(CNN) –– La votación de la Cámara de Representantes para llevar a juicio político al secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, fracasó la noche de este martes, en lo que marca un duro golpe para los republicanos que impulsaron el esfuerzo como un objetivo político clave.
La votación de la Cámara quedó 214-216. Tres republicanos ––el representante de Colorado Ken Buck, el representante de Wisconsin Mike Gallagher y el representante de California Tom McClintock–– se unieron a los demócratas para votar en contra de la resolución. El republicano Blake Moore se unió al lado del no para permitir que el Partido Republicano vuelva a plantear la votación.
Debido a los estrechos márgenes de mayoría en la Cámara, los republicanos únicamente podían darse el lujo de perder un puñado de votos. Las ausencias y deserciones de última hora hicieron imposible que quienes impulsaban la medida lograran el apoyo necesario a tiempo para la votación de este martes en la noche.
La votación fallida subraya los desafíos que enfrentan el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, y la bancada republicana al intentar navegar por una mayoría escasa que tiene una variedad de opiniones.
Los republicanos de la Cámara de Representantes afirman que Mayorkas ha cometido graves delitos y faltas por su manejo de la crisis en la frontera sur, aunque varios expertos constitucionales han dicho que la evidencia no alcanza ese alto nivel.
Además, el esfuerzo de juicio político se produce mientras los republicanos de la Cámara enfrentan una presión cada vez mayor por parte de su base para responsabilizar al Gobierno de Biden de un tema clave de campaña: la frontera sur.
En la historia de Estados Unidos, solo un funcionario de gabinete ha enfrentado un juicio político: el secretario de Guerra William Belknap en 1876.
Antes de la votación, el presidente de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes, Mark Green, de Tennessee, quien ha liderado el esfuerzo de juicio político, se reunió con algunos de los republicanos que se resistían a apoyar la medida, según fuentes del Partido Republicano.
Mientras que los republicanos en la Cámara argumentan que el remedio para solucionar la crisis en la frontera sur es llevar a juicio político a Mayorkas y presionar al presidente Joe Biden para que adopte más medidas ejecutivas, sus homólogos en el Senado han trabajado con colegas demócratas para construir un acuerdo fronterizo que hace cambios largamente esperados sobre la ley de inmigración. Pero Mike Johnson declaró que el acuerdo del Senado estaba “totalmente muerto” cuando llegara a la Cámara de Representantes después de que se publicara el texto el domingo por la noche.
Si bien los republicanos han estado investigando el manejo que le ha dado Mayorkas a la frontera desde que recuperaron la mayoría en la Cámara de Representantes, el impulso para planear un rápido juicio político contra el secretario cobró fuerza el mes pasado cuando los republicanos clave de los distritos indecisos expresaron una nueva apertura a la idea en medio de un reciente aumento de cruces de migrantes en la frontera sur.
Green ha argumentado que la “negativa deliberada y sistémica de Mayorkas a cumplir con la ley” y el “abuso de la confianza pública” equivalen a delitos graves y faltas. Green afirmó que Mayorkas “excedió intencionalmente” su autoridad de libertad condicional, “se negó a cumplir” con los mandatos de detención y mintió al decir que el Departamento de Seguridad Nacional tiene “control operativo” sobre la frontera. Citó al juez de la Corte Suprema Samuel Alito, quien dijo que el Congreso podría “emplear las armas de la guerra entre poderes”, incluido el juicio político, a la luz del fallo de la Corte Suprema de que los estados no podían impugnar la ley federal de inmigración.
Pero una variedad de juristas han cuestionado los argumentos legales que los republicanos están utilizando para apoyar su esfuerzo de juicio político.
Alan Dershowitz, quien representó al expresidente Donald Trump en su primer juicio político, dijo que los republicanos de la Cámara de Representantes no tienen pruebas para acusar a Mayorkas.
“Independientemente de lo que Mayorkas haya hecho o no, no ha cometido soborno, traición ni delitos ni faltas graves”, escribió Dershowitz en un artículo de opinión.
El exsecretario del Departamento de Seguridad Nacional Michael Chertoff, quien sirvió bajo el presidente republicano George W. Bush, el experto en derecho constitucional Jonathan Turley, que ha sido llamado por los republicanos para actuar como testigo en las audiencias, y 25 profesores de derecho han escrito sobre por qué los republicanos no han presentado pruebas contra Mayorkas que alcanza el nivel de juicio político.
Mayorkas, quien, según el departamento, se reunirá con el personal en Mountain View, California, el martes para hablar sobre ciberseguridad e inteligencia artificial, envió una carta a los republicanos de la Cámara de Representantes para defender su historial en el servicio público.
“Mi respeto por la aplicación de la ley me fue inculcada por mis padres, quienes me trajeron a este país para escapar de la toma comunista de Cuba y permitirme las libertades y oportunidades que brinda nuestra democracia”, dijo Mayorkas.
Mayorkas escribió que “los problemas con nuestro sistema de inmigración fallido y obsoleto no son nuevos” y pidió ayuda al Congreso para proporcionar una solución legislativa a la “cuestión históricamente divisiva”. Elogió al grupo bipartidista de senadores con el que ha trabajado por su disposición a dejar de lado sus diferencias para tratar de encontrar soluciones en la frontera.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) también criticó a los republicanos de la Cámara de Representantes por la próxima votación del comité, calificándola de “farsa” y “distracción de otras prioridades vitales de seguridad nacional”.
En un memorando, el DHS criticó la investigación de juicio político, argumentando que no hay delitos ni faltas graves, que la investigación estaba “predeterminada desde el principio” y que el proceso es “cínico e hipócrita”.
En respuesta a los republicanos que culpan a Mayorkas por el aumento en los cruces fronterizos, el memorando del DHS afirma: “Este Gobierno ha deportado, devuelto o expulsado a más migrantes en tres años que el Gobierno anterior en cuatro”.
Al abordar la afirmación de que Mayorkas no ha logrado mantener el control operativo sobre la frontera, el DHS dijo que, según la forma en que la ley define el control operativo, “ninguna administración ha tenido jamás control operativo”.
Los demócratas del Comité de Seguridad Nacional han criticado repetidamente a sus colegas republicanos por sus esfuerzos para destituir a Mayorkas y han publicado un informe calificando el esfuerzo del Partido Republicano como “una farsa”.
Mientras tanto, la Casa Blanca emitió un comunicado calificando la resolución para acusar a Mayorkas como “un acto de represalia política inconstitucional y sin precedentes que no haría nada para resolver los desafíos que enfrenta nuestra nación para asegurar la frontera”.
En lugar de iniciar formalmente una investigación de juicio político con una votación en la Cámara de Representantes, el esfuerzo del Partido Republicano para acusar a Mayorkas se ha llevado a cabo unilateralmente a través del Comité de Seguridad Nacional, a diferencia del Comité Judicial de la Cámara, donde normalmente se originan los artículos de juicio político, aunque no es un requisito constitucional.
En la fase de investigación, los republicanos del Comité de Seguridad Nacional celebraron 10 audiencias, publicaron cinco informes provisionales y realizaron 11 entrevistas transcritas con agentes actuales y anteriores de la Patrulla Fronteriza. Pero desde que se inició la investigación, el panel liderado por el Partido Republicano ha celebrado solo dos audiencias y ha decidido seguir adelante con los artículos de juicio político sin darle al secretario la oportunidad de testificar.
Los republicanos invitaron a Mayorkas a testificar en una audiencia de juicio político el 18 de enero, pero el secretario dijo que recibiría a funcionarios de México para discutir la vigilancia fronteriza y pidió trabajar con el comité para programar una fecha diferente, según una carta obtenida por CNN.
Con información de Lauren Fox, Melanie Zanona y Priscilla Alvarez