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Así fue el operativo encubierto de Israel en un hospital en la Ribera Occidental
03:51 - Fuente: CNN

Washington (CNN) – El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, firmó un decreto que apunta a los colonos israelíes violentos de la Ribera Occidental que, según él, han socavado la estabilidad en la región, informaron a CNN un funcionario estadounidense y una fuente familiarizada con el asunto.

El nuevo decreto, del que informó por primera vez Politico, impondrá sanciones a varios individuos acusados de haber participado en actos violentos.

La medida va dirigida a cuatro personas acusadas de perpetrar directamente actos de violencia o intimidación en la Ribera Occidental, declaró un alto funcionario de la administración, entre ellas algunas acusadas de iniciar y dirigir disturbios; incendiar edificios, campos y vehículos; agredir a civiles y dañar propiedades.

El Departamento de Estado anunció los nombres de los israelíes objeto del decreto, que bloquea sus activos financieros y les prohíbe entrar en Estados Unidos. Se trata de David Chai Chasdai, Einan Tanjil, Shalom Zicherman y Yinon Levi.

La Casa Blanca notificó al gobierno israelí sus planes antes de la orden, dijo un funcionario.

Los funcionarios declararon que recopilaron pruebas que, según ellos, demostraban el papel de estas personas en la violencia en la Ribera Occidental y que podrían resistir una revisión judicial, incluida información procedente de informes públicos.

Chasdai, según el Departamento de Estado, “inició y dirigió una revuelta en la que se incendiaron vehículos y edificios, se agredió a civiles palestinos y se causaron daños materiales en Huwara, que terminaron con la muerte de un civil palestino”.

Tanjil “participó en agresiones a granjeros palestinos y activistas israelíes a los que atacó con piedras y palos, lo que les causó lesiones que requirieron tratamiento médico”, según una hoja informativa del Departamento de Estado.

Zicherman, “según pruebas de video, asaltó a activistas israelíes y sus vehículos en la Ribera Occidental, a los que bloqueó en la calle, e intentó romper las ventanillas de los vehículos que pasaban con activistas dentro”. Acorraló a dos activistas, a los que hirió, según el Departamento de Estado.

Levi “dirigía un grupo de colonos que llevaban a cabo acciones que creaban una atmósfera de miedo en la Ribera Occidental”, según la hoja informativa.

“Dirigía con regularidad grupos de colonos del puesto avanzado de la Granja Meitarim que agredían a civiles palestinos y beduinos, los amenazaban con más violencia si no abandonaban sus hogares, quemaban sus campos y destruían sus propiedades”. Levi “y otros colonos de la Granja Meitarim han atacado repetidamente a múltiples comunidades de la Ribera Occidental”.

No está claro cuándo se produjo cada uno de estos actos.

Biden condenó estos actos de violencia en el pasado, y el tema es uno de los que el presidente ha tratado personalmente en los últimos meses con el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu.

El decreto llega en un momento en que el presidente se enfrenta a la reacción de sectores clave de su coalición política por su apoyo a Israel en su guerra contra Hamas en Gaza. Aunque no se espera que la medida aborde la situación en Gaza, será una de las acciones más significativas de Biden para criticar a Israel desde que comenzó la guerra tras el ataque terrorista del 7 de octubre de Hamas y podría ser una señal de Biden hacia los votantes musulmanes y árabe-estadounidenses que están molestos con su negativa a pedir un alto el fuego.

En diciembre, el secretario de Estado, Antony Blinken, anunció una nueva política para impedir que los colonos israelíes extremistas responsables de la violencia en la Ribera Occidental vengan a Estados Unidos.

El Departamento de Estado puede aplicar la política tanto a israelíes como a palestinos responsables de atentados en la Ribera Occidental, dijo Blinken en su momento.

En última instancia, se espera que la nueva política “afecte a decenas de individuos y potencialmente a sus familiares”, dijo entonces el portavoz del Departamento de Estado, Matt Miller.

La violencia de los colonos contra los habitantes de la Ribera Occidental fue uno de los principales focos del conflicto palestino-israelí desde mucho antes del ataque de Hamas del 7 de octubre. Cuando cientos de colonos israelíes arrasaron la ciudad de Huwara el pasado mes de febrero, la violencia resultante fue tan brutal que el comandante militar israelí sobre la Ribera Occidental se refirió a ella como un “pogromo”.

La violencia se ha recrudecido desde el 7 de octubre, junto con el temor de los palestinos a ser objeto de ataques de venganza. Decenas de palestinos murieron en la Ribera Occidental en las semanas inmediatamente posteriores al ataque de Hamas, al intensificarse la violencia de los colonos.

Se calcula que 700.000 colonos israelíes viven en la Ribera Occidental. No está claro en qué actos concretos participaron los destinatarios del decreto de Biden.

Biden planteó la cuestión de la violencia de los colonos en “casi todas las conversaciones diplomáticas que ha mantenido con dirigentes israelíes”, según un alto funcionario de la administración.

“Estas acciones suponen una grave amenaza para la paz, la seguridad y la estabilidad en la Ribera Occidental, Israel y la región de Medio Oriente, y también obstaculizan la realización, en última instancia, de un Estado palestino independiente que coexista con Israel y, por extensión, la paz y la estabilidad duraderas para palestinos e israelíes por igual”, declaró el funcionario.

En su intervención en el Desayuno Nacional de Oración en el Capitolio la mañana de este jueves, antes de promulgar el decreto, Biden reconoció el sufrimiento tanto de israelíes como de palestinos. Dijo que comprende el “dolor que sienten tantos aquí en Estados Unidos y en todo el mundo” en respuesta al “trauma, la destrucción en Israel y Gaza”.

“Valoramos y rezamos por las vidas arrebatadas y por las familias que han quedado atrás”, dijo Biden. “Por todos aquellos que viven en circunstancias terribles, hombres, mujeres y niños inocentes, retenidos como rehenes o sometidos a bombardeos, o desplazados sin saber de dónde vendrá la próxima comida, o si llegará”.

A principios de esta semana, el número total de muertos en Gaza desde el 7 de octubre ascendió a 26.422, con 65.087 heridos, según el Ministerio de Salud de Gaza, controlado por Hamas. Más de 1.200 personas murieron en el ataque original de Hamas contra Israel y más de 200 fueron tomadas como rehenes.

“No sólo rezamos por la paz”, continuó, “trabajamos activamente por la paz, la seguridad y la dignidad del pueblo israelí y del pueblo palestino”.

Biden afirmó que se dedicaba a traer a casa a los rehenes retenidos por Hamas “día y noche”, y que también trabajaba para “aliviar la crisis humanitaria y llevar la paz a Gaza e Israel y una paz duradera con dos Estados para dos pueblos”.