(CNN Español) – El presidente de Argentina, Alberto Fernández, anunció que su país se incorporará al bloque BRICS, la alianza económica, política y social conformada hasta ahora por Brasil, Rusia, la India, China y Sudáfrica.
Fernández aseveró que esta integración supone para el país una posibilidad de “abrir nuevos mercados, de consolidar los existentes, de favorecer los flujos de inversión creando empleo, de aumentar las exportaciones y de desarrollar la aplicación de nuevas y mejores tecnologías”.
El ingreso de Argentina al bloque está previsto para el 1° de enero de 2024 junto a Irán, Arabia Saudita, Etiopía, Egipto y los Emiratos Árabes Unidos.
Los cinco países que hasta ahora componen el bloque representan más del 42% de la población global, el 30% del territorio mundial, el 23% del PIB y el 18% del comercio mundial, según información oficial de Cancillería de Argentina. Según la misma fuente, los países que intervienen contribuyen en su conjunto al 16% de las exportaciones y al 15% de las importaciones mundiales de bienes y servicios.
Sumado a estos datos, el analista internacional y profesor universitario Eduardo Martínez dijo a CNN que la incorporación de Argentina al BRICS “es importante porque con los países que se agregan, el bloque representará el 31,5% del PBI mundial, cuando el G7 o Grupo de los Siete - Estados Unidos, Japón, Alemania, Reino Unido, Francia, Italia y Canadá- tiene dos puntos menos”.
En el mismo sentido, el abogado y analista internacional Juan Venturino consideró que “la pertenencia de Argentina a una alianza mejora significativamente sus condiciones de negociación frente al mundo, además de reducir los aranceles de los participantes interbloque”. Martínez agregó: “Las ventajas son aduaneras y arancelarias. Hay un mercado impresionante que se abre con la integración. Ya estamos comerciando con China, pero una vez que Argentina entre al bloque, el arancel de estos intercambios será significativamente mejor”.
Los países que integran el BRICS son socios del Nuevo Banco de Desarrollo (NBD), una entidad creada en 2015 y presidida actualmente por Dilma Rousseff. En su sitio web oficial, se define como un espacio multilateral “que tiene el propósito de movilizar recursos para proyectos de infraestructura y desarrollo sostenible en mercados emergentes y países en desarrollo”.
De esta manera, el ingreso de Argentina al bloque le abriría la posibilidad de acceder a créditos proporcionados por el Nuevo Banco de Desarrollo, tal como expresa el analista Martínez: “Este fondo de contingencia para países en desarrollo quiere suplantar al FMI para dar préstamos más livianos y, si Argentina está ahí, ayudaría al país con la deuda que tiene con el Fondo”.
Fernández destacó que “cuatro provincias argentinas tienen como principal socio comercial y destino de sus exportaciones a Brasil, y para otras ocho provincias su destino principal es China”. Por otro lado, la India es un importante comprador del maíz argentino, junto con Brasil, el principal importador de trigo y cebada de manufactura nacional, según los datos brindados por el Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto.
La cancillería argentina informó también que los actuales cinco miembros del grupo BRICS representan para la Argentina hasta el 30% del destino de las exportaciones nacionales. Al respecto, el presidente Fernández remarcó la importancia del fortalecimiento de estas nuevas oportunidades comerciales: “Los BRICS juegan un papel determinante en la exigencia de diseñar una arquitectura financiera mundial, que tenga en cuenta las necesidades de crecimiento, comercio, inversión y bienestar social”.
BRICS, Argentina y un contexto de incertidumbre
Marcelo Elizondo, analista y consultor internacional, dijo en CNN Radio Argentina que la integración al bloque ocurre en un contexto de incertidumbre: “Una cosa era entrar hace dos años y otra ahora. Rusia es uno de los países fundadores, está China que no está vista con tanta confiabilidad y un conjunto de otros países que tienen observaciones”.
En el mismo sentido, el economista argentino Manuel Adorni le dijo a CNN que “esta integración no se alinea con los acontecimientos actuales si se tienen en cuenta a países como China, que es la gran potencia comunista, después de Rusia, que hoy está invadiendo Ucrania con un ímpetu que el mundo está condenando”.
En lo que respecta al sector empresarial, las opiniones son variadas. Natalio Mario Grinman, presidente de la Cámara Argentina de Comercio (CAC), fue contundente en el discurso que brindó en el Council of the Americas: “Debemos afianzar nuestra pertenencia al mundo occidental, consecuentes con nuestra historia de defensa de la libertad y de la democracia, que para nosotros tiene que ser fundamental e innegociable”.
Por otro lado, el empresario y titular de Corporación América, Eduardo Eurnekián, consideró positivo el ingreso de Argentina en los BRICS y afirmó que este hecho no perjudicará la relación del país con Estados Unidos.
En relación con este punto, el analista Juan Venturino expresó: “Las ventajas o beneficios del ingreso de Argentina al bloque estarán supeditadas a la capacidad del país de desarrollar su industria, aplicando estratégicamente un plan de acción de mediano y largo plazo para colocar sus productos en el mundo y así compensar la balanza comercial”.
Los dos principales candidatos opositores al gobierno que el 22 de octubre competirán con el postulante oficialista Sergio Massa por la presidencia de Argentina se manifestaron contra la integración del país a los BRICS.
El candidato por La Libertad Avanza, Javier Milei, prometió días atrás romper relaciones con China y Brasil y fue taxativo: “No hago pactos con comunistas”. La candidata de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich, dejó en claro que bajo su gobierno “Argentina no va a estar en los BRICS”.
Por un lado, Milei ratificó que, para él, el alineamiento geopolítico de Argentina debe ser estrictamente Estados Unidos e Israel y agregó: “¿A vos que te parece si yo te dijera a quién le tenés que comprar algo o no? ¿No te parece que es avanzar sobre tu derecho de propiedad? Los políticos deberían promover el libre comercio”.
Por el otro, Bullrich fue taxativa en lo que respecta a su plan: “La Argentina va a seguir comerciando con China y Brasil. Si se cierra con Brasil, la economía se destruye; si se cierra con China, el campo se destruye. Eso no tiene nada que ver con formar parte del BRICS”.
Está todo listo para que Argentina ingrese el 1° de enero de 2024 al bloque formado por Brasil, Rusia, la India, China y Sudáfrica, pero en menos de dos meses Argentina elegirá nuevo presidente y la situación puede ser diferente en el comienzo del nuevo año. Todo dependerá del nuevo mandatario.
Por lo pronto, el gobierno y la oposición discrepan sobre si el acuerdo de incorporación de Argentina al bloque tendría que pasar por la aprobación del Congreso o no. Martínez señaló que un tratado económico no necesita ningún tipo de aprobación del Congreso, aunque la oposición actualmente quiere tratar la integración de Argentina al bloque BRICS en ambas cámaras.
El antecedente de un caso similar es que en 1991 el Congreso de Argentina ratificó por ley el tratado de incorporación del país al Mercosur.