(CNN) – Los ejércitos occidentales se están quedando sin municiones para dárselas a Ucrania, advirtieron este martes funcionarios británicos y de la OTAN, mientras instaban a las naciones del bloque a aumentar la producción para “mantener a Ucrania en la lucha contra los invasores rusos”.
La noticia de una posible escasez de municiones llega después de que el dinero para comprar armas para Ucrania no fuera incluido en un proyecto de ley de gasto provisional que el Congreso de Estados Unidos aprobó el fin de semana para evitar un cierre del Gobierno federal.
Nueva incertidumbre sobre el futuro de la ayuda estadounidense surgió este martes cuando el presidente de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, que abogaba por el apoyo a Ucrania, fue destituido de su posición de liderazgo por colegas republicanos.
Los acontecimientos son noticias preocupantes para Ucrania, ya que la guerra con la vecina Rusia está en su vigésimo mes y plantea dudas sobre si Moscú puede sentirse capaz de durar más que las promesas de compromiso occidentales.
“El fondo del barril ahora es visible”, dijo este martes el almirante Rob Bauer de los Países Bajos, presidente del Comité Militar de la OTAN y funcionario militar de mayor rango de la OTAN, sobre las reservas de municiones de Occidente durante una discusión en el Foro de Seguridad de Varsovia.
“Regalamos sistemas de armas a Ucrania, lo que está muy bien, y munición, pero no de almacenes llenos. Empezamos a regalar de almacenes medio llenos o más bajos en Europa” y ahora esos almacenes se están agotando, dijo Bauer.
James Heappey, ministro de Estado de las Fuerzas Armadas del Reino Unido, hablando en el mismo panel, dijo que aunque las reservas sean escasas, la ayuda a Kyiv debe continuar y los países occidentales deben aumentar su capacidad para fabricar más munición.
“Tenemos que mantener a Ucrania en la lucha esta noche y mañana y pasado mañana”, dijo Heappey. Eso significa “seguir dando, día tras día, y reconstruir nuestras propias reservas”, añadió.
Mientras tanto, los analistas advierten que el “arsenal de la democracia” estadounidense necesita empezar a trabajar horas extras o el esfuerzo bélico de Ucrania podría verse en problemas.
“Estados Unidos y sus aliados están enviando a Ucrania una amplia gama de municiones, pero no se producen ni se entregan con la rapidez necesaria”, escribió la semana pasada Thomas Warrick, miembro no residente del Atlantic Council.
Warrick escribió que mientras Ucrania retrasó el inicio de la ofensiva de verano para llevar más munición y equipo al frente, Rusia pudo construir defensas que han mitigado significativamente los avances ucranianos.
“Las fuerzas de Ucrania han demostrado ser flexibles y adaptables, pero necesitan tener suficientes municiones y armas”, escribió.
Pero los acontecimientos en Washington están poniendo en duda los suministros y la posición de Ucrania en el campo de batalla.
“La incapacidad de garantizar adquisiciones y entregas oportunas podría socavar operaciones esenciales de Ucrania para retomar territorio adicional o defenderse de posibles futuras ofensivas rusas”, escribió el pasado viernes el subsecretario de Defensa de Estados Unidos, Michael McCord, en una carta dirigida a los dirigentes del Congreso mientras el proyecto de ley de gastos que al final eliminó la ayuda a Ucrania se estaba votando.
“Sin financiación adicional ahora, tendríamos que retrasar o reducir la asistencia para satisfacer las necesidades urgentes de Ucrania, incluidas las de defensa aérea y municiones que son críticas y urgentes ahora que Rusia se prepara para llevar a cabo una ofensiva invernal y continúa bombardeando ciudades ucranianas”, escribió McCord.
La ayuda militar estadounidense a Ucrania ascendió a la asombrosa cifra de US$ 46.600 millones desde el inicio de la guerra hasta el 31 de julio, según el Consejo de Relaciones Exteriores. Los aliados de la OTAN han aportado miles de millones más.
Pero los líderes militares reconocen que, especialmente, la munición se está utilizando a un ritmo asombroso en los campos de batalla de Ucrania.
Las tropas ucranianas suelen disparar entre 2.000 y 3.000 proyectiles de artillería por día contra las fuerzas rusas, dijo a CNN un funcionario de defensa estadounidense en julio.
El Pentágono dijo en julio que había proporcionado a Ucrania más de 2 millones de proyectiles de artillería hasta la fecha.
“Esta es una lucha intensiva con artillería”, dijo en ese momento el secretario de Defensa, Lloyd Austin. “Hemos visto grandes cantidades de artillería empleadas en ambos lados de la valla. Y eso pone a prueba el suministro internacional de municiones, municiones de artillería”.
En ese momento, los suministros de Washington de municiones de artillería estándar de la OTAN de 155 mm eran tan bajos que se decidió suministrar a Ucrania con controvertidas municiones en racimo.