(CNN) – La casa internacional de subastas Christie’s consideró que un grabado creado por Rembrandt hace más de 350 años es demasiado explícito para ser visto.
“La Cama Francesa”, dibujado por el viejo maestro neerlandés en 1646, está a la venta en la sucursal londinense de la casa de subastas, pero solo puede ser visto en línea por aquellos que hagan clic más allá de una advertencia de contenido.
El cuadro monocromo, que forma parte de una colección más amplia titulada “Old Masters I” que se subasta este jueves, está oculto tras un cartel en el que se puede hacer clic y que dice: “CONTENIDO EXPLÍCITO. Este lote contiene material explícito y temática para adultos”.
Se espera que se venda por hasta US$ 500.000. El dibujo representa a una pareja en una cama con dosel. El hombre y la mujer están semivestidos y, obviamente, se muestran bastante amorosos.
Un ensayo que acompaña a la imagen en el sitio de Christie’s la describe como “uno de los pocos grabados explícitamente eróticos de Rembrandt”. También es, dice la casa de subastas, “uno de los grabados más raros de toda su obra”.
El cuadro muestra una copa de vino medio vacía sobre una mesilla de noche y el sombrero de plumas del hombre parece haber sido arrojado sobre uno de los postes de la cama.
La mujer mira a su amante con una sonrisa, y “el desconcertante hecho de que tenga tres brazos y manos añade vivacidad a la escena”, según el ensayo.
Y añade que el grabado no es “en modo alguno grosero u obsceno”, y lo describe como “encantador y desenfadado”.
Entonces, ¿por qué la advertencia?
Christie’s declinó la petición de CNN de comentar el asunto, diciendo: “No tenemos nada más que añadir”.
El historiador de arte británico Richard Morris dijo a CNN en un correo electrónico que no había visto antes una advertencia de este tipo en un cuadro, y añadió que era “una buena pieza de marketing que avivará las pujas”.
Y añadió: “Rembrandt es uno de los artistas supremos del mundo, con un carisma (rizz) que es verdaderamente universal. Es un cuadro erótico, pero no hay en él una sensibilidad extrema, a diferencia de obras de Courbet o de Toulouse-Lautrec.
“A pesar de su antigüedad, es una obra muy moderna: el afecto por la vida real. Estoy seguro de que Rembrandt disfrutaría de su nueva notoriedad”.