(CNN) – Corea del Norte adviritó que cualquier posible interferencia o ataque a sus “activos espaciales” por parte de Estados Unidos será “considerada una declaración de guerra”, según informó este sábado el medio estatal KCNA.
“La deplorable hostilidad de la Fuerza Espacial de EE.UU. hacia el satélite de reconocimiento de la RPDC nunca puede pasarse por alto, ya que no es más que un desafío a la soberanía de la RPDC, y más precisamente, una declaración de guerra contra ella”, dijo el Ministerio de Defensa del país en un comunicado reportado por KCNA.
RPDC son las siglas de República Popular Democrática de Corea, el nombre oficial de Corea del Norte (DPRK, por sus siglas en inglés).
La advertencia se produjo menos de dos semanas después de que Pyongyang dijera que había puesto su primer satélite espía en el espacio, en un movimiento que los analistas predijeron que podría permitir al país apuntar con mayor precisión a las fuerzas de sus oponentes, si es que la nave espacial funciona.
Ni Corea del Sur, ni Estados Unidos, ni Japón, países que han experimentado crecientes tensiones militares con Corea del Norte, pudieron confirmar que el “Malligyong-1” hubiera entrado en órbita.
Pocos días después del lanzamiento norcoreano, Corea del Sur puso en órbita su primer satélite espía con la ayuda de la empresa espacial SpaceX.
El reportaje de la KCNA afirmaba que la advertencia de Pyongyang se produjo tras un supuesto comentario de un oficial del Mando Espacial estadounidense que “dijo tonterías insinuando un ataque militar contra el satélite de reconocimiento de la RPDC”.
KCNA afirmó que el funcionario estadounidense anónimo supuestamente afirmó que EE.UU. “puede disminuir las capacidades de operación del espacio exterior del país enemigo” mediante el empleo de “diversos métodos reversibles e irreversibles”.
No está claro quién podría ser ese funcionario estadounidense.
CNN no ha podido encontrar ni verificar ningún comentario de este tipo realizado recientemente por un funcionario estadounidense.
Pyongyang afirma que su satélite es de reconocimiento y “no está considerado como un arma espacial por el derecho internacional por sus características técnicas destinadas a la observación”.
Sin embargo, los analistas afirman que la aeronave está pensada para espiar y aumentar las capacidades militares de Corea del Norte.
En respuesta al lanzamiento del 21 de noviembre, la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos sancionó el jueves a ocho agentes de la RPDC radicados en el extranjero “que facilitan la evasión de sanciones, incluida la generación de ingresos y la adquisición de tecnología relacionada con misiles que apoyan los programas de armas de destrucción masiva de la RPDC”.
También sancionó a lo que denominó un grupo de ciberespionaje llamado Kimsuky por “recopilar información de inteligencia para apoyar los objetivos estratégicos de la RPDC”, según un comunicado en el sitio web del Departamento del Tesoro.
El lanzamiento de noviembre fue condenado por los vecinos de Corea del Norte, Japón y Corea del Sur, y Seúl lo calificó de “clara violación” de una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que prohíbe a Corea del Norte utilizar tecnología de misiles balísticos.
Sin embargo, Pyongyang advirtió que si su satélite de reconocimiento se considera una “amenaza militar” de la que “hay que deshacerse”, entonces también debería destruir “los innumerables satélites espía de EE.UU. que sobrevuelan a diario la región de la península coreana, encargados exclusivamente de vigilar los principales puntos estratégicos de la RPDC”.
También llamó a EE.UU. “semilla de todos los males” por supuestamente convertir el espacio “en un teatro de guerra”.
La medida de Pyongyang ha llevado al Gobierno surcoreano a suspender parcialmente un acuerdo que tenía con Corea del Norte y que limitaba las actividades de reconocimiento y vigilancia del Sur a lo largo de la zona desmilitarizada que separa a ambos países.
Posteriormente, Corea del Norte prometió desplegar nuevo material militar a lo largo de la línea de demarcación militar.