Libertad para Rusia, grupo que reivindicó el ataque de la semana pasada en Belgorod, publicó en su canal de Telegram una campaña “adicional” de reclutamiento de pilotos de drones tras el ataque con drones contra Moscú este martes. La legión, formada por ciudadanos rusos que luchan en Ucrania contra su patria, bromeó: “Los graduados del curso tendrán la oportunidad de practicar sus habilidades”.
Pero las primeras señales de Occidente indicaban que tenía poca paciencia con los esfuerzos del Kremlin por enmarcar la narrativa.
“El argumento de que ‘Rusia es la víctima’ está tan trillado y es tan ridículo que incluso el pueblo ruso debe verlo como lo que es: una réplica sobreutilizada y desesperada del Kremlin para intentar explicar su letanía de errores estratégicos que han diezmado la otrora orgullosa reputación mundial de Rusia”, declaró el asesor militar británico Ian Stubbs durante un discurso pronunciado el miércoles en Viena.
Los incidentes se producen mientras Ucrania prepara una muy esperada contraofensiva contra las fuerzas rusas, y siguen a días de bombardeos con misiles sobre Kyiv y otras ciudades ucranianas por parte de Moscú.
Este lunes, Rusia pareció cambiar de táctica al atacar Kyiv con cohetes y misiles durante el día, horas después de otra oleada de ataques durante la noche.
– Olga Voitovych y Sarah Dean, de CNN, han contribuido a la información.