(CNN) – Las investigaciones sobre el sospechoso de los asesinatos en serie de Gilgo Beach, Rex Heuermann, ahora se extienden por todo el país mientras los investigadores examinan sus conexiones con Las Vegas y Carolina del Sur, donde el sospechoso tiene propiedades.
La Policía de Las Vegas está revisando su lista de casos sin resolver en busca de cualquier señal de que Heuermann pueda haber estado involucrado, confirmó un portavoz del Departamento de Policía Metropolitana de Las Vegas en un comunicado.
Aunque Heuermann vivía en Long Island, Nueva York, él y su esposa compraron dos condominios de tiempo compartido en Las Vegas entre 2003 y 2005, según los registros de propiedad obtenidos por CNN. Desde entonces, la pareja vendió la primera propiedad, según muestran los registros, y no está claro si todavía son dueños de la segunda.
El arquitecto de 59 años y padre de dos hijos fue arrestado la semana pasada en la ciudad de Nueva York y acusado de los asesinatos de tres de las “Cuatro de Gilgo”, un grupo de cuatro mujeres cuyos restos fueron encontrados a lo largo de un tramo corto de Long Island’s Gilgo Beach en 2010.
Heuermann se declaró inocente de los asesinatos de Melissa Barthelemy, Megan Waterman y Amber Costello. Sigue siendo el principal sospechoso del asesinato de la cuarta víctima, Maureen Brainard-Barnes, pero aún no ha sido acusado en el caso.
Mientras las autoridades registran la casa, la oficina y la unidad de almacenamiento de Heuermann, están operando bajo la suposición de que el sospechoso pudo haber continuado con su supuesta ola de asesinatos después de que se descubrieron los cuerpos de las Cuatro de Gilgo, dijo a CNN una fuente familiarizada con el caso.
La oficina del sheriff en el condado de Chester, en el norte de Carolina del Sur, donde los registros fiscales muestran que Heuermann posee cuatro grandes parcelas de tierra, dice que ha estado recopilando pruebas para el grupo de trabajo de investigación de Gilgo Beach desde antes del arresto del sospechoso.
Se vio a las autoridades remolcando un camión perteneciente al hermano de Heuermann a fines de la semana pasada, según el vecino Steve Caston, quien vive en un camino de grava adyacente a una terreno propiedad de Heuermann. Caston describió a los agentes alineados con “rifles de asalto” y “las nueve yardas completas”, mientras el vehículo estaba siendo incautado, pero dijo que la escena estaba “bastante tranquila” sin “aullidos, sin gritos”.
Una camioneta Chevy Avalanche incautada de la propiedad está siendo revisada en busca de evidencia, dijeron las fuentes a CNN.
Los investigadores del FBI también fueron vistos hablando con vecinos en el vecindario rural de Carolina del Sur este martes. Mientras un equipo de CNN hablaba con Caston en su casa, dos hombres vestidos de civil se le acercaron y se identificaron como agentes del FBI y le pidieron al vecino que los contactara ese mismo día.
El grupo de trabajo de casos sin resolver de varias agencias está “investigando activamente” si Heuermann pudo haber tenido más supuestas víctimas mientras estudian detenidamente una avalancha de pistas y nuevas pruebas, dijo este lunes el subcomisionado de la Policía del condado de Suffolk, Anthony Carter.
La familia de Heuermann quedó atónita cuando las autoridades les informaron de las terribles acusaciones en su contra, dijo este lunes el comisionado de Policía Rodney Harrison. “Estaban disgustados. Estaban avergonzados”, dijo.
“Entonces, si me preguntas, no creo que supieran sobre esta doble vida que estaba viviendo Heuermann”, dijo el investigador.
Una investigación largamente inactiva recibe una avalancha de pruebas
A medida que los investigadores escudriñan la casa de Heuermann, se concentran principalmente en recopilar pruebas forenses, pero también buscan cosas que podrían ser recuerdos guardados de los asesinatos, incluidos artículos que están escondidos o guardados donde los miembros de la familia no los encontrarían, según una fuente con conocimiento del caso.
Cualquier artículo encontrado deberá mostrarse a los familiares y amigos de las víctimas, un proceso que podría llevar algún tiempo, dijo la fuente.
La búsqueda de la casa hasta ahora ha revelado un alijo de entre 200 y 300 armas de fuego guardadas en una bóveda detrás de una puerta de metal cerrada con llave, muchas más de las 92 armas de fuego que las autoridades sabían que Heuermann había registrado en el estado, dijo la fuente.
Los fiscales han detallado una gran cantidad de pruebas utilizadas para vincular a Heuermann con al menos tres de los asesinatos de Gilgo Four, incluidas facturas de tarjetas de crédito, datos de teléfonos móviles y pruebas de ADN.
Los cuerpos de las cuatro mujeres se encontraban entre una serie de 11 conjuntos de restos humanos encontrados dispersos a lo largo de la costa sur de Long Island entre 2010 y 2011, lo que provocó lo que la Policía ha llamado “una de las investigaciones de homicidio más importantes” en la historia de la isla.
Así fue la investigación por los crímenes de Gilgo Beach
Surgieron sorprendentes similitudes entre los casos de las cuatro mujeres. Cada uno de los restos había sido envuelto en arpillera camuflada y escondido a lo largo del mismo tramo de un 400 metros de Ocean Parkway, dijeron las autoridades. Las mujeres, que desaparecieron entre 2007 y 2010, trabajaban como acompañantes y anunciaban sus servicios en Craigslist, según la Policía.
Pero los investigadores tardaron más de una década en comparar el ADN de un cabello masculino encontrado en el envoltorio de arpillera con una muestra de ADN de Heuermann recolectada subrepticiamente de una corteza de pizza que el sospechoso tiró después de que se reabrieron los casos, según el fiscal de distrito Ray Tierney, del condado de Suffolk.
Las autoridades han dicho que el asesino usó teléfonos desechables para comunicarse con las víctimas y los investigadores pudieron usar registros de teléfonos celulares y tarjetas de crédito para identificar varios casos en los que Heuermann estaba en el lugar general cuando se usaron los teléfonos para llamar a las víctimas, según la solicitud de fianza.
Aunque los fiscales han dicho que Heuermann es el principal sospechoso en el cuarto asesinato de Brainard-Barnes, el comisionado de Policía Harrison dijo el lunes que presentar cargos en ese caso podría “tomar un poco de tiempo”. Un folículo piloso que los investigadores tienen como evidencia debe someterse a una prueba de ADN, pero ha sido dañado, dijo.
Mientras tanto, dijo: “es muy bueno que hayamos sacado a este animal de las calles”.
– Scott Glover, Jeff Winter, Dianne Gallagher, Wes Bruer, Lauren Mascarenhas, John Miller y Samantha Beech de CNN contribuyeron a este informe.