(CNN) – Ingenieros chinos iniciaron este jueves la construcción de un nuevo pozo superprofundo que se adentrará en la corteza terrestre a medida que el país intensifica su búsqueda de recursos naturales ocultos a miles de metros bajo tierra.
El agujero eventualmente alcanzará los 10.520 metros en el suelo en la cuenca de Sichuan, en el suroeste de China, según la agencia de noticias estatal Xinhua. La región es un área importante para la producción de gas y los ingenieros esperaban encontrar allí una reserva de gas natural, según el informe.
El anuncio se produjo pocas semanas después de que China comenzara a perforar otro pozo súper profundo que está programado para extenderse aún más en la Tierra con una profundidad planificada de 11.100 metros. Ese proyecto está ubicado en la cuenca del Tarim en la región autónoma de Xinjiang, en el noroeste de China.
Si se completan, estarían entre dos de los pozos más profundos hechos por humanos en el mundo. Sin embargo, no serían los más profundos.
Actualmente, ese récord lo tiene el ya desaparecido pozo superprofundo de Kola en el noroeste de Rusia, un proyecto de perforación científica de la era soviética que tardó 20 años en completarse y llegó a 12.262 metros.
Estos agujeros ultraprofundos se extienden más que el Monte Everest midiendo de arriba a abajo, que tiene unos 8.800 metros de altura.
Los seres humanos han llegado a la luna, pero cuando se trata de explorar la tierra profunda debajo de nuestros pies, solo hemos arañado la superficie de nuestro planeta.
La perforación profunda permite a los científicos aprender más acerca de cómo se formó la Tierra con la corteza actuando como una línea de tiempo geológica de la formación del mundo.
Pero también hay fuertes incentivos comerciales: aprovechar las reservas de energía potencialmente lucrativas enterradas en las profundidades.
Las dos empresas involucradas en los pozos chinos son importantes conglomerados petroleros de propiedad estatal.
El proyecto más reciente en la cuenca de Sichuan es operado por PetroChina Southwest Oil and Gasfield Co, una subsidiaria de China National Petroleum Corporation, una de las mayores empresas estatales de energía de China, según Xinhua.
Al describirlo como un movimiento de “gran importancia”, el medio de comunicación estatal dijo que el esfuerzo tiene como objetivo explorar recursos profundamente enterrados mientras “promueve el progreso de la tecnología central y la capacidad del equipo de la ingeniería de petróleo y gas de China”.
“La perforación revelará aún más los secretos de la evolución bajo la formación Sinian”, dijo, refiriéndose a la forma en que están dispuestas las rocas en la cuenca de Sichuan.
Chen Lili, ingeniero jefe adjunto de PetroChina Southwest Oil, dijo al medio de comunicación estatal que esperaban superar una serie de “desafíos de clase mundial” durante el proceso de perforación.
Al revelar el proyecto de Xinjiang anteriormente, Xinhua lo denominó un “telescopio” en el extremo más profundo de la tierra, con su diseño de 2.000 toneladas encargado de penetrar en más de 10 estratos continentales.
Dijo que la configuración de perforación puede soportar 200 grados centígrados y fuerzas 1.700 veces mayores que la presión atmosférica.
En mayo, Sinopec Corp dijo que había encontrado flujos considerables de petróleo y gas en un pozo de exploración en la cuenca Tarim a una profundidad de 8.591 metros bajo la superficie, informó Reuters.
China, la segunda economía más grande del mundo y el mayor emisor de carbono del mundo, tiene enormes necesidades de energía. El líder chino, Xi Jinping, ha declarado la seguridad energética futura como una prioridad de seguridad nacional.
China se ha convertido en un líder mundial en energía renovable: está en camino de duplicar su capacidad de energía eólica y solar y alcanzar sus objetivos de energía limpia para 2030 cinco años antes, según un informe reciente.
Pero también es el mayor productor mundial de contaminación que calienta el planeta y está aumentando la producción de carbón.
Estados Unidos es el segundo mayor emisor de carbono del mundo.
El enviado climático de Estados Unidos, John Kerry, se reunió con funcionarios chinos en Beijing esta semana y pidió una acción más rápida para enfrentar la crisis climática.
Xi no se reunió con Kerry esta semana. Pero mientras Kerry estaba de visita, Xi dijo en una conferencia nacional sobre protección ambiental que el compromiso de China con sus dos objetivos de carbono (alcanzar un pico de carbono para 2030 y la neutralidad de carbono para 2060) es “inquebrantable”, según la agencia estatal de noticias Xinhua. Sin embargo, aclaró que “el camino, el método, el ritmo y la intensidad para lograr este objetivo deben y deben ser determinados por nosotros mismos, y nunca serán influenciados por otros”.