(CNN) — Elon Musk dijo que la cuenta del conspiracionista de derecha Alex Jones sería restablecida en X, anteriormente conocido como Twitter, revocando una decisión de 2018 de la gestión anterior de la compañía de destituirlo luego de que infringiera repetidamente las reglas que prohíben el acoso y el odio.
El sábado por la mañana, Musk publicó una encuesta no científica en su cuenta preguntando a los usuarios de la plataforma si se debería reintegrar a Jones. El sábado por la tarde, cuando cerró la encuesta, alrededor del 70%, de casi 2 millones de encuestados, habían votado “sí”.
La mañana de este domingo, Musk respondió a la encuesta diciendo: “La gente ha hablado y así será”, y la cuenta de Jones estaba activa desde ese mismo día.
Es probable que la medida del multimillonario Musk, quien ha promovido teorías conspirativas y elevado varias voces extremistas desde que asumió el control de la compañía, afecte aún más a X, a medida que las empresas se distancian de la problemática plataforma, que ha visto aumentar el discurso de odio y las teorías conspirativas a raíz de sus decisiones.
Una gran cantidad de anunciantes importantes abandonaron la plataforma en las últimas semanas por preocupaciones sobre la seguridad de la marca y el discurso de odio, provocadas por el hecho de que el propio Musk respaldara una teoría de conspiración antisemita en noviembre. Musk se disculpó días después por su publicación en medio de una tormenta de reacciones. Pero el boicot de los anunciantes continúa, y Musk ha dicho que podría provocar la muerte de la empresa.
El empresario reconoció el sábado que reintegrar a Jones “sería malo para X financieramente”, pero argumentó que “los principios importan más que el dinero”. Musk ha tratado de presentarse como un absolutista de la libertad de expresión, aunque ha tomado medidas para restringir el discurso de los críticos.
Musk dijo el año pasado que no levantaría la prohibición a Jones debido a sus falsas afirmaciones de que el tiroteo en la escuela primaria Sandy Hook de 2012 fue un engaño. Pero en los últimos días, tras una entrevista con Tucker Carlson, otra personalidad de extrema derecha que fue despedida por Fox News a principios de este año, ha habido una presión significativa dirigida a Musk por parte de los aliados de derecha de Jones para exigir que se restablezca su cuenta.
La campaña de derecha aparentemente persuadió a Musk, quien dijo que no estaba de acuerdo con los comentarios de Jones sobre Sandy Hook, pero preguntó retóricamente: “¿Somos una plataforma que cree en la libertad de expresión o no?”, escribió en una publicación de X el sábado.
Jones es conocido como uno de los principales proveedores de desinformación del mundo. Tiene un largo historial de difusión de teorías de conspiración manifiestamente falsas y de incitación al odio sobre diversos temas.
Jones sugirió que la masacre de Sandy Hook, en la que murieron 20 niños y seis adultos, era un engaño. Los tribunales lo condenaron a pagar a las familias de las víctimas más de US$ 1.000 millones en concepto de daños y perjuicios por sus mentiras sobre el tiroteo, que atormentaron a los padres de los niños que murieron y derivó en un tsunami de acoso en el mundo real dirigido contra ellos.
Restaurar la cuenta de Jones está en línea con las decisiones tomadas por Musk desde que adquirió la empresa de redes sociales por 44 mil millones de dólares el año pasado. Musk también restableció la cuenta de Donald Trump y ha vuelto a dar la bienvenida a extremistas y racistas vetados antes de que él tomara el control de la red social.
La prohibición original de Jones en Twitter
Twitter suspendió permanentemente a Jones y otras cuentas vinculadas a su sitio web, Infowars, en 2018, citando un comportamiento abusivo y siguiendo medidas similares de YouTube, Apple y Facebook.
La decisión de la red, que entonces era Twitter, de prohibir permanentemente a Jones ocurrió un día después de que el ultraderechista acosara con odio al reportero de CNN Oliver Darcy en el Capitolio y transmitiera en vivo el encuentro en la plataforma.
Darcy se había convertido en uno de los principales objetivos de Jones por informar sobre sus mentiras y su comportamiento de odio. Ese reporte suscitó dudas sobre por qué se había permitido a Jones permanecer en las principales plataformas de redes sociales, a pesar de violar repetidamente sus propias normas sobre el odio y el acoso.
Durante el incidente de 2018 en el Capitolio, Jones le gritó con saña a Darcy por más de 10 minutos, llamando antiestadounidense al reportero de CNN de ascendencia de Medio Oriente, degradándolo como “menos que humano” y comparándolo con alimañas. Ese mismo día, Jones también despotricó contra el senador Marco Rubio en el pasillo.
En una serie de tweets del equipo de seguridad de Twitter en ese momento, la compañía dijo: “Hoy suspendimos permanentemente a @realalexjones y @infowars de Twitter y Periscope. Tomamos esta medida basándonos en nuevos informes de Tweets y videos publicados ayer que violan nuestra política de comportamiento abusivo, además de las violaciones anteriores de las cuentas”.
Un mes después de prohibir a Jones y la cuenta principal de Infowars, Twitter prohibió más de una docena de cuentas adicionales afiliadas al sitio web.
El cambio de Musk
Musk dijo en noviembre pasado que no restablecería la cuenta de Jones, incluso cuando trajo de vuelta a otras figuras controvertidas. El multimillonario explicó su posición en ese momento citando versículos de la Biblia y su propia experiencia personal al perder a su primer hijo a causa del síndrome de muerte súbita del lactante.
“Mi hijo primogénito murió en mis brazos. Sentí el último latido de su corazón”, tuiteó Musk. “No tengo piedad de cualquiera que utilice la muerte de niños para obtener ganancias, política o fama”.
Cuando algunos usuarios respondieron con frustración a la decisión de Musk de no restaurar la cuenta de Jones, Musk respondió en la plataforma: “Qué lástima”.
Pero Musk, que ha mostrado voluntad de interactuar con voces radicales desde que adquirió Twitter, parece haber cambiado de opinión. Aún así, la decisión de reinstalar en la red social a Jones pareció no sentar bien ni siquiera a algunos de los mayores partidarios de Musk.
El inversor Jason Calacanis, amigo e impulsor de Musk, y alguna vez considerado uno de los favoritos para convertirse en director ejecutivo de X, publicó el sábado que está “a favor de la libertad de expresión, pero lo que hizo Alex Jones al burlarse de los padres de los niños asesinados causó daños en el mundo real. Estos pobres padres hicieron que la audiencia amante de las teorías de la conspiración de Jones apareciera en el mundo real para acosarlos”.