Washington (CNN) – La esposa del máximo responsable de la inteligencia militar de Ucrania fue hospitalizada por aparente envenenamiento con metales pesados, según funcionarios ucranianos y occidentales.

Marianna Budanova es la esposa de Kyrylo Budanov, cuya agencia de inteligencia militar GUR ha estado involucrada profundamente en los esfuerzos de Ucrania para expulsar a Rusia de su territorio. Y ahora funcionarios occidentales sospechan que agentes rusos podrían haberle pagado a un miembro del personal para realizar el envenenamiento.

Según Andriy Yusov, portavoz de la Inteligencia de Defensa de Ucrania, los resultados de exámenes revelan que personal de esa agencia también se enfermó, y Ucrania investiga la situación.

Los servicios de inteligencia de Estados Unidos y occidentales no han verificado de forma independiente el envenenamiento, pero creen que los reportes ucranianos son certeros,  según informaron a CNN fuentes familiarizadas con el asunto.

La gravedad del estado de Budanova no fue evidente de inmediato. Según el representante de GUR, ha estado hospitalizada durante una semana y se había sentido mal durante algún tiempo antes de ingresar al centro médico. Una fuente de los servicios de Inteligencia de Defensa dijo a CNN, bajo condición de anonimato porque la información no se ha hecho pública, que Budanova dio positivo en las pruebas de arsénico y mercurio. CNN se puso en contacto con Budanova para solicitar sus comentarios.

El Dr. Edward Boyer, jefe de la división de toxicología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Massachusetts, dijo que sin un conocimiento más detallado de los resultados de las pruebas y de la historia clínica de los pacientes –incluidos sus síntomas y la posible exposición a determinados alimentos– es imposible juzgar la probabilidad de que alguna de las víctimas fuera envenenada deliberadamente.

“Lo que va a ser realmente importante averiguar son los síntomas reales. Los distintos metales tienen distintas toxicidades asociadas”, afirmó Boyer. “Es importante obtener no sólo un historial de exposición ambiental, sino también un historial de ingesta de alimentos, junto con los síntomas reales”.

Rusia –y la Unión Soviética antes de eso– es conocida por realizar envenenamientos extraterritoriales contra sus enemigos. En Inglaterra, en 2018, enviados rusos utilizaron un agente neurotóxico para envenenar a Sergei Skripal, un exmilitar ruso y doble agente de las agencias de inteligencia británicas. En la década de 1950, el KGB utilizó talio –un metal pesado empleado en venenos para ratas e insecticidas– para envenenar a uno de sus propios agentes que desertó a Estados Unidos.

Durante las conversaciones entre Ucrania y Rusia en marzo de 2022 en Turquía, un multimillonario ruso y dos negociadores ucranianos sufrieron una leve descamación de la piel y dolor en los ojos, declaró entonces a CNN una fuente cercana al equipo negociador ucraniano. Aunque los reportes iniciales indicaban que sufrían envenenamiento, otros posteriores señalaron que se debieron a un factor ambiental, no a envenenamiento.